JUEVES 11 DE MAYO DE 2000
* Un desconocido habría liquidado la caución
CGH: provocación, el pago de fianza de La Jagger y El Chon
* Misa en la explanada de rectoría en apoyo a los encarcelados
Roberto Garduño y Gustavo Castillo * El Consejo General de Huelga calificó de "provocación" el pago de la fianza de Leticia Contreras (La Jagger) y Salvador Ferrer (El Chon), a manos de una persona que se identificó como Ricardo de la Garza González. De tal hecho se desprende que ya no existía motivo para que ambos estudiantes permanecieran en el Reclusorio Norte, y entonces fueron obligados a abandonar esa prisión. Por otra parte, en la explanada de la rectoría sucedió un hecho inédito, pues al cumplirse cien días del encarcelamiento de universitarios, un sacerdote ofició una eucaristía al aire libre.
Por su parte, la rectoría hizo un nuevo llamado al CGH "para que centre la discusión en los seis puntos del pliego petitorio y reconozca los límites de la mesa de diálogo".
Al concluir el noveno encuentro entre las delegaciones de rectoría y el CGH en el auditorio Alfonso Caso, los representantes de Juan Ramón de la Fuente exhortaron ųa través de un comunicadoų a la comunidad universitaria a que participe en la discusión sobre el futuro de los vínculos con el Ceneval. La convocatoria refiere que aquélla deberá darse en el seno de un congreso.
Hasta ayer habían transcurrido cien días desde el encarcelamiento de universitarios que participaron en la huelga; para recordar la fecha, un grupo de padres de familia se dirigió a las afueras del auditorio Alfonso Caso ųdonde transcurría el diálogo entre el CGH y rectoríaų para extraerse sangre y pintar con ésta la palabra libertad, en una serie de cartulinas que fueron pegadas posteriormente en el interior del aforo.
Más tarde, a las 19:00, en la plancha principal del edificio de gobierno de la UNAM, el sacerdote Marco Salvattore ofició una misa con la intención de pedir por la liberación de los universitarios presos. Alrededor de un centenar de personas escucharon al religioso, que en su sermón se refirió a la injusticia que priva entre poderosos y pobres.
La mayoría de los asistentes al acto litúrgico eran madres de familia, que escuchaban en silencio al sacerdote: "Es injusto que se mantenga presos a paristas, acusados de delitos que no se pueden comprobar, como el de peligrosidad social", refirió el padre.
Más tarde, en la Facultad de Ciencias, el CGH emitió un boletín en el que cuestiona, entre otras cosas, una declaración de Francisco Labastida: "Después de haber roto la huelga, declara mantenerse al margen del conflicto, arguyendo el respeto a la autonomía. Una injerencia más directa de Labastida en el conflicto fue a través de su esposa (Teresa Uriarte), la directora impuesta por Barnés en el Instituto de Investigaciones Estéticas, quien encabezaba al grupo de las autodenominadas Mujeres de Blanco".
Sobre el diálogo, los huelguistas cuestionan a las autoridades, ya que "no dan muestras de querer resolver el conflicto... Creen que responder es lo mismo que solucionar".
Suspenden plebiscito en la ENTS
Mientras esto sucedía, en la Escuela Nacional de Trabajo Social (ENTS), donde se convocó para participar en un plebiscito sobre la estadía de Carlos Arteaga Basurto como director del plantel, el ejercicio fue suspendido por falta de quórum. Se informó que la consulta podría celebrarse el martes o el miércoles próximos.
Permanecieron más de cien días presos
Leticia Contreras y Salvador Ferrer obtuvieron su libertad bajo fianza la madrugada de este jueves, luego de permanecer más de cien días presos en el Reclusorio Norte. Ambos integrantes del CGH tenían, desde hace más de un mes, derecho a la libertad bajo caución, sin embargo, por propia voluntad, habían decidido continuar encarcelados.
La tarde de ayer miércoles una persona, "que no tenía interés procesal", solicitó al juez segundo de distrito fijara el monto de la caución para adquirir la póliza de fianza correspondiente, y con ello que los estudiantes salieran de prisión. Leticia Contreras había asegurado que permanecería en la cárcel hasta terminar su proceso penal, relacionado con los hechos de la Preparatoria 3. Asimismo, cuando conoció que tendría derecho a la libertad bajo caución, y que sólo requería solicitar que se le fijara el monto de la misma, se negó a hacerlo, ya que, adelantó, permanecería encarcelada en solidaridad con Guadalupe Carrasco Licea (La Pita). Lo mismo aconteció con Salvador Ferrer en relación con sus otros cinco compañeros presos.
Sin embargo, durante la noche del miércoles fueron notificados de que sus garantías fueron pagadas y que la juez segundo María del Carmen Pérez Cervantes había acordado otorgarles su libertad, por lo cual, y apegándose al reglamento de reclusorios, los dos universitarios fueron obligados a abandonar el centro penitenciario.