MARTES 9 DE MAYO DE 2000

Ť Conflicto interfamiliar por tierras: Carrasco

Gobernación desliga al EZLN de las emboscadas en Chenalhó

Ť Rabasa: en 72 horas podrían ser detenidos los responsables

Jesús Aranda y José Antonio Román Ť El secretario de Gobernación, Diódoro Carrasco, rechazó que las emboscadas registradas en el municipio de Chenalhó en los últimos días estén relacionadas con la presencia del EZLN en la zona o que "enrarezcan" el ambiente en el estado de Chiapas; en cambio, aseguró que las agresiones tuvieron que ver con conflictos familiares, asociados a un problema de tierras.

Entrevistado luego de la comida efectuada en el deportivo Plan Sexenal con motivo del 77 aniversario de la Unión de Voceadores, el funcionario agregó que ese asunto no compete a la Policía Federal Preventiva, porque si bien, se trató de un delito grave en el que tres miembros de una familia fueron muertos y otros tres heridos, se trata de un asunto del fuero común.

Al mismo tiempo, en respuesta tácita a los señalamientos que hizo la mañana de ayer el representante de Sony en México, Shin Takagi ante el presidente Ernesto Zedillo, sobre los altos índices de inseguridad que hay en el país, Carrasco señaló que en los últimos dos años se redujo en el país el índice de delitos, al pasar de 16 a 10 por cada mil habitantes.

Reconoció, sin embargo, que pese a los avances y el empeño que el gobierno federal ha puesto en la materia, "tenemos que hacer un esfuerzo para que los avances, que se miden en datos y en cifras y en estos operativos (policiacos), tengan una acreditación social, que la sociedad, que la gente, que la población los asuma, los reconozca".

Respecto de un posible resurgimiento del EZLN como consecuencia de los recientes hechos violentos registrados en Chiapas, Carrasco minimizó la presencia del grupo rebelde "confinado como está a un área territorial".

Destacó la política social con una inversión superior a los 10 mil millones de pesos en el último año para combatir la pobreza en la entidad; el esquema de seguridad de autoridades federales y locales "que nos permite mantener un clima de orden en el estado de Chiapas, y el compromiso gubernamental de insistir en una vía política".

No obstante, reconoció que los últimos intentos de diálogo del régimen con el EZLN no han tenido respuesta.

Por otra parte, confió en la próxima detención de los agresores en Chenalhó, toda vez que éstos ya fueron plenamente identificados.

Se trató de un asunto desafortunado, de un asunto lamentable, pero lo importante es que se identifique a los agresores y se aplique la ley, dijo el funcionario, quien consideró que no hace falta tomar medidas adicionales para preservar la seguridad pública en esa entidad.

Tenemos una presencia y apoyo permanente en Chiapas y una constante comunicación y coordinación de las fuerzas de seguridad pública con un grupo de trabajo que sesiona semanalmente "para estar muy atentos de estos acontecimientos, de su evolución, pero sobre todo de su resolución, no sólo de su información", dijo.

No intervendrá el Ejército

Por su parte, el coordinador para el diálogo y la paz en Chiapas, Emilio Rabasa Gamboa, afirmó que en menos de 72 horas se podría ejercitar acción penal en contra de los presuntos autores intelectuales y materiales del triple homicidio del domingo en el municipio de Chenalhó.

Entrevistado en el patio de la Secretaría de Gobernación, aclaró que este lamentable acontecimiento no tiene relación alguna con el conflicto del EZLN. No se les ha identificado a los presuntos responsables como miembros zapatistas, ni tampoco ha intervenido ni intervendrá el Ejército mexicano en la aprehensión de los presuntos culpables, ya que es una responsabilidad exclusiva del gobierno local.

No obstante, señaló la importancia de reforzar los mecanismos de seguridad en esa zona del estado, para que las diferencias que existan, en este caso con motivo de un predio cafetalero, no deriven en enfrentamientos y actos de violencia.

A pregunta expresa, Rabasa Gamboa expresó su preocupación sobre estos hechos de violencia, no porque ocurran en tiempos electorales, sino porque es responsabilidad del Estado mantener la seguridad, independientemente del momento político que se viva. Desde luego, también tenemos la responsabilidad de garantizar unas campañas y elecciones en calma, transparentes, de tal manera de que la ciudadanía pueda ejercer libremente su voto y no se vea inhibida por situaciones como esta.