MIERCOLES 19 DE ABRIL DE 2000

Ť Con lo de chaparrito, Fox se burla de 90% de los mexicanos, asegura


No se jugará la Presidencia en el debate: Labastida

Ť El candidato priísta espera un ataque masivo de sus contrincantes el próximo 25 de abril

José Gil Olmos Ť Entre los pasillos del viejo mercado de San Juan, en compañía de su esposa, Francisco Labastida rechazó que en el próximo debate de los candidatos se vaya a disputar la Presidencia de la República. Incluso, aventuró que se podrían repetir los insultos en los cuales Vicente Fox ha basado la mayor parte de su campaña, y ante las últimas burlas del panista sobre su estatura -1.75 metros, según su equipo- responde que con ello ofende a 90 por ciento de los mexicanos. "Me provoca risa", atajó.

Ante los vendedores de uno de los mercados más singulares de la ciudad, donde se pueden encontrar pescados y mariscos, pollo, faisán, venado, escamoles, perdiz, codorniz, tepexcuintle e incluso angulas españolas o francesas, a más de 3 mil 500 pesos el kilo, el sinaloense adelantó un "ataque masivo" en su contra de los demás contendientes en el encuentro del próximo 25 de abril.

"Se me van a echar todos encima, pero creo que lo importante no es la situación de los candidatos o lo que estén tratando ahí. Lo fundamental son los problemas de los mexicanos, que a la gente le alcance cuando vaya al mercado, que no haya carestía e inflación, que los salarios sean suficientes para comer bien, tener buena casa, para que se pueda comprar un coche o irse unos días a vacacionar".

Mientras su esposa María Teresa Uriarte compraba trucha, bacalao, romeros, chiles poblanos, percebes, tomates y otras verduras, que al final sumó un pago de 800 pesos, en medio de un remolino de cámaras y grabadoras Labastida insistió en que no lo inhiben los comentarios de "chaparrito" que Fox le propina cada que puede, o del banco que le pondrán en el debate para la transmisión televisiva.

"No, porsu puesto que no. No sólo no me inhibe, me provoca risa ver que se están metiendo en esas cosas", contestó sonriente mientras caminaba dejando atrás la zona de legumbres.

El olor marcó la diferencia dentro de la nave del mercado al entrar a la zona de pollos y pescado, y Labastida contestó también a las bromas que le hicieron los reporteros, y que inclusive se hacían entre sí mismos al paso de los puestos: "También hay chayotes sin espinas, para que no dejen huella", dijo uno, al referirse al dinero que aún distribuyen dependencias y gobiernos como parte de los usos y costumbres en las relaciones con la prensa.

-Oiga señor candidato, dicen que quienes acompañan al mercado (a sus esposas) son unos mandilones.

Las risas precedieron la respuesta y dejó que su esposa respondiera: "Si viera usted cómo es de mandilón este hombre", dijo bromeando. Sin embargo, horas más tarde, esta parte de la conversación fue borrada de la transcripción mecanográfica que hizo el área de prensa de la campaña, a cargo de Raúl Torres Barrón.

Algunos reporteros tomaron el vacío como censura y pronto se corrigió el error. Héctor Gandini, responsable de prensa en las giras, y Torres Barrón presentaron al transciptor ante los reporteros para que explicara que él había cometido el error al escuchar la entrevista.

Así, el término "mandilón" quedó salvado. Pero Labastida precisó a los reporteros que además de cocinar le gustan la mecánica, la carpintería y las actividades manuales.

El candidato todavía alanzó a comprar una serie de billetes de lotería a 600 pesos, y esquivó la nueva broma de doble sentido de los reporteros de si prefería pegarle al gordo o al alto. "Prefiero sacarme el premio, y el premio mayor", contestó.

Protegido por pocos elementos de seguridad, Labastida dejó el mercado capitalino como parte de la nueva estrategia de arraigar su imagen en esta ciudad gobernada por el PRD. Momentos antes de retirarse, algunos comerciantes le prometieron su voto, pero algunas amas de casa cuestionaron su lema de campaña: "ƑEn dónde nos ve o en dónde nos oye?, porque así, con tantos reporteros, no puede ver ni oír a nadie".