CLASE POLITICA Ť Miguel Angel Rivera
Todos los partidos políticos, sobre todo los de oposición, coinciden en que las elecciones presidenciales del 2 de julio venidero serán las más trascendentes para el país en las últimas ocho décadas. Sin embargo, los concesionarios de las principales empresas de radio y televisión no están de acuerdo.
Para radiodifusores y propietarios de las más poderosas cadenas de medios electrónicos siempre será más importante una buena telenovela que un debate entre los candidatos enfrascados en la contienda que podrá marcar el futuro de México por muchos años.
Los agradecidos serán seguramente esos televidentes que tienen su atención cotidiana puesta en lo que le pueda suceder al galán de moda y a la heroína de las "pantallas chicas", así como en el castigo que puedan recibir el infaltable villano o la despechada rival de amores.
Estas sí son cuestiones de alto interés para la mayoría de televidentes y no las propuestas de los candidatos presidenciales para enfrentar problemas tan graves como el de la inseguridad o sus proyectos para acabar con el que parece inextinguible conflicto de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Esta no es una mera suposición. Es una realidad que lamentablemente vive nuestra nación. El ejemplo está en las decisiones --suponemos que tomadas por separado-- de las dos principales empresas televisoras, y no pocas cadenas de radio, de dejar la transmisión del debate entre los candidatos presidenciales para canales secundarios, y no para las estaciones que son sus insignias.
Lo anterior significa que los candidatos de "partidos pequeños": Porfirio Muñoz Ledo, del PARM; Manuel Camacho Solís, del PCD, y Gilberto Rincón Gallardo. de Democracia Social, tendrán que buscar un motivo más importante que la Presidencia de la República para poder aparecer en el Canal 13 de Televisión Azteca o en el Canal de las Estrellas de Televisa.
Decisiones como las mencionadas, de dejar el debate de los candidatos presidenciales del próximo día 25 fuera de los mejores canales de televisión, son las que dan argumentos a los legisladores de oposición, y no pocos del partido en el gobierno, para pedir una revisión a fondo de las concesiones y los tiempos oficiales.
La cosecha
El director general de Aduanas del Sistema de Administración Tributaria, Omar Fayad, renunció a su cargo para buscar una diputación federal por el PRI. De inmediato se movió la maquinaria oficial y se encontró a un sustituto, Alvaro Quintana Elorduy, ayer ratificado en el Senado. Como muchos otros funcionarios del sector financiero federal, el nuevo titular de Aduanas presentó un impresionante currículum que incluye, por supuesto, posgrados en el extranjero. Ante eso parece poco importante consignar que Quintana Elorduy es sobrino de la señora Lulú Ululami Quintana Pali, esposa del secretario de Hacienda, José Angel Gurría... El gobernador de Guerrero, René Juárez Cisneros, no sólo presentó su primer informe de labores ante un Congreso local con alta presencia de las oposiciones, sino que inclusive entró en la nueva modalidad de escuchar, primero, las posiciones de los diferentes partidos políticos. Una vez concluido el protocolo, iniciará intenso recorrido por todo el estado para hablar directamente con los ciudadanos que han recibido obras de su gobierno o que tienen nuevas demandas. Para empezar irá a Ometepec, cabecera de una de las regiones con más necesidades en su entidad...