MARTES 18 DE ABRIL DE 2000
Ť Llevan a la quiebra a sectores industriales
Pequeños empresarios, contra las políticas del Banco Mundial
Mayela Delgadillo Ť La Asociación Latinoamericana de Micro, Pequeños y Medianos Empresarios (Alampyme) se unió a las voces de rechazo contra las políticas aplicadas por el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional (FMI) que profundizan las desigualdades sociales y continúan llevando a la quiebra a sectores industriales enteros de los países en vías de desarrollo.
El organismo manifestó que estos organismos mundiales mantienen sobre los gobiernos latinoamericanos un férreo e intransigente tutelaje que les permite subvencionar productos en sus países, pero aplican barreras arancelarias para el ingreso de artículos producidos en el llamado tercer mundo.
Los países representados por el BM y el FMI, agregó Adán Rivera, presidente de la ANIT-México, son los mismos que en nombre de la calidad del servicio y la eficiencia, acotaron al máximo la presencia de los Estados nacionales con el argumento de que el mercado regularía la distribución, a sabiendas de que sólo regula en el sentido de la concentración.
''Concentración del poder económico, concentración del poder político y aumento de las desigualdades entre ricos y pobres'', es el resultado.
Alampyme mencionó que los que están firmemente comprometidos con el objetivo de lograr una adecuada distribución de la riqueza que incluya a todos los miembros de la sociedad, saben que la continuidad de sus políticas neoliberales --fundamentalistas del mercado-- sólo es posible aumentando la exclusión y la marginalidad. ''La miseria, las muertes infantiles, la falta de salud y educación, son los trágicos y verdaderos resultados de sus políticas'', aseveró.
La organización latinoamericana está integrada por la Asociación Nacional de Industriales de la Transformación (ANIT), de México; la Asociación Brasileña de Empresarios de la Ciudadanía (Cives); la Asociación de Medianos Empresarios de Argentina (Apyme); y la Asociación de Empresarios Sandinistas de Nicaragua, quienes se solidarizaron con las organizaciones y sindicatos que se manifestaron el 16 y 17 de abril en Washington durante la reunión que llevaron a cabo el FMI y BM.