La Jornada martes 18 de abril de 2000

ASTILLERO Ť Julio Hernández López

Durante largos años ha dedicado la Universidad de Colima una importante porción de su presupuesto para cultivar relaciones públicas con políticos, artistas e intelectuales de importancia nacional, sobre todo con aquellos cuyas posturas públicas muestren actitudes progresistas o, cuando menos, avanzadas.

Tal estrategia de apenas disfrazada cooptación pasa por las invitaciones a dar conferencias "magistrales" o a participar en reuniones y seminarios sobre diversos temas. Las invitaciones suelen ser extendidas a los miembros de las familias de los disertantes, quienes pueden así disfrutar de cómodos fines de semana en las playas de Manzanillo o en algún otro de los bellos sitios de la geografía colimense.

La Universidad Porrónoma de Colima

Tan buscado maquillaje externo trata de disimular una terrible realidad interna: esa universidad ha sido dominada durante décadas por un grupo de origen porril que dirige Fernando Moreno Peña, quien era rector de la casa de estudios antes de ser postulado por el PRI como candidato a gobernador, cargo éste que ahora ocupa a pesar de las varias demostraciones que hubo del fraude electoral y las manipulaciones con las que se hizo ganar al jefe real del llamado Grupo Universidad.

La trinidad PRI-gobierno del estado- universidad ha cultivado no sólo a los intelectuales y artistas con los que trata dar lustre a su siniestra realidad, sino también a los políticos priístas de moda. En el sexenio que está por terminar se ha trabajado con afán en busca del apoyo de la familia colimense Velasco, a la que pertenece Nilda Patricia, esposa del presidente Zedillo. Ahora, se usa el presupuesto público (del que se nutre la citada universidad) para servir a la campaña del candidato presidencial priísta, Francisco Labastida, cuyo hermano no incómodo, sino cómodo y poeta, Jaime, le organizó la semana pasada una reunión con intelectuales a la que el abanderado tricolor acudió personalmente y después de la cual se sirvió una comida privada de innegable índole proselitista.

Huele a PRI, camina como PRI, habla como PRI, pero dicen que no fue un acto del PRI...

El mencionado encuentro se realizó en Manzanillo y se denominó Reunión de análisis en torno a la cultura nacional. Asistieron unos 100 intelectuales a los que se pagó traslado, hospedaje y alimentos. El principal organizador fue Jaime Labastida Ochoa, quien aseguró que había sido convocado por la Universidad de Colima para organizar el encuentro y que las conclusiones él se las entregaría a su hermano Francisco y no a otros candidatos, como Vicente Fox, pues no le unía lazo fraterno con nadie más. Otro personaje notable en la conducción del programa fue Teresa Uriarte de Labastida. Según Carlos Salazar Silva, vicerrector de la Universidad de Colima (pues el rector real lo sigue siendo el gobernador Moreno Peña), la reunión no tuvo intenciones partidistas y habrían sido invitados todos los candidatos presidenciales, aunque curiosamente sólo habría asistido Labastida. Otros candidatos negaron que se les hubiese invitado a tal reunión.

Las sorprendentes coincidencias fueron más: el citado Labastida presentó ese mismo día, allí en Manzanillo, su propuesta cultural, justamente frente a la mayoría de los asistentes a la reunión previa.

Tales maniobras no son nuevas ni únicas. Con ellas, el grupo porril que domina las políticas universitaria y gubernamental teje lazos políticos (con frecuencia de complicidad) con los jefes nacionales priístas, con los candidatos y los presidentes. También se procura así acallar toda crítica importante, mediante la hospitalidad generosa con cargo a la nómina. (Por cierto, pocos meses atrás, tal universidad fue tomada ejemplarmente por el presidente Zedillo como plataforma a modo para lanzar desde allí un mensaje a los universitarios de todo el país, a propósito de la crisis de la UNAM).

Entre populistas y chaparros

Han vuelto a cruzar acusaciones pesadas los dos candidatos punteros en la carrera presidencial, Francisco Labastida y Vicente Fox. Entre otras cosas, el sinaloense ha acusado al guanajuatense de asumir posturas colindantes con el fascismo y de proponer programas económicos inflacionarios y populistas. El panista, a su vez, volvió a mezclar la crítica directa a las propuestas económicas y políticas del priísta (como la relacionada con la enseñanza del inglés y la computación en las primarias) con las alusiones personales a su estatura física.

Labastida quiso hacer pasar como impensadas sus intencionales críticas, pues al parecer le habrían sido sugeridas por los libros que fue ayer a comprar a la Ghandi de Las Lomas de Chapultepec, preparándose ya para las vacaciones de Semana Santa en las que presuntamente se dedicará a leer y "a terminar un libro" que espera que alguna editorial le publique, habiendo cuando menos dos interesadas, según sus propias revelaciones. El sinaloense escogió en las estanterías Mi siglo, de Günter Grass, y El seductor de la patria, de Enrique Serna. Del texto del escritor alemán, Labastida utilizó las referencias al periodo de Adolfo Hitler para advertir que "de los locos también hay que cuidarse". En esa misma intervención ante periodistas dijo que Vicente Fox está actuando como populista de derecha, prometiendo programas que costarían tanto y generarían tales descomposturas económicas que causarían una nueva crisis. Del libro de Serna, que se refiere a Antonio López de Santa Anna, ya no alcanzó a utilizar ningún pasaje Labastida para inculpar a Fox.

El guanajuatense, por su parte, dijo que las propuestas del sinaloense son "pírricas" y "chaparras". Además, aseguró que Labastida es un candidato "huidizo", pues quiere aparentar que no es corresponsable de los daños que el PRI ha causado a la nación, y que está chupando como sanguijuela la sangre de los Colosio, tanto del padre vivo como del hijo asesinado.

Habrá que estar atentos para ver qué más se alcanzan a decir Fox y Labastida antes de que los alcance la tregua de Semana Santa.

Astillas: La desesperación de la mafia es terrible, al grado de perder toda compostura y todo recato. Ya se vio que fue urdida una riña en el penal de Puebla, con incendio y demás, para impedir que en su momento declarara el tal cocinero Valencia. Ayer, un asaltante que no buscaba robar sino dejar un claro mensaje de intimidación, atacó al diputado panista que preside la instancia legislativa que justamente ayer debería avanzar en el proceso de instalación de juicio contra el secretario de los dobles libros, el conocedor profundo de las cuentas secretas, el ex regente y ahora miembro del gabinete. ƑDe veras no habrá cineasta que filme tan emocionantes historias?... Ayer, mientras participaba en debate radiodifundido en Cuernavaca, se desmayó Graco Ramírez, candidato perredista a senador por aquella entidad. Según los familiares de Graco, el desvanecimiento se debió a una baja en la presión arterial y tal vez a comida en mal estado que habría consumido el domingo en algún acto de campaña... En Baja California han arreciado las protestas contra Jesús Ruiz Barraza, un famoso ex priísta que ahora ha sido postulado por el PRD al Senado.

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