LUNES 17 DE ABRIL DE 2000
* Enfrentan problemas para vender cosechas y la caída de los precios
Sin ingresos, 20 mil familias de Chihuahua productoras de frijol
* También las afectan la importación ilegal del grano de EU y Canadá y la prolongada sequía
Miroslava Breach Velducea, corresponsal, Chihuahua, Chih., 16 de abril * Los problemas para comercializar el frijol y la caída de los precios en el mercado nacional, que están por abajo de los costos de producción, dejaron sin posibilidades de subsistencia a 20 mil familias chihuahuenses que dependen directamente del cultivo de esta leguminosa.
De acuerdo con la Secretaría de Desarrollo Rural (SDR) de la entidad, la saturación del mercado nacional, el contrabando de frijol extranjero y la falta de canales de distribución mermaron la economía de los productores temporaleros de la leguminosa, distribuidos en al menos 12 municipios chihuahuenses, lo que ha generado alta migración de campesinos a los centros urbanos y hacia Estados Unidos.
En 1999 Chihuahua produjo 83 mil 146 toneladas de frijol, y tenía almacenadas otras 17 mil de la cosecha de 1998, lo que generó una sobreoferta, dijo el titular de la SDR, José Luis García Mayagoitia.
Sin embargo, el problema no es sólo la falta de mercado para un producto cuyo precio ha descendido en los últimos cuatro años, sino que el cultivo de frijol es una de las escasas alternativas que tienen los agricultores de temporal de Chihuahua en las condiciones adversas de sequía que afectan la entidad desde hace diez años.
Informes de la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural (Sagar) señalan que del millón 100 mil hectáreas cultivables de Chihuahua, 900 mil son de temporal y el resto reciben agua de presas o pozos profundos que están a 50 por ciento de su capacidad, debido a la insuficiente precipitación pluvial.
En el último ciclo agrícola primavera-verano se destinaron 195 mil 193 hectáreas al cultivo del frijol, de las cuales 16 mil 296 se siniestraron totalmente por falta de humedad.
La siembra de frijol es una actividad económica principal en 12 municipios, donde los productores obtienen volúmenes suficientes para llevar cosechas al mercado, como Cuauhtémoc, Namiquipa, Cusihuiriachi, Bachíniva, Gran Morelos y Chihuahua, pero en 15 demarcaciones de la Sierra Tarahumara el cultivo del grano es fundamental para la economía de autoconsumo que ahí se practica.
En caída continua
De acuerdo con un análisis de mercado que realizó el Frente Democrático Campesino (FDC), la caída en los precios del frijol ha sido continua. En 1995, la leguminosa se comercializó en 5 mil 400 pesos por tonelada, pero un año después el precio disminuyó a 5 mil pesos, y se mantuvo así en 1997. Al liquidarse la Conasupo, en 1998, el precio del frijol se desplomó a 3.20 pesos por kilogramo, y al año siguiente se cotizó en 2.80 pesos por kilo. Mario Vázquez, dirigente del FDC, sostuvo que con esos importes los productores no tienen posibilidades de recuperar la inversión.
Ignacio Galicia, asesor del FDC, dijo que los campesinos aún siembran frijol porque sus hijos se fueron a Estados Unidos y envían dinero, "pero se quedan mujeres, niños y viejos, que apenas sacan para comer".
Por su parte, Fernando Flores, líder estatal de El Barzón, aseguró que "el cultivo del frijol no es rentable con bajos precios para el productor y altos al consumidor".
Competencia desleal
Para el gobernador Patricio Martínez, uno de los principales problemas que enfrentan los frijoleros es la competencia generada por comerciantes que introducen de contrabando granos procedentes de Estados Unidos y Canadá. Personalmente, el mandatario se comprometió con la Confederación Nacional Campesina, el FDC, El Barzón y la Unión de Productores a crear un frente para evitar la introducción ilegal de frijol al país, que sólo es posible por la corrupción en las aduanas.
Martínez García ofreció incluso que se disponga de agentes de la Policía Judicial del Estado para detectar camiones con leguminosa importada ilegalmente, y llevó a cabo gestiones ante la Secofi y la Sagar con el objeto de definir las cuotas de importación del grano. Sin embargo, esto no resolvió el problema global.
De las 83 mil toneladas de frijol cosechadas en el último ciclo agrícola, 67 mil se vendieron a 3 pesos el kilogramo, y todavía quedan pendientes de colocar 16 mil, así como otras 16 mil toneladas que los productores pignoraron con Banrural en 1998. Por el momento, el gobierno estatal vende estas últimas a través de las presidencias municipales, las recaudaciones de renta y la estructura seccional del PRI, en un programa que dirigentes de PAN y PRD han calificado de "electorero".
En la búsqueda de alternativas para enfrentar los problemas de comercialización, los frijoleros han planteado sembrar la variedad negra de la leguminosa, con el fin de atacar los mercados del Distrito Federal y de Guadalajara. No obstante, la sequía podría frustrar el intento, ante la total falta de humedad que prevalece en Chihuahua.