VIERNES 7 DE ABRIL DE 2000

Los pasivos del IPAB

 

* Orlando Delgado *

En el mismísimo Diario Oficial, el Instituto para la Protección del Ahorro Bancario (IPAB) publicó sus estados financieros auditados, en donde se establece que sus pasivos al cierre de diciembre de 1999 fueron de 722 mil 465 millones de pesos, lo que muestra una reducción de 150 mil 635 millones respecto al saldo en el primer semestre de ese mismo año. Así, como si nada, con la misma naturalidad con la que apenas unos días antes había informado que los famosos créditos para financiar al PRI fueron pagados unos cuantos días después de su vencimiento, ahora resulta que los pasivos se redujeron 17.25 por ciento en sólo seis meses, si atendemos a lo que el propio Corta informo oficialmente el 3 de septiembre pasado.

En ese momento, se acababan de hacer del conocimiento público las estimaciones de la calificadora internacional Standard & Poor's sobre el costo total del rescate bancario: 105 mil 138 millones de dólares, a lo que el IPAB respondió dos días después del informe presidencial, señalando el monto de sus pasivos al finalizar el primer semestre de 1999: 873 mil 100 millones de pesos, equivalentes a 92 mil 883 millones de dólares. La información financiera que ahora se presenta señala expresamente que el saldo del pasivo descendió 37.7 millones de pesos, respecto a junio; según este nuevo dato, incluso auditado, el saldo era de 760 mil 165 millones en ese mes.

Así las cosas, tenemos dos diferentes datos, informados por la misma institución, para la misma fecha, el 30 de junio de 1999: 100 millones y 760 mil 165 millones, una diferencia de casi 113 mil millones de pesos; no se trata, como se puede entender, de un asunto menor. Pero, a esta enorme diferencia deben agregarse las intervenciones del propio IPAB en dos bancos (Serfín y Bancrecer), que todo el mundo sabe que han implicado cantidades enormes de recursos para poder ponerlas en condiciones de venta. Recordemos que el "rescate" de Bancrecer, según las propias autoridades, requería 102 mil 200 millones de pesos, lo que fue autorizado en octubre; en consecuencia, representa un pasivo que debe agregarse al costo total del llamado proceso de saneamiento bancario.

En la información presentada se desagregan los pasivos en tres grandes rubros: los derivados del saneamiento de las instituciones bancarias por 369 mil 411 millones de pesos, los derivados de compra de cartera por 150 mil 446 millones de pesos y los derivados de las intervenciones administrativas a los bancos por 164 mil 138 millones, lo que suma 683 mil 995 millones, esto es, 94.7 por ciento del total de los pasivos. Según el IPAB hay cartera comprada a los bancos por un poco más de 150 mil millones, pero resulta que los bancos tienen registrada cartera vendida al Fobaproa por 348 mil 332 millones, 2.3 veces más de lo que nos dice el IPAB que tiene registrada, sin considerar Inverlat, Bancrecer, Unión, Cremi, Obrero, y los demás bancos intervenidos. La información de los bancos aparece en el boletín estadístico de Banca Múltiple de diciembre de 1999 y puede consultarse en www.cnbv.gob.mx

Así, de repente los números del IPAB no checan ni siquiera contra lo que él mismo ha señalado en ocasiones anteriores ni contra los datos oficiales de los bancos. ƑSerá que esta información tiene el mismo valor que la presentada para mostrar que los créditos al PRI fueron cubiertos? La credibilidad de la información del IPAB no parece muy sólida; probablemente por eso presentan información auditada, pero lo que los auditores no pueden probar es que sea consistente con lo presentado antes o con los estados financieros de los bancos, publicados por la propia Comisión Bancaria, de modo que al igual que con los verdaderos pasivos del proceso de rescate bancario, el IPAB aumenta sus pasivos con la sociedad. *