DOMINGO 2 DE ABRIL DE 2000
Ť Núñez y Andrade temen que aparezcan las viejas trampas del nuevo PRI
Zozobra entre priístas de Tabasco por comicios internos
René Alberto López, corresponsal y Mireya Cuéllar, enviada, Villahermosa, Tab., 1o. de abril Ť En una contienda que se espera cerrada entre Arturo Núñez Jiménez y Manuel Andrade Díaz, los priístas tabasqueños elegirán mañana a su candidato a gobernador. En la víspera, el ambiente es de zozobra, no sólo por lo incierto de los resultados, sino que el encono generado por las acusaciones mutuas creó un clima de polarización entre quienes están por la "continuidad" que representa el delfín de Roberto Madrazo y los partidarios del ex coordinador de los diputados priístas en San Lázaro.
Las cosas llegaron al punto de que Núñez es considerado el candidato de "la no relección" y Andrade el hombre del "madracismo". El primero ha dicho que no compite con otro precandidato del PRI, sino con el gobernador Roberto Madrazo y su aparato gubernamental. El segundo nunca lo desmintió, por el contrario se presentó ante los electores como el "continuador de los programas de Madrazo".
Esta mañana -a 24 horas de que abrieran las casillas- todavía se estaban repartiendo en algunos mercados y colonias populares volantes anónimos para confundir a los electores en torno a la fecha de la elección y acusando a Núñez de ser un desarraigado, el candidato "del centro". La situación preocupa tanto al priísmo nacional que hoy llegaron 15 enviados "de alto nivel" del Comité Ejecutivo Nacional -entre diputados, senadores y miembros del Consejo Político- para vigilar el desarrollo de la jornada.
En este contexto, el equipo de campaña de Núñez hizo pública hoy una grabación donde la secretaria de Educación, Graciela Trujillo, instruye a maestros de distintos municipios del estado para que actúen como promotores del voto en una operación hormiga y dado que están "tendidos" por todas las comunidades, "vamos a invitar a que voten lo más temprano posible, no nos vayamos a dormir con el cambio de horario". Como fondo, en la grabación, se escuchan arengas: šnosotros estamos con el licenciado Andrade!
En ambos bandos hay temor de que se pudieran dar acciones fraudulentas, al grado que disponen de sofisticados equipos y personal que vigilará los centros de recepción de votos a fin de cazar mapaches. Los nuñistas pusieron esta noche en marcha la operación tecolote, que consiste en no dormir toda la noche custodiando el lugar donde se instalarán las casillas para vigilar que las urnas no lleguen "embarazadas" y ser los primeros en votar.
Existe el antecedente de que el pasado 7 de noviembre, durante el proceso para elegir candidato a la Presidencia de la República, a las 11 de la mañana se había agotado la papelería. Esta situación obligó a los organizadores del actual proceso a imprimir 25 por ciento más boletas para disponer hoy de 412 mil papeletas, las cuales serán distribuidas en las mil 124 casillas que se dispondrán a lo largo del estado. Además de los mil 300 observadores de distintas organizaciones que vigilarán el proceso y los 15 "enviados de alto nivel" -también les dicen visores-, habrá un delegado del CEN en cada uno de los municipios como responsable del proceso.
Hay tantas desconfianzas por la forma como se dieron las campañas -los medios de comunicación local, salvo dos estaciones de radio, le cerraron totalmente las puertas a Núñez y cuando lo aludieron fue para minimizar sus actos proselitistas- que hay dudas en torno a la reacción del ex coordinador de los diputados priístas en San Lázaro en caso de una derrota que tenga visos de fraude.
De lo viciado del proceso hay muchos antecedentes. La semana pasada el diario Presente -que abiertamente respalda a Andrade- difundió un supuesto "Plan B" que sería orquestado por el equipo nuñista para violentar el proceso y acusar al candidato madracista de fraude. Según esto, en la estrategia estarían involucrados no sólo periodistas "afines" a Núñez, entre quienes es mencionado este corresponsal, así como los de Proceso y Reforma, sino que se involucra también a conocidos miembros de la oposición.
Se han publicado en los diarios regionales una serie de sondeos financiados por el gobierno -La Jornada tiene copias de algunas facturas pagadas a esas empresas encuestadoras- donde se concede el triunfo al candidato de Madrazo. Núñez no sólo las ha descalificado, sino que su enfrentamiento con el gobernador es de tal magnitud que públicamente lo acusa de haber "enloquecido con el triunfo que obtuvo en 1997 contra la oposición tabasqueña; de ahí, se soñó presidente y se inventó una aventura, se desequilibró y todavía no ha dado muestras de estabilidad emocional".
La oposición, especialmente la perredista -que ya fue instruida por Andrés Manuel López Obrador para mantenerse al margen- está expectante del proceso priísta, porque una eventual fractura los pondría en mejores condiciones para pelear la gubernatura el próximo 15 de octubre. Una desbandada nuñista fortalecería las filas del PRD. La diferencia de votos entre PRI y PRD en la última elección (octubre de 1997) fue de 25 mil sufragios. En esos comicios, el tricolor obtuvo 302 mil 744 y la oposición en su conjunto, 277 mil 169.