MIERCOLES 29 DE MARZO DE 2000
Ť Confieren al escritor mexicano el Premio Anagrama de Ensayo, en España
La tolerancia, uno de los rasgos más positivos de la actualidad: Monsiváis
Ť ''Desde hace pocos años la diversidad es la característica de Latinoamérica''
Ť El neoliberalismo, sistema de saqueo que declara a sus adversarios ''disidentes'', opina
Angel Vargas Ť A unos días de que recibió el premio Lya Kostakowsky, el escritor Carlos Monsiváis es merecedor de un nuevo reconocimiento. Ayer, en Barcelona, España, su obra Aires de familia. Cultura y sociedad en América Latina fue designada ganadora del Premio Anagrama de Ensayo, otorgado por esa prestigiada casa editorial.
El jurado destacó que el trabajo ganador -seleccionado de entre 53 participantes y que se hizo acreedor a cerca de 5 mil 800 dólares- resalta los cambios ocurridos en las sociedades latinoamericanas en décadas recientes, merced a una nueva cultura basada en la diversidad.
Las sociedades en América Latina se habían caracterizado, con ligeras diferencias, por ''unos mismos rasgos que se podrían resumir esencialmente en: religión mayoritaria, división entre liberales y conservadores y el mismo idioma", asienta el también cronista en Aires de familia...
Empero, abunda, desde hace pocos años la ''diversidad es la característica de Latinoamérica", originando una nueva cultura que consta de elementos como la abundancia de opciones religiosas, la tolerancia, la democratización, la influencia de las tesis feministas y la movilización de la sociedad civil.
Naciones gemelas, algo inconcebible
-ƑQué planteas en tu ensayo Aires de familia. Cultura y sociedad en América Latina?
-Imposible resumir siete ensayos sobre temas diversos como la noción de lo popular en la literatura latinoamericana, Hollywood y el cine latinoamericano, el heroísmo y el post-heroísmo, las líneas de continuidad cultural, lo entretenido y lo aburrido, la alteridad en el periodo 1880-1920, etcétera. Eso en cuanto a temas. En cuanto a tesis, las que haya en el libro, espero que no sean ni didácticas ni fácilmente reducibles en media cuartilla. Si esto es así, falló mi espíritu de síntesis.
-En tu opinión, Ƒqué factores han propiciado que sea la diversidad la principal característica de Latinoamérica?
-La diversidad es la principal característica del género humano y pronto, supongo, comenzará a manifestarse en los seres clonados. Una nación gemela de otra sería inconcebible, por más que se insista en la semejanza entre Monterrey y Houston. Pero en el libro, reconociendo que lo diverso es el descubrimiento del siglo XXI, insisto más bien en los puntos de coincidencia y de unidad entre los países latinoamericanos, a partir del idioma y de las prácticas religiosas, hoy tan diversificadas. Hay una tradición poética y novelística compartida, hay las señas de identidad del barroco y del modernismo (iberoamericano), hay la misma derecha fanática, los mismos liberales proféticos, los mismos radicales heroicos y dogmáticos, y si nos trasladamos hasta hoy los mismos procesos de americanización, la misma transformación urbana enloquecida y violenta, y la misma resistencia cultural al horror del neoliberalismo que es un sistema de saqueo que declara a sus adversarios ''disidentes".
Impulso sostenido
-ƑCrees que existe realmente un crecimiento de la tolerancia?
-Es uno de los rasgos más positivos de la etapa actual. Si la tolerancia, como se ha señalado en el último medio siglo, es insuficiente y debe ser trascendida, por ahora es indispensable y en la práctica entraña un doble reconocimiento: el derecho a existir de la diversidad que molesta o irrita a la mayoría, y las técnicas de coexistencia. La intolerancia ha sido la señal del poder y de la búsqueda del poder, y por eso caracteriza por igual a la Iglesia católica, a los gobiernos, a la derecha clerical, a la izquierda y desde luego a la ultraizquierda. Pero la tolerancia ha crecido en forma inesperada y consistente, y te lo señalan la mera circulación de términos como homofobia y sexismo, el descrédito del machismo y el éxito de una película como Los muchachos no lloran, sobre un caso real de crimen de odio por homofobia. La despenalización moral del aborto en muy vastos sectores (véanse las encuestas), la aceptación gradual de los gays, el que por vez primera se le conceda atención a la persecución de protestantes (no sólo en Chiapas), etcétera. Esto sucede en toda América Latina, incluso en donde todavía no se aprueba el divorcio.
-Si como cronista tu interés principal es contar al México contemporáneo, como ensayista, Ƒqué te motiva a reflexionar sobre Latinoamérica?
-La admiración, que es un impulso sostenido. A lo largo de dos siglos, para no hablar de las maravillas virreinales, se ha producido un arte y una literatura extraordinarios en América Latina, de Rubén Darío y Machado de Assis a César Aira y Francisco Toledo. Y al viajar por América Latina te sorprenden los puntos de contacto. No pretendo el conocimiento totalizador de Pedro Henríquez Ureña, Angel Rama o Jean Franco, pero en mi perspectiva ha sido central la obsesión de situar los vínculos y espacios de encuentros. Eso y el descubrimiento continuo de grandes escritores poco conocidos entre nosotros, pienso en César Dávila Andrade o Carlos Martínez Rivas, por ejemplo.
Creer en la mezcla de género
-Con éste, sumas dos premios consecutivos como ensayista, Ƒse puede decir que esta última faceta es consecuencia natural de tu quehacer como cronista?
-Siempre he creído, más o menos como casi todos, en la mezcla de género, en la fusión para hablar en términos musicales. El ensayo por su libertad, te permite y en ocasiones casi te exige la crónica. Aires de familia... es más ensayística en función de los temas, pero me permite salidas a la crónica. Y no me pidas que defina crónica y ensayo para no informar al evanescente lector de cómo mis limitaciones a la hora del diccionario instantáneo me han llevado a mezclar géneros.
-ƑCuál es tu valoración del lugar que ocupa en la literatura contemporánea el género ensayo?
-El ensayo ocupa un lugar notable. Ve la importancia de la reconsideración de Walter Benjamin o Elias Canetti o Borges o Paz o Lezama Lima. La interpretación le sigue siendo indispensable a una sociedad, no se puede prescindir de las valoraciones de un poeta o una moda o una etapa o una narrativa.
''Nos importan las lecturas de Guy Davenport, del constructivista Tattlin, de Beatriz Sarlo sobre los videojuegos y el Internet, de Sergio Pitol sobre la literatura europea, de José María Pérez Gay sobre literatura austriaca, de Guillermo Sucre y Tomás Segovia sobre poesía contemporánea, de Esther Seligson sobre los místicos judíos, de Guillermo Sheridan sobre los Contemporáneos, de Simon Frith sobre el rock, de Enrique Krauze sobre caudillos y presidentes, de Luis Miguel Aguilar sobre poesía, de Hugo Gutiérrez Vega sobre la provincia medieval, de Enrique Florescano sobre la memoria mexicana (Florescano es historiador y ensayista), de Margo Glantz sobre la literatura mexicana y latinoamericana, de Roger Bartra y Néstor García Canclini sobre antropología y sociedad, de Hugo Hiriart sobre lo que se le ocurra, de Antonio Saborit sobre la primera mitad del siglo XX en México, de Franco Moretti sobre la literatura europea del siglo XIX.
''La lista es interminable, y aún no he citado a los menores de 40 años, y a autores tan reconocidos como Susan Sontag, Carlos Fuentes y V.S. Naipaul, y no me he referido al ensayo político. Pienso ahora en Anthony Giddens, Timothy Garton Ash y Garry Willis. Y cómo no mencionar en el ensayo fílmico a Pauline Kael. Sin duda el ensayo continúa en auge.''