LUNES 20 DE MARZO DE 2000

* Anuncian acción de envergadura durante la semana previa a elecciones


Los rebeldes chechenos se reagrupan, dicen líderes

Afp, Ap y Dpa, Sleptosovsk, Rusia, 19 de marzo * La directiva de los rebeldes islámicos en Chechenia anunció hoy que sus combatientes están siendo reagrupados para lanzar "una acción de envergadura" en toda la república separatista durante la semana previa a las elecciones presidenciales del domingo próximo.

Según el portavoz rebelde, Movladi Udugov, el presidente checheno, Aslan Masjadov, reunió a todos los jefes militares en un consejo de guerra, para discutir el próximo ataque, al tiempo que se dieron órdenes a unos mil 500 rebeldes de reagruparse en los desfiladeros de Vedeno, tras huir de las últimas ofensivas de las tropas rusas, en regiones más al oeste de la república.

Udugov aseveró que Masjadov, junto con los dos principales líderes guerrilleros, Shamil Bassaiev y Jattab, estaban en algún lugar de Vedeno, planeando la nueva ofensiva rebelde.

Fuentes militares rusas reconocieron como auténtica esta información, y confirmaron el hecho de que los rebeldes están reagrupándose en los desfiladeros de Vedeno.

El anuncio de la nueva ofensiva rebelde en Chechenia ocurre horas después de que el primer ministro ruso y presidente interino, Vladimir Putin, anunció que pronto la mayor parte de las tropas rusas se retirará de Chechenia, por considerar que los guerrilleros ya no están en condiciones de lanzar acciones organizadas.

Agregó que las tropas rusas que permanezcan en Chechenia se encargarán de perseguir y liquidar a los pocos rebeldes que aún están atrincherados en las colinas del sur de la república, y que también vigilarán las fronteras con Daguestán e Ingushetia, con el fin de evitar al huida de los guerrilleros.

Putin es el favorito para ganar los comicios presidenciales, y confirmarse así en el puesto que le cedió Boris Yeltsin. La popularidad de Putin entre los rusos se atribuye a la "operación antiterrorista" que su gobierno ordenó tras una serie de atentados con bomba en Moscú y otras ciudades rusas, en los que murieron 300 personas.

Seis meses después de la ofensiva terrestre, las tropas rusas controlan la mayor parte del territorio checheno, pero los guerrilleros se encuentran ocultos en las montañas, y siguen emboscando a las patrullas rusas y atacando aldeas ya ocupadas por las tropas federales.