LUNES 20 DE MARZO DE 2000

Ť El Angel del Silencio, de Ponzanelli, está desaparecida desde el 7 de enero


Pedirán a la Interpol ayuda para recuperar obra

Ť El INAH reconoce como auténtico propietario a seudofamiliar de los descendiente de De Berrio

Bertha Teresa Ramírez Ť María Luisa Herrero Moncada, quien cuenta con el título de propiedad de la escultura El Angel del Silencio, realizada por el escultor italiano Adolfo Ponzanelli en mármol de carrara cristalino, buscará hoy el apoyo de la Interpol para localizar la famosa pieza, que fue retirada el pasado 7 de enero del mausoleo de los descendientes de De Berrio, en el cementerio del Tepeyac.

Herrero Moncada señaló que a pesar de haber sido raptada, despojada de recursos económicos y torturada la semana antepasada, no renunciará en su lucha por rescatar la valiosa obra, para así evitar "que una vez más se pisotee a la patria desapareciendo una obra que ya no pertenece a mi familia, sino a la nación, porque fue declarado monumento nacional".

angel 3 "ƑDónde está El Angel?, Ƒpor qué el INAH permitió que se lo llevaran con el argumento de lo que iban a restaurar, si la escultura no la necesitaba?", se pregunta Herrero Moncada, e indica que la misma afirmación la hicieron en días pasados los propios peritos del INAH.

Asimismo, también se pregunta por qué no se publicó en el Diario Oficial que había sido declarado monumento nacional, y afirma que por más de un siglo la escultura, valuada en más de 2 millones de pesos, permaneció en la tumba de los descendientes del marquesado del Jaral de Berrio, en el cementerio del Tepeyac.

Herrero Moncada asegura ser descendiente directa del marqués Miguel de Berrio y Saldívar, por lo que solicitó la intervención de Rosario Robles, jefa de Gobierno del Distrito Federal, con el fin que la escultura, realizada por Ponzanelli en el siglo XIX, sea devuelta a su sitio original.

En carta enviada a Robles Berlanga, relata que en 1896 sus antepasados directos ordenaron esculpir una pieza artística, a la cual se le denominó El Angel del Silencio, y que fue realizada en Italia por Adolfo Ponzanelli.

Agregó que sus antepasados también adquirieron una puerta de bronce con el escudo de la familia Moncada, que también perteneció al marquesado De Berrio, las cuales tienen un valor estimado de 2 millones 550 mil pesos, "aunque su valor como obra de arte es superior".

Las dos piezas fueron trasladadas a México a fines del mismo siglo y se instalaron en el mausoleo construido sobre las fosas número 13 y 14 del lote B del panteón del Tepeyac, perteneciente a su familia, según título original en su poder.

Agregó que a más de un siglo de que El Angel del Silencio se hallaba en el mausoleo del Tepeyac "apareció" un seudofamiliar, Jaime Guillermo Garagarza Magallanes, "quien mostró un interés descomunal" en restaurar tanto el ángel como la puerta de bronce, a pesar de que no lo requerían, y señaló que si algo se les tuviera que hacer sería limpiarlos, lo que no requería que se movieran del lugar donde se encontraban, tal como se había asentado en la acta de verificación 401-22-13-59 levantada el 19 de agosto de 1999 por el arquitecto Miguel Angel Castañeda, del INAH.

Sin embargo, dijo, Guillermo Garagarza obtuvo el permiso de las autoridades competentes y logró retirar ambas piezas el 7 de enero, y añadió que al darse cuenta de esa situación, sus abogados siguieron el vehículo que transportaba El Angel del Silencio y la puerta de bronce, logrando detenerlo a la altura de la delegación Azcapotzalco, por lo que hicieron la denuncia correspondiente y se abrió la averiguación 55/00072/00-DI.

Pese a ello, dos días después la agencia 55 del Ministerio Público entregó a Guillermo Garagarza, en calidad de depositario, las dos piezas, "cuando aún no se agotaba la averiguación y sin que quedara registrado su domicilio, por lo que se ignora el paradero de las dos obras".

Según opinión de sus abogados, "hay demasiadas incongruencias en trámites y permisos otorgados por las autoridades, que nos llevan a pensar que se está cometiendo un despojo de bienes artísticos e históricos del panteón del Tepeyac, y esto sólo lo puede hacer alguien con poder y con la idea de apropiárselos", se agrega en la misiva.

El director de Licencias, Inspección y Registro de la Coordinación Nacional de Monumentos Históricos del INAH, Dionisio Zavaleta, señaló que el legítimo propietario de la escultura es Guillermo Garagarza, quien además cuenta con una licencia de esa institución para restaurar y dar mantenimiento al monumento, la cual fue otorgada para 30 días y se amplió otros 30.

Indicó que Guillermo Garagarza realiza el mantenimiento de la escultura bajo la supervisión del INAH, e indicó que la obra no está catalogada como monumento nacional, pero sí la capilla donde se encontraba.

Explicó que para El Angel del Silencio existe una ficha de catálogo desde hace dos años, y señaló que una vez que Guillermo Garagarza termine de darle mantenimiento, se regresará la escultura a su lugar, pero si se pretende trasladarla a otro sitio tendrá que pedirse la autorización del INAH.