DOMINGO 19 DE MARZO DE 2000

* Ha pedido más de 300 libros: González Pérez


Narcisista, megalómano y voraz lector, perfil de Aburto

* Psicología y ajedrez, sus temas favoritos en Almoloya de Juárez

Elena Gallegos y Gustavo Castillo /II y última * En los gruesos legajos que forman parte del expediente del caso Colosio están plasmados hasta los más nimios detalles de la personalidad del asesino confeso, Mario Aburto Martínez. Narcisista, megalómano -según lo describe el fiscal Luis Raúl González Pérez-, Aburto es el recluso que más libros ha solicitado en el penal de alta seguridad de Almoloya de Juárez: 300 hasta el momento. Se ha empapado en las tácticas de ajedrez y, ávido, se bebió 12 textos de psiquiatría y psicología, y comenzó a hablar con fluidez de los síndromes menos conocidos.

Y así, mientras Aburto vive en ese mundo ''fantasioso'' tras el que se esconde, los involucrados en la ''apresurada teoría de la acción concertada en Lomas Taurinas'' -elaborada por el primer fiscal especial, Miguel Montes- padecen las consecuencias de haber quedado ''señalados'' para siempre. Tranquilino Sánchez Venegas subsiste en condiciones paupérrimas en un pequeño poblado de Jalisco; el viejo Vicente Mayoral y su hijo Rodolfo no pueden encontrar empleo. Héctor Hernández Tomasini, El Lentes, pierde su puesto de trabajo cada vez que lo citan a una diligencia.

''Nosotros no podemos aplicar la justicia como en la Francia de finales del siglo pasado -se refiere al caso Dreyfuss-, šimagínese qué costo tuvo la precipitación hasta en términos de credibilidad! šImagínese que alguien es condenado a pasar su vida en Almoloya por algo que no está plenamente comprobado!'', conviene Luis Raúl González Pérez.

-ƑUsted conoce a Mario Aburto?

-ƑA Mario Aburto? Sí... digo, lo conozco después. šNo se vaya a pensar que también estuve en el complot! -se da tiempo para una broma que él mismo se festeja con una sonora carcajada.

-ƑCuántas veces ha platicado con él?

-Sólo una vez -regresa a su habitual tono pausado-, en el pasado lo habían hecho los diputados, los senadores, Pablo Chapa, etcétera, y a mí me preguntaban Ƒpor qué no lo ha ido a ver? Yo fui hasta un año después que me encargaron la investigación. Entonces ya tenía muchos datos, muchos hechos documentados, llevé psiquiatras, especialistas para pulsarlo y le preguntamos sólo de cosas que ya teníamos corroboradas. Esto, con el antecedente de que ha venido contradiciéndose.

''Me acuerdo que le preguntamos, por ejemplo, si conocía a Javier Juárez. Lo negó y nosotros sabíamos que hasta un libro de Napoleón le había regalado. Se lo dijimos y lo tuvo que admitir. Ese fue el tono de la conversación que nos comprobó claramente la personalidad de Aburto, quien en esa ocasión nos negó incluso a algunas de las novias. Para poder probar que hubo complot tenemos que volver al círculo concomitante de Aburto y escarbar si por ahí encontramos el engrane que necesitamos para vincular al asesino material con los posibles autores intelectuales, para ver si hay personas detrás de él. Hasta ahorita, no las hay''.

-Escuchamos que Mario Aburto tenía un gemelo...

-Hemos investigado si hubo tres, ocho o diez Aburtos. Yo le voy a decir, con independencia de quién lo haya dicho, esa es una duda que se ha expresado desde el principio.

-Pero Ƒtiene o no un gemelo?

-No, no lo tiene. Lo podemos probar y en este punto, por lo menos, no ha habido contradicción entre los distintos fiscales. šAburto es Aburto! Adicionalmente a lo que se hizo antes, yo invité a especialistas de los distintos institutos de investigación de la UNAM. Yo soy egresado de esa institución, he trabajado ahí y sé lo que puede ayudar la investigación científica.

''Por ejemplo, los antropólogos analizaron las manos de Aburto y concluyeron que eran semejantes a las del sujeto que accionó el arma. Algo que me parece fundamental es el mapa de lunares de Mario. Los lunares son perennes e inmutables, y la probabilidad de que un sujeto tenga uno, dos, tres puede existir, pero que tenga más de 20 señalizaciones... špueeesss no!, y eso lo determinamos nosotros''.

-Oiga, y sobre el famoso Libro de Actas de Aburto...

-Existe y está plenamente probado que él es el autor. Escribe en él que las ganancias que se obtengan por su venta se destinen a apoyar a las universidades. El contactó en 93 a varios editores que, por supuesto, no lo tomaron en serio. šEse es Mario Aburto! Un Mario del que hemos reconstruido su vida lo más que ha sido posible.

-ƑEs cierto que buscó enrolarse en el ejército de Estados Unidos?

-No. Mario es fantasioso y gustaba de presumir con sus novias, chicas mucho menores que él, de 13 o 14 años. Jóvenes fácilmente impresionables y con problemas de desintegración familiar. Tenía también dos concubinas muy sui géneris -no detalla por qué- y nos encontramos con que leía muchos periódicos. Incluso tenemos una libreta en la que copiaba lo que en los diarios se publicaba... šhasta anuncios! En Almoloya ha solicitado muchos más libros que el interno más culto que pueda haber ahí. šHa pedido más de 300!

-ƑQué lee Aburto?

-De todo. Como luego le daba por desconfiar de los psicólogos, a los que llamaba psicolocos, pidió 12 libros de psicología y psiquiatría, y de repente nos salió con términos especializados...

-ƑSe mimetiza...?

-Sí, repite lo que lee. Un día habló de un síndrome que yo no conocía. Lo consulté con un especialista y me dijo que ese síndrome era rarísimo. Otra vez, pidió que tales y cuales agentes del KGB y de la FBI vinieran a su defensa...

-ƑMencionó nombres de los agentes?

-šSí, fíjese! Los había leído en la revista Selecciones -sonríe-, y para sentarse a jugar ajedrez consulta primero la bibliografía que tiene a la mano. Rechaza el ridículo. Si le sale mal algo, lo ensaya hasta que lo domina. Es obsesivo.

-Quiere decir que antes trató de matar...

-No, lo único que tenemos es su propio dicho en el sentido de que hace ocho años intentó hacerlo contra Salinas, pero él mismo comentó que por su corta edad pensó que estaba equivocado. Su personalidad es incuestionable: tiene un acendrado narcisismo, es megalómano, y hay rasgos de frustración.''Se sentía, šfíjense nada más!, presidente o secretario general de su familia, y esa era una manera de desfogar la frustración que le producía el no obtener lo que buscaba'', apunta González Pérez.

-ƑY qué cree que movió a Aburto...?

-Era su afán narcisista, megalómano. Yo no he detectado que le hayan pagado dinero por el asesinato de Luis Donaldo Colosio. La familia, radicada en Los Angeles, vive en condiciones similares a las que tenía en México (ocupaban una mínima casucha en una colonia marginal: la Buenos Aires).

-ƑY sobre la relación de Aburto con la pandilla del barrio Logan, en San Diego?

-Junto con la FBI y las agregadurías de México en San Diego y Los Angeles, rastreamos todas las posibilidades. Los resultados fueron negativos.

-Oiga Ƒa usted no lo han amenazado, presionado?

-Una vez nos avisaron que habría una bomba en el edificio -sus oficinas se ubican en la colonia Cuauhtémoc-, salí acompañando a todo el personal y luego regresé. Me dijeron que era un acto estúpido de mi parte, porque en esas cosas nunca se sabe. Quería demostrar que no nos iban a amedrentar. Fuera de eso, la presión solamente se ha traducido en expresión social.

-ƑSe acuerda de aquella teoría del fiscal Montes -la acción concertada-, en que parecía una jugada de futbol americano...? La investigación ha dado muchos giros. ƑSe pervirtió?

-Yo no usaría el término ''pervertir'', sino que la animosidad por encontrar las pruebas y creer que se tenían sin la prudencia de una decantación valorativa y jurídica de las mismas, propició que se consignara a varias personas. Después se tuvo que dar marcha atrás porque no había elementos para condenar a los acusados: Tranquilino Sánchez Venegas y Vicente y Rodolfo Mayoral.

''šEsas fueron algunas de las dificultades que me encontré dos años y medio de tiempo transcurrido después del crimen! Y luego, la absolución de las personas que eran señaladas como sospechosas. Constitucionalmente yo no podía volverlas a consignar. Sin embargo, dije que los investigaba como parte de la verdad histórica sin lesionar sus derechos. Tan fue así, que incluso los volví a declarar e investigar.

''Les puedo decir incluso que Tranquilino estuvo viviendo en un pueblito cercano a El Salto, Jalisco, en condiciones pésimas, paupérrimas... O que los Mayoral no podían obtener empleo. šEstán señalados ya! Fíjense, la mamá de El Lentes (Héctor Hernández Tomasini) amenazaba con huelgas de hambre en el Angel porque cada que citábamos a su hijo para las diligencias perdía su trabajo''

-ƑSe comprobó que los Mayoral, Aburto y Othón Cortés estuvieran vinculados en el homicidio de Colosio?

-No encontramos nada. No hubo acuerdo de voluntades. Nada que los uniera o los hubiera relacionado. šNo se analizó en aquel entonces dónde estaba el punto de conexión, dónde la complicidad! Incluso, aquella escena del mitin en Lomas Taurinas, donde se cruzan Rodolfo Mayoral y Aburto, mientras Luis Donaldo Colosio Murrieta decía su discurso. Trajeron expertos en leer los labios. Alcanzaron apenas a descifrar dos o tres fonemas de lo que ambos expresaron en ese momento. Pudieron haber sido expresiones circunstanciales, como quítate o hazte a un lado" Nada más. šImagínense que por eso alguien va a pasar su vida en Almoloya!

-ƑQué hicieron luego de ser liberados?

-Los seguimos monitoreando. Por ejemplo, Mayoral pidió un pasaporte. Me notificaron. Yo les dije, dénselo para saber a quién va a ver, y viajó a Estados Unidos. Allá tampoco encontramos nada.

-ƑLa FBI ha colaborado con ustedes para investigar a la familia Aburto?

-šMuchísimo! A la mayoría de los testigos los hemos ubicado en Estados Unidos. Pasan como ilegales. La búsqueda de personas que pudieron haber conocido a Mario ha sido extenuante.

-ƑHan interrogado a Wilfrido Robledo -director de la Policía Federal Preventiva-, quien jerárquicamente era uno de los jefes de Jorge Antonio Sánchez Ortega, aquel agente del Cisen del que se decía tenía un parecido extraordinario con Mario Aburto?

-No, no ha declarado -otra vez sonríe-, es curioso que me lo pregunten ahora que es titular de la PFP. Pero más allá de eso, les quiero decir que nosotros investigamos a Sánchez Ortega al derecho y al revés. Le buscamos en Estados Unidos. Encontramos también que tenía homónimos, que la casa que posee es de interés social, sabemos cómo entró al Cisen, lo interrogamos durante tres días con los intervalos del caso para respetar sus derechos humanos. Se le aplicaron pruebas de polígrafo y si bien no declaramos a Wilfrido, sí a su jefe inmediato.

-ƑPor qué aceptó la fiscalía?

-Desde la CNDH recomendábamos lo que debía hacer alguien. Aquí era probarnos que nosotros lo podíamos hacer. Cuando la opción se presentó, yo me preguntaba: Ƒcuál será el mensaje para mis hijos -entonces de 13 y 9 años- si les digo: fíjense que me ofrecieron ser responsable de esta investigación, pero como está muy compleja decidí que no?

-ƑPero a poco no sabía que era casi imposible resolver el...?

-Lo sabía, pero me animó el hecho de lo que hicimos en la CNDH.

-ƑQué puede esperar la sociedad?

-Exhaustividad en la investigación hasta el último momento de nuestra responsabilidad, y si en el camino encontramos la hebra, procederemos con todo el rigor.

-ƑCómo lo va a colocar la historia?

-No lo sé. Estaré dispuesto al juicio. Estoy tranquilo. Tengo la conciencia limpia. Cuando se analice nuestro paso por aquí se verá la intención de abrir, no de cerrar la investigación. Uno puede ser el juicio de la historia y el otro el juicio coyuntural al que estamos sometidos. Todo depende de quién lo haga.