SABADO 18 DE MARZO DE 2000
* Rain of fire
El reciente disco de Nine Rain es
un coctel exótico
Juan José Olivares * Ritmos que nacen en el ombligo de México, pasan por el calor de La Habana, vuelan por la luna en medio de una lluvia de fuego y se establecen en el corazón de eclécticos corazones que gustan de las exploraciones sonoras. Esto es todo lo que podemos sentir, no sólo escuchar, en el disco Rain of fire ųque será presentado en el festival Tajín 2000ų, segunda producción de la banda Nine Rain, agrupación liderada por el ex Tuxedommon Steven Brown.
Amante del mundo subterráneo, en el que ha estado "raramente" inmerso ("y aunque no sea mi derecho de declararme underground") para bien de nuestros oídos y con esa libertad creativa, Steve, con su nuevo clan ųJose Manuel Aguilera, guitarra y voz; Alejandro Herrera, en las jaranas; Nikolas Klau, en el bajo y la magia de las secuencias y samplersų ha diseñado este "coctel exótico" con grabaciones hechas en México y en La Habana, con el estilo Nine Rain, caracterizado por pianos, sax, sintetizadores, liras, bajos, contrabajos y todo lo demás que suene raro.
Dicen todos los integrantes al unísono y al calor de unas chelas: ''Fue una idea de Opción Sónica ųsu disqueraų el que se introdujeran ritmos cubanos. Aunque nos sorprendimos al llegar a la isla y escuchar a buenos músicos en la calle, a los cuales invitamos a tocar con nosotros, haciendo música que no es ni cubana ni mexicana, sino algo que suena extraño".
En la charla, estos músicos espontáneos y naturales definen su arte: "Somos una onda instrumental pacheca, o sea, como un woostockhouse. La verdad es que hacer está música es como liberarte, porque hacemos principalmente algo que nos gusta. Por eso consideramos que este nuevo disco es más específico, más claro: son ideas acústicas combinadas con la magia de la electrónica.
"Lo que realmente sale en un disco es mitad accidental, mitad lo que tienes en mente. Son los sonidos, de violines, percusiones, piano, samplers, sintetizadores, baterias que se unen".