MARTES 14 DE MARZO DE 2000
Ť Se acelera la apertura en el sector automotriz
Quedará libre la importación de pick-up usadas, en abril
Ť La disposición no tiene tintes políticos, aseguran subsecretarios
Patricia Muñoz Ríos Ť Las secretarías de Comercio, Hacienda y Gobernación anunciaron que a partir del próximo primero de abril quedará liberada la importación definitiva de vehículos usados tipo pick-up procedentes de Estados Unidos y Canadá, medida con la que se "apresuran" los tiempos de apertura para el sector automotriz, previstos en el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
La disposición " no tiene tintes políticos ni electoreros", según aseguraron en conferencia de prensa conjunta los subsecretarios de Ingresos de Hacienda, Manuel Ramos Francia; de Normatividad de Comercio, Raúl Ramos Tercero, y de Población y Servicios Migratorios de Gobernación, José Angel Pescador Osuna, y además, dijeron esperar la "comprensión" de los diferentes partidos políticos a tal medida.
También reconocieron que los industriales automotrices "no están muy contentos" con esta disposición que abre las puertas del país a vehículos usados, pero según advirtieron, esta medida no significa la entrada irrestricta de autos chocolate al país, ya que por el contrario se endurecerán las acciones para combatir la entrada ilegal de otros automóviles.
Al respecto, el subsecretario de Ingresos de Hacienda explicó que en el caso de los vehículos de importación deportivos o de lujo, así como de automóviles de cinco y menos años de antigüedad, ahora sí se procederá enérgicamente, pues "el gobierno federal intensificará de inmediato el decomiso de unidades" sin prórroga alguna.
Para los que sí se establecerá un plazo de gracia, será para aquellos poseedores de automóviles importados de más de cinco años de antigüedad que circulan ilegalmente en el país. Estos propietarios tendrán hasta el 13 de septiembre del 2000 para retornar al extranjero esas unidades bajo el programa de "Retorno Seguro" o bien ,"donarlas al fisco" .
Raúl Ramos precisó por su parte que sólo se permitirá la importación definitiva para pick-up mediante el pago de un arancel de 200 dólares y siempre y cuando estas unidades sean modelos 90 o anteriores, no tengan doble cabina o rodada, su carga máxima superior se encuentre entre 2 y 3 toneladas. Este esquema aplica tanto a los propietarios que cuenten con vehículos en el territorio nacional como aquellos que pretendan introducirlos.
Adicionalmente a esos 200 dólares, que se tendrán que pagar para poder internar definitivamente las unidades -equivalentes a poco más de mil 800 pesos-; se tendrá que realizar un pago de derechos por 140 pesos; y cubrir el impuesto sobre automóviles nuevos (ISAN) y el impuesto al valor agregado (IVA).
El presidente del Sistema de Administración Tributaria (SAT), Raúl Sánchez Kobashi, también asistente en esta conferencia, puso como ejemplo que un camión modelo 1990, de un costo aproximado de mil 200 dólares -casi 11 mil 100 pesos-, pagaría en total por gravámenes y derechos 4 mil 260 pesos, así como 500 pesos de honorarios del agente aduanal, pues se acordó con la Confederación Nacional de Agentes Aduanales que este procedimiento se realizará necesariamente a través de estos prestadores de servicios.
Añadió Ramos Tercero que estas importaciones quedan abiertas para todas las personas que las quieran realizar, pues se decidió que no fuera sólo para asociaciones campesinas u de otra índole, pues esto daba lugar a prácticas de presión política por parte de algunas organizaciones en contra de las autoridades.
La liberación da a los "paisanos" residentes en el exterior, que tradicionalmente ha sido uno de los grupos interesados en importar vehículos usados, una opción legal para cumplir con su aspiración de aportar un instrumento de transporte y trabajo a sus comunidades de origen.