LUNES 13 DE MARZO DE 2000
* Las no creyentes, promiscuas y condenadas a la infidelidad: Desde la Fe
Mujeres religiosas, las más satisfechas sexualmente
Las mujeres con fuertes principios religiosos y que acuden con frecuencia a su sinagoga, templo o iglesia, "experimentan niveles significativamente mayores de satis- facción sexual que las no religiosas", se afirma en un artículo que publica en su último número Desde la Fe, órgano informativo de la Arquidiócesis de México, que lo anuncia como nota principal en su primera plana.
Pero las que no hacen oración ni asisten a una institución religiosa, "acaban por ser promiscuas, evitan involucrarse emocionalmente" y estarían condenadas a la infidelidad, según el texto que se distribuyó en la Catedral Metropolitana durante la homilía del cardenal Norberto Rivera Carrera, en la que el prelado se congratuló porque el Vaticano "reconoció sus faltas históricas y públicamente pidió perdón".
El artículo "Religión y relaciones sexuales plenas", con el subtítulo "Caen los mitos freudianos ante la ciencia", reproduce extractos de la revista estadunidense USA Today sobre una supuesta tesis de investigadores de la Universidad de Chicago, según la cual "numerosos estudios demuestran que las mujeres que asisten a sus templos y los hombres que duermen con ellas son las personas más satisfechas en el plano sexual. ƑNo llama (eso) la atención?", se pregunta en la cita.
La autora de esa colaboración, Roxana Benavides, arremete contra el "feminismo radical (que) critica con mayor encono a las mujeres religiosas, las desprecia y se burla de ellas como si se tratara de bichos raros", y contra el padre del psicoanálisis, Sigmund Freud, que "decía que (las mujeres religiosas) sufrían neurosis obsesiva y represión sexual".
Y añade: "Pues bien, la realidad desmiente categóricamente a Freud y a ese feminismo. Con mucho interés leí un artículo titulado 'La Revancha de las damas que van a la iglesia', de William R. Mattox, en la revista USA Today, sobre la religión y las relaciones sexuales".
De acuerdo con los extractos que se reproducen en el artículo del número 160 de Desde la Fe, los investigadores citados concluirían que "esa mayor respuesta sexual (de las mujeres religiosas) se debe a una mayor conexión entre compromiso espiritual y satisfacción sexual.
"Las damas que hacen oración continuamente gozan de paz y tranquilidad, no tienen miedo de ser abandonadas, no se sienten utilizadas ni se sienten despreciadas. Las mujeres no religiosas tienden a fijarse más en los comportamientos físicos y en las 'técnicas (sexuales) como si se tratara de una sesión de gimnasia'..." En cambio, las no religiosas o que no hacen oración ųsigue la cita reproducidaų "acaban por ser promiscuas y evitan involucrarse emocionalmente: la infidelidad es algo natural en ellas".
Benavides suma sus opiniones a las citas y sostiene que "las mujeres con fuertes creencias religiosas están convencidas de que el acto de amor con el hombre elegido para compartir toda la vida (...) es bendecido por Dios, es intenso, emocionante, como el primer día y siempre nuevo. Es una nueva dimensión del amor en la que se entrega el alma y se forma un solo cuerpo y un solo corazón".
Tanto Desde la Fe como Nuevo Criterio, también editado por la Arquidiócesis de México, dedicaron esta semana amplios espacios y sus primeras planas a información relacionada con las mujeres, en el contexto de la celebración de su Día Internacional.
Nuevo Criterio, por ejemplo, presenta una carta del obispo auxiliar de Lima, Perú, y miembro de la Comisión del Episcopado Latinoamericano, y un amplio artículo central desde donde se lanzan críticas a grupos feministas y se previene sobre los "peligros y alcances" de lo que dan en llamar "ideología de género".
En ambos textos se advierte que "para los promotores de la ideología del género, el sexo es sólo producto de la cultura del país". El obispo peruano dice que esos promotores "quieren rebelarse" contra la naturaleza "y dejar en libertad de cada cual el tipo de 'género' al que quieren pertenecer, todos igualmente válidos. Eso hace que hombres y mujeres heterosexuales, los homosexuales y las lesbianas, y los bisexuales sean simplemente modos de comportamiento sexual producto de la elección de cada persona, libertad que todos los demás deben respetar".
En el editorial de Nuevo Criterio se comenta el orgullo de la Iglesia por el "luminoso papel que las mujeres han tenido en la historia", pero se lamenta, criticando a algunos grupos feministas, que "hay, por desgracia, quienes creen que la mujer se dignifica a condición de dejar de serlo, por mimetismo con el hombre, por la pérdida de su misión de complemento perfecto", para volverse la rival más enconada, "hasta el nivel de refugiarse en una oscura y equívoca visión de 'género' que no hace alusión a su naturaleza". (José Juan de Avila)