DOMINGO 12 DE MARZO DE 2000

Ť Proceso plagado de fallas, coinciden defensores de Joel Aquino y Juana Vázquez

Ordenes de aprehensión contra líderes de Yalálag

Ť Un juzgado de Oaxaca los responsabiliza de los hechos del martes en el palacio municipal

Blanche Petrich, enviada, Oaxaca, Oax., 11 de marzo Ť Un juzgado de Oaxaca libró órdenes de aprehensión en contra del dirigente del movimiento comunitario de Yalálag, Joel Aquino, y de la lideresa de la Unión de Mujeres Yalaltecas, Juana Vázquez, señalados como responsables del deceso ocurrido la madrugada del martes 7, durante un tiroteo en el palacio municipal de ese pueblo zapoteca.

Mientras tanto, otros 11 detenidos, seis de ellos ancianos, fueron consignados por homicidio calificado y lesiones. El Ministerio Público basó la consignación en los resultados positivos que todos los arrestados dieron en la prueba de radizonato de sodio. También deberán responder por la portación de armas. Sólo uno fue consignado por llevar arma de fuego prohibida.

El abogado Adelfo Regino, que encabeza la defensa del caso, señaló: "Es muy preocupante" que como resultado de un proceso judicial, "plagado de fallas de origen", se pretenda encarcelar a dos de los dirigentes más destacados del movimiento indígena mexicano. Más aún, dijo que los 11 yalaltecas que están en Santa María Ixcotel, el penal estatal, "son promotores de un proceso de identidad india que en su momento fue factor detonante para el despertar de toda la Sierra Norte" oaxaqueña.

ONG se unirán a la defensa

"El hecho de que se pretenda dar una salida policiaca a un problema político, planteado en la crisis de poderes del municipio de Villa Hidalgo Yalálag, pone en entredicho la voluntad del gobierno estatal de hacer del diálogo y la negociación las vías para dirimir diferencias", asentó Regino.

A partir de la próxima semana, abogados del Movimiento Ciudadano por la Democracia y el Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas se incorporarán al grupo de profesionales que encabezan el zapoteca Filoteo Herrería y Regino, de origen mixe. La ONG local CAMPO también forma parte del equipo defensor.

Este grupo denunció que la averiguación previa de la balacera de Yalálag, en la que resultó muerto Roberto Limeta, y fueron heridos de bala cuatro hombres más (dos del grupo apoderado del palacio municipal y otros dos del bando comunitario) contiene serias irregularidades. Una de ellas es que en el momento de su declaración preparatoria, los zapotecos de Yalálag no contaron con un traductor, a pesar de que sólo dos de ellos manifestaron ser bilingües. Cuando al día siguiente la defensa pudo finalmente presentar un traductor, y éste llevó las declaraciones previas, los propios declarantes se sorprendieron e indignaron al descubrir que habían "emitido" serias afirmaciones autoinculpatorias. Los defensores calificaron las actas como "burdas tergiversaciones de los hechos".

Otra irregularidad denunciada es que varios de los detenidos fueron presionados sicológicamente para plasmar sus firmas en documentos que no habían podido leer, y al menos dos de ellos, Víctor Aquino Montellano y el anciano Francisco Aquino Maldonado, recibieron amenazas del encargado de interrogarlos. Finalmente, los juristas señalaron que la consignación fue decidida por el juez con base en el resultado de la llamada "prueba de la pólvora", que suele ser considerada entre abogados como "falible", y que por lo tanto no es suficiente para dictaminar autos de formal prisión.

A pesar de que según numerosos testimonios fue el grupo rival al de Joel Aquino el que abrió fuego, y a que se registraron heridos de bala en los dos bandos, ningún seguidor del líder Onésimo Cuevas ha sido detenido.

Este último y su asesor, Abel Cristóbal, a quien los aquinistas relacionan con el viejo liderazgo ultraizquierdista del profesor Felipe Martínez Soriano, desconocieron en mayo de 1998 el ayuntamiento electo en asamblea comunitaria, que en ese tiempo presidía precisamente un hermano de Joel Aquino, Francisco. Los sorianistas (grupo que a su vez es una de las vertientes que más tarde conformaron el EPR) organizaron una elección a la que acudieron solamente 150 ciudadanos para instalar nuevas autoridades municipales. Las irregularidades de ese proceso fueron documentadas ante el Congreso y el Instituto Electoral de la entidad, y ambas instancias coincidieron en decretar, a fines del año pasado, el desconocimiento del ayuntamiento. Se nombró, entonces, a un administrador provisional, Carlos Rasgado, quien jamás pudo despachar en el palacio municipal ni ejercer función alguna.

Apenas este lunes 6, la dirigente de la Unión de Mujeres, Juanita Vázquez, le advertía al gobernador, José Murat, en una carta con matasellos fechada el 7 de marzo, que ante el vacío de poderes locales y la inacción de la autoridad estatal, Yalálag parecía "la tierra de Pedro Páramo", y lo exhortaba a tomar cartas en el asunto y a impulsar a la brevedad elecciones con una planilla de coalición, como única forma de evitar que la sangre llegara al río. Esa madrugada, el gobierno había hecho crisis. En ese clima turbio, los yalaltecas ahora se despiden con una expresión que se usa en tiempos difíciles: "Venn dip lhashó", que significa: "Haz fuerte tu corazón".