SABADO 11 DE MARZO DE 2000

Ť Cerrar la frontera sur resultaría inconveniente, afirma Carrillo Castro


Realista, regular casos de migrantes de CA

Alonso Urrutia, enviado, y David Sosa, corresponsal, Cancún, Q.Roo, 10 de marzo Ť Al reunirse con representantes consulares en el sureste del país, el comisionado del Instituto Nacional de Migración (INM), Alejandro Carrillo Castro, sostuvo que en esta región la política mexicana es realista y ha reconocido los flujos migratorios centroamericanos con fines laborales en los estados fronterizos, sobre todo en fincas agrícolas.

"Nosotros -dijo- no pretendemos negar la realidad y por eso en este año se autorizaron 70 mil permisos a trabajadores guatemaltecos y beliceños, principalmente". No obstante, reconoció que existen algunas solicitudes de senadores mexicanos que han pedido cerrar la frontera, pero ello resultaría inconveniente.

En el marco de una gira de trabajo para inaugurar la modernización de los servicios migratorios en el aeropuerto de Cancún, Carrillo Castro subrayó que con ello se inhiben prácticas discriminatorias y de explotación laboral, como ocurre en la frontera norte con los mexicanos. Esto supone la aplicación de una política migratoria no intimidatoria, porque no se pretende ninguna estrategia para sellar nuestra frontera sur.

Por otro lado, explicó las diferencias que existen en los costos de los servicios migratorios en relación con otros países. Señaló que anualmente la embajada de Estados Unidos en México rechaza alrededor de 500 mil solicitudes de visas mexicanas pero no regresa los 45 dólares que cuesta el trámite y que en conjunto representan alrededor de 2.5 millones de dólares.

En contrapartida, dijo que en México se cobran 15 dólares por cada ingreso de no inmigrantes, recursos que se canalizan al financiamiento del propio servicio migratorio. Por ejemplo, con la modernización de las instalaciones del INM en el aeropuerto de Cancún, se reducirán sustancialmente los tiempos de ingreso al país del turismo extranjero; se estima una meta de 30 segundos por cada trámite gracias al uso de lectores ópticos.

Cancún ocupa el segundo lugar en importancia nacional como punto de ingreso de extranjeros. Por esa zona y por la ciudad de México pasa el 60 por ciento de personas que se internan al país.

Carrillo Castro dijo que a petición del sector turístico de Cancún, se eliminó la obligatoriedad del uso del pasaporte, lo que ha simplificado los trámites. Se calcula que actualmente el 40 por ciento de los extranjeros que llegan a ese punto turístico no utilizan el pasaporte.

En el encuentro con los cónsules, el comisionado explicó a grandes rasgos las innovaciones en la política migratoria. Dijo que algunos senadores mexicanos han planteado formalmente al INM cerrar la frontera sur al paso de trabajadores centroamericanos.

Sin embargo, puntualizó, "eso sería poco realista" y significaría negar un flujo migratorio que anualmente se da desde algunos países centroamericanos hacia fincas agrícolas del sureste mexicano. Existe una gran diferencia respecto de otras naciones de esa región, pues "nosotros nunca hemos puesto bardas" para detener el flujo migratorio. Por el contrario, se reconoce y por eso se pretende regular en el caso de migrantes guatemaltecos y beliceños, que son los que utilizan principalmente esos permisos, aplicados por tercera ocasión en este año.

Posteriormente, en entrevista dijo que otorgar esos permisos anualmente permite evitar que los trabajadores centroamericanos "sean víctimas de extorsiones como ocurre a nuestros connacionales. Se impide que los patrones puedan, en determinado momento, amenazar con denunciarlos a Migración".

Finalmente, comentó que en la frontera sur entró en vigor una nueva forma migratoria para visitantes beliceños a fin de agilizar los cruces fronterizos.