VIERNES 10 DE MARZO DE 2000
* Fernando del Paso expone por segunda vez en el Museo de Arte Moderno
Dibujar o pintar no requieren la entrega bárbara de la escritura
* 2000 caras de cara al año 2000, colección de rostros que vivían en la imaginación del narrador
* Al escribir se debe saber bien lo que se dice y el lenguaje de un trazo es más universal, sostiene
Mónica Mateos * El escritor Fernando del Paso ha liberado dos mil rostros que vivían en su imaginación. Esta vez, las palabras ceden el paso a las imágenes, las texturas, las formas y los colores para conformar sus 2000 caras de cara al 2000, colección de dibujos que se exhibirá en el Museo de Arte Moderno (MAM).
Es la segunda vez en diez años que ese recinto alberga obra plástica del autor de la novela Noticias del Imperio, quien considera a ambas facetas creativas sus dos oficios, es decir, ''no es que uno sea mi hobby y el otro mi oficio. Rechazo rotundamente esa idea, aunque es evidente que me desenvuelvo mejor en la escritura que en la pintura, por eso la primera tiene un peso mayor en mi vida. No me alcanzan las horas para pintar y escribir todo el tiempo, entonces, tarde o temprano la escritura se impone y dejo el dibujo. Son dos actividades de inmersión total. No podría escribir en la mañana y pintar en la tarde, o escribir una semana y pintar durante la siguiente. No. Una vez que me aboco a una de las dos actividades mi vida gira alrededor de ella, hasta que llega el cansancio y cambio de oficio".
ųƑQué rasgos de su personalidad o del mundo representan esos dos mil rostros?
ųSon estados de ánimo. No intenté hacer dibujos fotográficos o realistas, no obstante hubo un momento cuando pensé que podría rendir homenajes a algunos escritores al hacer retratos en tinta china, como hice uno de Octavio Paz. Pero la obra se fue por distintos caminos porque hay dibujos que tienen cierto espíritu de Bacon, otros son definitivamente impresionistas, la mayoría son expresionistas, y hay una serie que imita los graffitis callejeros. Los dos mil rostros expresan estados de ánimo míos y del ser humano, tanto la capacidad monstruosa, como el humor, la tristeza o la dulzura. Hay una serie dedicada al Quijote y a Sancho Panza, es lo que se llama en artes plásticas una propuesta colorística, ellos son los únicos personajes de la literatura que abordo. En esta exposición aparezco, pero no me pinté, me fotografiaron y un artista hizo 39 deformaciones de mi cara en photoshop. Esto resulta irreverente hacia mí mismo, pero como soy humorista no me importa. Otro experimento fotográfico es el rostro de mi esposa en una pieza y el mío en la siguiente, y luego, mediante cuadros pequeños, se cambia mi rostro en el de ella y viceversa.
Colores que alborotan, excitan
ųLe divierte más hacer esto que escribir.
ųSí, dibujar y pintar divierte más porque cuando uso colores tengo insomnio o pesadillas. Los colores me alborotan mucho, me excitan. A pesar de eso es divertido porque no se requiere esa concentración bárbara que necesita la escritura; puedo estar platicando mientras dibujo. No existe la presión que hay en la prosa, porque no se manejan palabras y por tanto conceptos. Al escribir hay que saber muy bien lo que se dice y el lenguaje de un dibujo es más universal.
ųƑDurante la realización de los dos mil rostros no escribió?
ųNo escribí nada, digamos, importante. Hice un prólogo para el libro conmemorativo de los cien años de Tamayo, una conferencia para inaugurar la cátedra Octavio Paz en Washington, un artículo sobre La región más transparente de Carlos Fuentes, con motivo de los 40 años de la novela. Tampoco me puedo escapar de la escritura. Pero no hubo un libro en forma. Ahora siento un poco de descanso, una especie de vacío muy grande y pienso retomar las conferencias acerca de El Quijote; he escrito siete, pero tengo ideas suficientes para cinco o seis más. Con todas ya se hace un libro.
ųƑYa pensó que se va a enfrentar al prejuicio de algunas personas que piensan que si alguien escribe no puede pintar?
ųšSí, claro! Conozco a muchos (incluso entre ellos hay personas a las que estimo) a los que les disgusta que dibuje. Piensan que para qué pierdo el tiempo en esas tonterías si como escritor puedo hacer otras cosas. Para mí no es perder el tiempo. Siento el aguijón de esas dos vocaciones y les doy su lugar a cada una. No porque uno sea escritor tiene que escribir todos los días como obligación, eso es una tontería, hay que hacerlo cuando se siente el gran deseo. Hay quienes escriben todos los días por disciplina, y creo que no es necesario, puede ser contraproducente.
Recuperar un anonimato
"Sé que habrá muchos que dirán 'le pusieron su exposición porque es escritor'. No me interesa; lo que quería decir con estos dibujos lo dije, eso es lo importante. Antes que aprender a escribir, dibujaba. Además, he tenido exposiciones importantes en Londres, en Madrid y en el Museo Carrillo Gil de la ciudad de México, esas tres las logré sin que las personas que dirigían esas instituciones supieran que yo era escritor. Los dibujos fueron expuestos sólo por su valor."
ųƑQué le gustaría que dijeran acerca de sus dos mil caras de cara al dos mil?
ųMe gustaría recuperar ese anonimato que tuve en las tres exposiciones que mencioné, para que juzguen los dibujos como obras de arte. Quiero aclarar que más que una exposición podríamos considerarla una instalación. Lo importante aquí, además de la calidad, es la cantidad, son dos mil dibujos de pequeño formato. Después de presentarse en el MAM la obra se irá al Instituto Cultural Cabañas y en octubre estará en el Festival Internacional Cervantino. La elección del título de la muestra fue paradójico. No creo mucho en eso de los aniversarios, pero nos hacen falta para vivir, para festejar, para llorar, para reír. Cada segundo se cumplen mil años o un millón de años de algo importante para la vida del universo y del ser humano. Pensé que, si festejo mis cumpleaños, Ƒpor qué no iba a festejar los 2000 mil años de la civilización occidental en la que me he criado?
(2000 caras de cara al año 2000, pintura mixta de Fernando del Paso, se inaugurará en el MAM, Reforma y Gandhi, Chapultepec, tel. 55 53 62 33, el jueves 16, a las 20:00 horas y permanecerá abierta hasta el 18 de junio, en horarios de martes a domingo, de 10:00 a 18:00 horas.)