MIERCOLES 8 DE MARZO DE 2000

Ť La participación femenil en delegaciones nacionales, cada vez más nutrida

Las mujeres mexicanas rompen mitos y barreras en el deporte

Ť En la administración, la colaboración aún es limitada; sólo siete presidentas de federaciones

Abril del Río y Rosalía A. Villanueva Ť Sin proponérselo como una competencia, las mujeres han ganado terreno en los logros que se han registrado en el deporte mexicano en los últimos años. Y hoy, en el Día Internacional de la Mujer, algunas vanguardistas de diversas disciplinas, coinciden en que no existen obstáculos al realizar actividades que siempre estuvieron reservadas para los hombres, mientras que otras consideran que la mujer ya ha demostrado capacidades insospechadas y sólo hace falta más oportunidades para crecer, por ejemplo, en la administración deportiva.

La muestra más inmediata del desarrollo que ha alcanzado el deporte femenil en el país, fue la delegación que compitió en los Juegos Panamericanos de Winnipeg 99. La participación de las deportistas, algunas de ellas por primera vez en ciertas disciplinas que fueron incluidas en el programa de la justa continental, dejó de ser algo extraño o digno de reconocimiento, para convertirse en una realidad: de aquel grupo de 233 seleccionados, 48 por ciento eran mujeres.

De las 57 medallas obtenidas por la delegación mexicana en Winnipeg, 24 fueron logros del sector femenil, y rumbo a los Juegos Olímpicos de Sydney, a celebrarse del 15 de septiembre al primero de octubre del presente año, son diez las damas entre los 22 deportistas calificados hasta el momento.

Cabe mencionar que los procesos olímpicos no han concluido y que entre los deportes de conjunto el más probable para obtener la calificación es la selección Sub-23 de futbol, lo que abultaría la cifra de varones. A la cita olímpica de Atlanta 96, asistieron 28 mujeres y 65 hombres; las primeras, poco más de la tercera parte de la delegación, y sólo se obtuvo la medalla de bronce del marchista Bernardo Segura, en la prueba de 20 kilómetros.

En la historia del deporte mexicano en Juegos Olímpicos, desde su primera aparición en Los Angeles 1932, solamente dos mujeres se han colgados medallas: de plata, la esgrimista Pilar Roldán, y de bronce la nadadora María Teresa Ramírez, ambas en México 68.

Entre las deportistas mexicanas que en los últimos meses han sorprendido y abierto caminos, sobresalen Adriana Fernández, primera mexicana y latinoamericana que se coronó en el maratón de Nueva York, lo que consiguió con la quinta mejor marca mundial. Ana Guevara rompió el mito de la velocidad, al ganar la medalla de oro en Winnipeg, y este año ha cruzado la meta de los 400 metros bajando su marca en dos ocasiones en pruebas de Grand Prix, detrás de la campeona del mundo y submonarca olímpica, la australiana Catherine Freeman.

Tampoco hubo antecedentes ni obstáculos para la halterista Soraya Jiménez, las ciclistas Nancy Contreras y Belem Guerrero, la clavadista María José Alcalá y la gimnasta Dennise López. Como juveniles, Nancy y Soraya subieron por primera vez a los podios mundiales con medallas de plata y bronce, logros que posteriormente repitieron en la categoría abierta en dos ocasiones, como lo hicieron también Belem, María José y Dennise.

En el taekwondo el desarrollo ha sido continuo desde que Dolores Knoll y Mónica Torres se convirtieron en medallistas olímpicas de exhibición en Barcelona 92, hasta los triunfos que siguen cosechando Mónica del Real y Agueda Pérez, quienes debutarán en Sydney ya dentro del programa oficial de competencias.

Las mexicanas tampoco se han detenido en los deportes de alto riesgo. Karla Wheelock y Elsa Avila conquistaron el año pasado, en diferentes expediciones y rutas, el monte Everest.

La esquiadora Andrea Gaytán, ahora retirada, fue la pionera de la práctica femenil del wakeboard, una riesgosa disciplina, que al dominarla y coronarse un par de veces en justas mundiales le valió el reconocimiento de la revista Women's sports and fitness, al lado de las luminarias estadunidenses.

Por lo que respecta al papel de la mujer en la administración deportiva, la participación ha sido más limitada. De las 77 federaciones nacionales, sólo siete son presididas por mujeres. No obstante, algunas de ellas se han comprometido con otras tareas dentro de los ámbitos olímpico y federado.

A continuación, algunas expresiones de deportistas en el Día Internacional de la Mujer

Enriqueta Basilio, la primera deportista portadora de la antorcha olímpica, en México 68, expresó: "A las mujeres se les ofrece mucho pero no se les toma en cuenta, pese a que muchas tenemos proyectos e ideas y estamos preparadas en igualdad que los hombres. Necesitamos abrir más espacios en todos los ámbitos. En 1968 fuimos el parteaguas y, en el deporte, se rompió el mito de que las mujeres no podían tener acceso ni competir en los eventos. El deporte es política y el camino no ha sido fácil, pero hemos demostrado con responsabilidad que la sabemos hacer, siempre y cuando nos den oportunidad''.

Yolitzin Martínez, pentatleta, indicó: "Yo siempre he tenido una actitud contra la imposición de las autoridades. No soy feminista ni estoy de acuerdo con esos movimientos, porque pienso que esto no es una competencia sino una estrategia donde se ha degenerado el concepto de la mujer en la familia y es ahí donde se le debe enseñar al hombre a amar a la mujer. La posición y el avance que ha tenido el deporte femenil se ve en las estadísticas, mientras nosotras volvemos triunfadoras, ellos se están convirtiendo en comodinos. El cambio está en nosotras''.

Karla Wheelock: "Físicamente hablando, la mujer tiene una gran resistencia y todo lo necesario para lograr los objetivos que se proponga; algo que es muy importante es tu condición, no sólo física, sino también mental. Conforme te vas proponiendo pequeñas metas y las alcanzas, cada vez vences mayores, y bueno, con una buena preparación todo mundo tiene la posibilidad de alcanzar grandes metas.

"Ayer hablaba con una ciclista que me comentaba que por ser mujer la hacían menos, pero yo creo que obstáculos todos los tenemos. Nada que valga realmente la pena es fácil, y tanto hombres como mujeres enfrentan dificultades, pero una vez que nos despojemos de los bloqueos mentales, podremos abrir nuestras posibilidades.

"Quisiera subrayar que el deporte en la mujer es una opción de logros y satisfacciones personales, no sólo para verte bien, sino como vía de crecimiento personal".

Mara Reyes, la corredora que con nueve años de participación es la pilota con más continuidad en las pistas del país: "Es un orgullo representar a la mujer en este deporte, me da gusto que la gente te reconozca, hombres y mujeres de todas las edades se me acercan en algunos eventos, inyectándome energía para ser mejor.

"Mi carrera no ha sido fácil, porque en un principio me topé con algunos obstáculos de apoyo de patrocinadores que no creían que podía hacer buenos papeles por ser mujer, pero con el apoyo de mi familia pude iniciar y tener un lugar que poco a poco me he ganado, por las marcas que ahora me respaldan".