DOMINGO 5 DE MARZO DE 2000

Ť Su primera presentación, luego de haber obtenido su quinto Grammy


Tito Puente llega al Salón 21 para recrear las noches del Palladium

Ernesto Márquez Ť En la denominada noche latina de los Grammys, Tito Puente se alzó con su quinta presea, en más de 50 años de actividad musical, por destacar, según los 9 mil miembros de la Academia de la Música de Estados Unidos, por su trabajo Mambo Birdland, el cual quedó clasificado en la categoría de Música tropical tradicional y no en la de Latin Jazz, como debería ser.

Incongruencias aparte, el gran maestro lucía contento, pese a que el reconocimiento de la academia le fue otorgado fuera de cámaras y en una ceremonia tempranera.

tito puente "šGo, Tito, go!", le gritaba un puñado de fervorosos seguidores al veterano timbalero, cuando éste se encaminaba a recibir su quinto Grammy. La diferencia entre la ceremonia de la tarde en relación con la superexclusiva de la noche consistía en que el público se podía colar y ver un poco el desarrollo.

Tito Puente, quien está por cumplir 77 años este 20 de abril, hará su primera presentación pública con su orquesta, luego de haber sido galardonado las noches del 10 y 11 de marzo en el Salón 21. Este hombre no da signos de fatiga creativa.

El Rey de la música latina ha grabado muchas producciones memorables a lo largo de su ilustre carrera (alrededor de 140), pero sólo por cinco de ellas ha recibido el codiciado gramófono: Homenaje a Benny Moré (79), On Broadway (84), Mambo Diablo (85), Goza mi timbal (90) y el más reciente por Mambo Birdland.

Esta es una grabación en vivo, poco común en la discografía de Tito, por lo que adquiere la importancia de documento histórico, algo que forzosamente deben tener los coleccionistas y amantes de la música afrolatina.

La idea provino de Ralph Mercado, pivote de la salsa en Nueva York y un entusiasta del jazz latino, quien quería revivir los sonidos de la época del Palladium. Para tal efecto convenció a Tito Puente de que grabase sus viejos y exitosos mambos y cha-cha-chás. Tito, quien fue uno de los grandes protagonistas de aquel espacio del dancing neoyorquino, accedió y de inmediato se puso a trabajar en nuevas composiciones y nuevos arreglos.

Así, Tito activó los sonidos del mambo que mueven al mundo a bailar y preparó el camino para realizar tres conciertos a casa llena en el mítico Birdland entre 1988 y 1999. En las ya históricas sesiones participó un puñado de músicos virtuosos que por demás forman parte de la big band habitual de Tito Puente: los saxofonistas Mitchel Frohman, Mario Rivera y Peter Miranda; los trombonistas Reynaldo Jorge y Lewis Kahn; los trompetistas Raymond Vega y John Walsh; el enorme pianista Sony Bravo, el bongocero Johnny Rodríguez, el conguero José Maderas y el espléndido cantante Frankie Morales. Un team de ensueño, como dijera el propio Puente.

La pieza principal de esta colección de canciones es, precisamente, Mambo Birdland. Un tema festivo superbailable, con breves descargas de todos los músicos interpretando sus instrumentos con un amor expansivo y conocimiento del arreglo del maestro Puente, quien le da un toque brillante a sus timbales a lo largo del tema.

Juventud del presente y Guaguancó Margarito, compuesto por Silvestre Méndez, son dos temas muy rítmicos que los rumberos sabrán apreciar. La combinación de la hipnótica energía de su melodía y los pegajosos coros son ingeniosos y carismáticos, gracias a un Frankie Morales que sabe entonar cada nota con una apasionada voz de tenor antillano que nos hace recordar a todos esos grandes cantantes que acompañaron a Puente durante su gloriosa época musical.

Mambo Gozón, otra de las grandes composiciones de Puente, se escucha portentosa y rebosante de creatividad musical. Este tema ha sido interpretado por la Miami Symphony Orchestra y más recientemente por la Hollywood Bowl Symphony Orchestra. También destaca Chachachá mambo, otra de las creaciones maestras de Puente, que logra aquí un aire sutil gracias a las pinceladas de la flauta que interpreta inmejorablemente el maese Mariano Rivera.

Una de las composiciones originales de Tito Puente de su selección de clásicos, Ran kan kan, muestra las grandes dotes del maestro en los timbales en un solo supremo. Este tema lo posicionó como uno de los más grandes timbaleros del siglo. Su incomparable arreglo es aún contemporáneo y está conectado a la diversidad cultural de hoy. La última canción de Mambo Birdland, Oye cómo va, es el tema más popular de su ilustre repertorio. Este número, que popularizara Carlos Santana, es un ejemplo perfecto de la eternidad, inteligencia, encanto y humor que existe en la música de Tito Puente.

Según se puede apreciar, después de escucharlo con detenimiento y mucha algarabía, la realización de Mambo Birdland logró su cometido: recordar la época brava del Palladium y traernos la grandeza de don Ernesto Puente con esta vigorosa orquesta con la que prontamente se presentará en el Salón 21.

Esta es una producción muy regia con la cual el gran maestro del timbal ha logrado dar un golpe de oro al viejo mambo, el llamado "diablo" que inventara el cieguito maravilloso Arsenio Rodríguez. Un golpe de oro musical que está excitando tanto a jóvenes como a viejos que le animan šGo, Tito, go!