MIERCOLES 1o. DE MARZO DE 2000
Ť Padres de familia anuncian crucifixión
Cierran estudiantes las aulas en la Facultad de Ciencias
Ť Vuelven a clausurar el acceso principal a la dirección
Roberto Garduño Ť Los estudiantes de la asamblea de la Facultad de Ciencias cerraron todos los salones del plantel donde se imparten las carreras de actuaría, física, matemáticas y ciencias de la computación. También durante la madrugada de ayer volvieron a clausurar la entrada principal de la dirección del plantel.
En una serie de acontecimientos sucedidos ayer en la máxima casa de estudios, también se informó que los padres de familia que mantienen un plantón permanente frente a la rectoría se crucificarán mañana jueves, a las 10:00, en ese lugar.
La jornada de movilizaciones y actividades en pro de la huelga estudiantil inició desde muy temprano en la Facultad de Ciencias. Nuevamente la puerta de la oficina del director ųque se está convirtiendo en un monumento a la persistencia de los que la clausuran y de los que la reabrenų se encontraba cerrada con soldadura. A las 09:20 un trabajador de mantenimiento, a punta de esmeril, rompió el metal y dio entrada a Fernando Magaña Solís y al personal que ahí labora.
Aquello provocó la irritación de los alumnos que en la madrugada participaron en el cierre de ese lugar, quienes, además de entonar el ya recurrente grito de šfuera, fuera, fuera!, repetían las consignas que se encuentran pintadas en los muros de la dirección: šPerrera!; šPase por su hueso!; šEl pasado no fue pero está siendo!; šCubil de los arrastrados y guaruras con doctorado! A esas descalificaciones siguió una marcha de los estudiantes ųque demandan la liberación de sus compañeros presosų por el interior de la facultad.
Mientras avanzaba el grupo de jóvenes, algunos se introducían en las aulas para "convencer" a los alumnos que tomaban clase de retirarse; otros, con carteles y engrudo, cerraban las puertas de los salones y las sellaban, y un grupo que venía detrás se encargó de soldar las puertas de los pasillos, impidiendo así definitivamente el ingreso a esos lugares de clase.
Durante la mañana y la tarde los integrantes de la asamblea estudiantil que mantienen la idea de continuar su huelga durante la presente semana trabajaron cerrando las aulas. Para la tarde habían logrado clausurar casi la totalidad de ellas y discutieron durante la noche cómo cerrar la dirección, y las acciones que mantendrán en los próximos días. Además en el mismo plantel se informó que mañana a las 10:00 se realizará, en el auditorio, el pleno del CGH.
Tensión en Trabajo Social
Cerca de ahí, en la Escuela Nacional de Trabajo Social, un grupo de trabajadores administrativos se negó a ingresar al plantel, al aducir "falta de garantías físicas y laborales". Ese grupo de personas, al que se relaciona con la ex directora Nelia Tello, fue advertido por los estudiantes que debería renunciar, pues "representa a la administración más nefasta de la escuela", explicaron los alumnos.
No obstante, frente al circuito que bordea el plantel, mujeres y hombres, entre ellos académicos, secretarias y funcionarios, aguardaron una respuesta del director Roberto Bermúdez para que les garantizara seguridad en su ingreso al plantel: "No tenemos garantía ni física, ni ningún espacio donde aguardarnos; esperamos que el director nos garantice la seguridad, y nos preocupa que se esté dando paso a las agresiones. No es posible que en la universidad sucedan este tipo de cosas", argumentó un profesor.
Esas personas que tienen puesto de confianza en la Escuela de Trabajo Social señalaron que la inseguridad en que viven obedece a que "el director, buscando alianzas, está perjudicando a terceros".
Pero la réplica a esa postura la hicieron dos alumnos del CGH, Ricardo de la O y Agustín Flores, quienes acusaron a los trabajadores administrativos de "obstaculizar el trabajo académico de la escuela. Al director Roberto Bermúdez ni lo conocemos. Nosotros queremos un acuerdo, pero advertimos que la administración es un problema, y estos trabajadores, que tienen relación con la ex directora Nelia Tello, o se van o cerramos la escuela. Además, los que son maestros no van a entrar a los salones de clase, y les decimos que si no se van, cerramos".
Más tarde, Bermúdez, el director interino de la escuela, rechazó que hubiese instigado a 60 estudiantes de ese plantel para desalojar a Carlos Garza, a quien le había solicitado desde una semana antes su renuncia.
El doctor Bermúdez, quien adujo que su estadía en esa posición sólo obedece a buscar equilibrios para alcanzar el consenso y la armonía entre la comunidad, reiteró que él no persigue venganzas políticas contra Nelia Tello.
A pesar de esa postura conciliatoria, por la tarde, cuando Roberto Bermúdez y Guillermo Campos, quien es el nuevo secretario de la escuela, regresaban de comer, se encontraron con una valla de alumnos que obstaculizó la entrada a la dirección. Los estudiantes reclamaron que los trabajadores administrativos "están confrontándonos, pues por la mañana decidieron no ingresar al plantel, y ahora sí lo hacen; nosotros exigimos respeto". Campos replicó: "Nosotros somos una autoridad transitoria, lo que queremos es organizar la normalidad académica".
Pero Rodolfo Hernández advirtió que el estudiantado no va a permitir "que se vuelvan a instaurar regímenes de opresión, como el de Nelia Tello. Nosotros les proponemos dejarlos entrar, pero nos vemos el jueves, para revisar la situación de los trabajadores administrativos", advirtió.
Después de aquel alegato, las autoridades recibieron el permiso de los estudiantes y pudieron ingresar a la dirección, pero dejando abierta la posibilidad de que el próximo jueves pueda ocurrir un nuevo conflicto.
Continuará abierta la dirección de Ciencias Políticas
Lejos de ahí, en la Facultad de Ciencias Políticas, la asamblea estudiantil sesionó en el auditorio donde esperaba la asistencia de la maestra Rosa María Piñón, a la que se convocó para discutir los métodos que utilizaría la comunidad para incidir en la liberación de los estudiantes presos.
La directora interina envió al pleno, donde se encontraban alrededor de 150 alumnos, un documento donde resume su postura en torno al tema: se ha pronunciado por el diálogo como mecanismo universitario para resolver el conflicto; ha mostrado públicamente su inconformidad por el ingreso de la PFP a las instalaciones; ha exigido el desistimiento de los cargos contra los estudiantes presos; se ha convocado a profesores de las siete coordinaciones y centros de la facultad para reflexionar sobre el conflicto.
Tras leerse el listado de doce acciones que ha emprendido la maestra Piñón, inició un debate donde se proponía cerrar la dirección por la inasistencia de su titular interina; Miguel Angel Ramírez adujo que "es una falta de seriedad de todas las autoridades. No podemos permitir esto, porque tenemos la necesidad de diálogo. Necesitamos la presencia de la maestra Rosa María Piñón, pues no sólo nos interesa la libertad de nuestros compañeros, sino que se cumplan los seis puntos del pliego petitorio".
Entre interrogantes y reclamos transcurrió la asamblea, que decidió no cerrar la dirección y convocar a una nueva ronda de discusión a las autoridades del plantel.
Rechazo a la confrontación
El pronunciamiento de los estudiantes que organizaron la consulta en la Facultad de Ciencias, para conocer la opinión de su comunidad en torno a la urgente liberación de los alumnos presos y la apertura de ese plantel, se dio enmedio del rechazo a la confrontación. El llamado fue a evitar "cualquier acción unilateral a espaldas de la comunidad que acentúe la división y el enfrentamiento violento, y en particular condenamos a quienes pretendan utilizar estos datos como el aval de este tipo y de intereses propios".
El deslinde de cualquier efecto violento que pueda generar la consulta ocurrió una vez que se dieron a conocer los resultados de ese ejercicio: mil 659 personas votaron. De ellas, mil 63 son estudiantes de licenciatura y 65 de posgrado; dos tesistas; 31 artículo 19; 409 académicos y 79 trabajadores.
En la aula magna de Ciencias los organizadores de la consulta, que enfrentó diversos obstáculos durante el lunes, aseguraron estar en favor de la unidad, la discusión, "y al mismo tiempo externamos nuestra preocupación por el clima de tensión y las condiciones actuales en que se encuentra nuestra facultad, originadas en gran parte por el encarcelamiento de miembros de la misma, y los últimos diez meses de conflicto sin una solución política".
A pesar del rechazo del Comité de Huelga de ese plantel a la consulta, ésta fue considerada entre algunos sectores de Ciencias como un "éxito". Sus organizadores extendieron copias a la asamblea estudiantil, a las autoridades del plantel y a la comunidad en general, con el exhorto de ser considerados como elementos que incidan (los votos) en la pronta liberación de los presos.