MIERCOLES 1o. DE MARZO DE 2000
Ť Ex funcionario de la PGR, vinculado con capos, dice
Carrillo Olea sería enjuiciado por protección a narcos: DEA
Ť La corrupción en México amenaza el éxito del combate al problema
Jim Cason y David Brooks, corresponsales, Washington, 29 de febrero Ť La DEA informó que el ex gobernador Jorge Carrillo Olea podría ser enjuiciado por protección de narcotraficantes y secuestro, además sostuvo que un ex alto funcionario antinarcóticos de la PGR, Cuauhtémoc Herrera Suástegui, tenía vínculos con el capo Amado Carrillo Fuentes.
En declaraciones en una audiencia legislativa un día antes de que el presidente Bill Clinton anuncie decisiones sobre la certificación de la cooperación antidrogas de México y otros 25 países, el jefe de Operaciones Internacionales de la DEA, William E. Ledwith, afirmó que la corrupción y el fracaso del gobierno mexicano en implementar varios de los programas conjuntos con Estados Unidos amenaza el éxito "a largo plazo" de la lucha antinarcóticos bilateral.
No obstante, Ledwith también insistió en que al mismo tiempo, "la DEA y la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos contra la Salud (FEADS) continúan realizando esfuerzos de investigación conjuntos a través de México".
Al detallar los problemas y logros de los esfuerzos conjuntos, el alto funcionario de la DEA elogió a la Suprema Corte mexicana por la orden de arresto domiciliario a Carrillo Olea, pero lamentó que la PGR aún no lo haya detenido. Según Ledwith, el gobernador morelense con licencia "podría ser presentado ante un juicio por actividades de protección de narcotráfico y secuestro".
Gran parte de las declaraciones de Ledwith y de otros representantes del gobierno de Clinton mantuvieron un equilibrio cuidadoso entre elogio y critica de la lucha antidrogas mexicanos. En privado, funcionarios de la DEA indicaron que están presionados por otras partes del gobierno para no hacer extensas críticas de México en este periodo anual, cuando se produce el debate sobre la certificación.
Pero Ledwith no dejó duda de que su agencia está particularmente molesta por la decisión del gobierno mexicano, en agosto pasado, de suspender los exámenes de polígrafo a oficiales mexicanos involucrados en actividades antinarcóticos. La DEA cree que esta falla en asegurar la integridad de las unidades bajo los procedimientos de seguridad interna, podría causar más corrupción.
Ledwith alabó a México por la decisión de despedir a más de mil agentes y oficiales por corrupción, pero cuestionó lo que haya pasado con los mismos una vez que fueron obligados a dejar sus cargos en los programas antinarcóticos. Como ejemplo, Ledwith describió: "En 1999 el ex director de Investigaciones de las Unidades Especiales de Investigación de la PGR y de la Unidad para Crimen Organizado, Cuauhtémoc Herrera Suástegui, fue reasignado a un puesto de alto nivel dentro de la PGR, a pesar de que falló una prueba de polígrafo administrada por el gobierno estadunidense en 1998".
Según la DEA, "hay indicaciones de que él (Herrera Suástegui) brindó asistencia a la organización de tráfico de drogas de Carrillo Fuentes".
Tanto Ledwith como la subprocuradora general, Mary Lee Warren, expresaron su desilusión de que México no detuvo ni extraditó a ningún capo mayor buscado por Estados Unidos. Al ser interrogados sobre este fracaso, Warren suspiró y dijo que no tenía una explicación. A pesar de la asistencia de la DEA, agregó, los funcionarios mexicanos habían tenido dificultades en ubicar a los grandes capos del narcotráfico.
"El presidente Zedillo y el procurador general (Jorge) Madrazo recibieron una herencia de una situación muy difícil", agregó. "El nivel de la corrupción en la seguridad pública en México es algo que no podemos imaginar. Piensen en los cientos que han tenido que despedir y cuántos más hay dentro de sus filas". Aunque Warren también ofreció un catálogo de otros problemas en la relación con México, entre ellos los fracasos al encargarse de casos sobre lavado de dinero y problemas con la deportación de estadunidenses buscados por la ley aquí, destacó que el Departamento de Justicia goza de una fuerte relación con el procurador Madrazo.
El mensaje de la descertificación
Como frecuentemente ha sido el caso en años recientes, el representante de la DEA ųque se negó a comentar directamente sobre la certificaciónų dejó la clara impresión de que la descertificación de México podría ser una forma útil para "enviar un mensaje al gobierno de México para que redoble sus esfuerzos". Preguntado si la descertificación no llevaría a una situación peor, en particular a la posibilidad de detener a capos, Ledwith respondió: "Supongo que podría ser, pero sería difícil arrestar a menos que a ninguno".