MARTES 29 DE FEBRERO DE 2000

Ť Haré todo lo posible para que pueda trabajar el nuevo gobierno, asegura


Renuncia Joerg Haider a la presidencia del Partido Liberal

Ť Rechaza que su dimisión se dé por presiones internacionales; Susanne Riess-Passer lo sucederá

Afp, Ap y Dpa, Viena, 28 de febrero Ť El líder máximo del ultraderechista Partido Liberal austriaco, Joerg Haider, renunció hoy a la presidencia del grupo político cuyo papel en la nueva coalición gubernamental austriaca junto con los conservadores, provocó críticas internacionales y el que los miembros de la Unión Europea (UE) decidieran reducir las relaciones diplomáticas con Viena.

La noticia de la renuncia de Haider se difundió primero en forma de rumores insistentes, pero el líder ultraderechista convocó a una rueda de prensa en la que aseguró que con su decisión "quiero evitar que nuestros ministros tengan que encarar la imputación de que deben referir toda decisión al canciller fantasma de Carintia", en referencia al estado federado del que él es gobernador.

AUSTRIA_HAIDER El líder agregó que "los ministros del Partido de la Libertad no son títeres", pero que quería evitar que se les acusara de seguir las indicaciones del jefe de su partido, y aseguró que la formación seguirá "haciendo todo lo posible para que el nuevo gobierno pueda trabajar sin puntos de conflicto". Rechazó, sin embargo, que las presiones internacionales sobre Viena hayan motivado su dimisión.

Haider, quien durante 15 años encabezó el partido, afirmó que no abandonará la política nacional, y seguirá al frente del gobierno en su estado natal, y anunció que su sucesora como presidenta del partido será la actual vice canciller austriaca, Susanne Riess-Passer, de 39 años y apodada, en las filas liberales como La Cobra Real.

Riess-Passer aseguró que ni ella ni el partido querían que Haider renunciara, pero afirmó que debe "respetarse su decisión". Otros altos funcionarios del Partido Liberal aseguraron que pese a su dimisión, Haider seguirá siendo "el primer hombre" para los liberales.

El líder ultraderechista dijo que hoy cumple 50 años, y aseguró que "la misión de su vida está completa" al haber logrado que los liberales ingresaran al gobierno austriaco tras obtener 27 por ciento de los votos. El hecho de que los conservadores austriacos hubieran sido capaces de acordar una coalición con la extrema derecha, tras no haber llegado a un acuerdo con los socialdemócratas, con los que gobernaron el país durante 13 años, fue criticado a nivel internacional.

Parte de dicho acuerdo con los conservadores fue que Haider, quien no oculta su ambición de convertirse en canciller federal austriaco, no ocupara ningún puesto en el nuevo gobierno. Sin embargo, la prensa austriaca y europea han resaltado cada una de sus declaraciones desde que se logró el acuerdo de coalición con el conservador Partido Popular.

Esta situación obligó al canciller federal conservador, Wolfgang Schuessel, y a la ministra del Exterior, Benita Ferrero-Waldner, a recordar a la comunidad internacional que Haider no detenta ningún cargo gubernamental y no podía ser considerado representante de la política de la coalición.

Los conservadores recurrieron también a defender al líder derechista al señalar que éste ya se había retractado de declaraciones que hizo en el pasado, en las que elogió las "ordenadas" políticas laborales y al "honorable ejército" de la Alemania nazi. El Partido Popular minimizó estas declaraciones señalando que Haider, más que ultraderechista y xenófobo, es "sólo un populista".

En las últimas semanas, en reuniones de la Unión Europea, se manifestó el rechazo contra los representantes austriacos, fueran conservadores o liberales, cuando los participantes exigieron omitir paseos y las "fotografías de familia", para evitar compartir esos espacios con los dignatarios austriacos. Tan pronto asumió la nueva coalición, Israel retiró a su embajador en Viena, mientras que otras naciones llamaron a sus propios representantes a consultas.

El presidente del Partido Social Demócrata, y sucesor del ex canciller federal Viktor Klima, Alfred Gusenbauer, aseguró que la renuncia de Haider a la presidencia de su partido es sólo una táctica, pues será él quien siga llevando las riendas de la formación. Agregó que la renuncia del líder tampoco afectará en nada el malestar reinante en la coalición gubernamental, ni la condena internacional contra Viena.

El vocero del Departamento de Estado estadunidense, James Rubin, afirmó que la renuncia de Haider es "un paso en la dirección correcta", aunque señaló que esto no modificará la preocupación de Washington ante el hecho de que la extrema derecha forma parte del gobierno austriaco.