MARTES 29 DE FEBRERO DE 2000
Ť Propuso también podar áreas de investigación
Serrano Migallón, a favor de descentralizar la UNAM
Ť La institución ya rebasó sus límites, dijo el abogado general
Karina Avilés Ť El abogado general de la UNAM, Fernando Serrano Migallón, afirmó que se debe "tener una ley que nos permita la descentralización y la planeación a mediano y largo plazos de la universidad" y aseguró que la institución ya no puede crecer más porque de hecho ya rebasó sus límites. "Quizá habría que reducir o podar un poco las áreas de investigación, fortalecer la academia, reducir los aspectos administrativos y definir mucho más su objeto", apuntó.
Al participar en la jornada académica de Derecho de la Universidad Iberoamericana, Serrano Migallón señaló que en el congreso universitario se debe discutir el tamaño de la UNAM, las relaciones con el sindicato, así como el papel de las actuales dependencias que integran la institución para que cuando exista un consenso se elabore un proyecto de iniciativa de ley "que sea sometido al congreso y a partir de ahí, llegar a tener una paz institucional mucho mayor de la que hemos tenido en estos meses".
En una conferencia en la que hubo varias imprecisiones, inclusive hasta de nombres, Serrano Migallón expresó que "el rector aceptó la solicitud del Consejo Nacional de Huelga (el nombre correcto es Consejo General de Huelga) de convocar a un congreso universitario y curiosamente, en este momento, son las autoridades de la UNAM las que quieren llegar al congreso y, por el contrario, los integrantes del Consejo Nacional de Huelga (sic) ya no quieren llegar" a él.
Ya que Francisco Barnés no es el rector, el funcionario expresó que quizá uno de sus errores "al presentar las modificaciones al Reglamento General de Pagos (RGP), fue que no logró consenso. Quizá si el plebiscito que se hizo este año lo hubiera hecho en abril de 1999 y los universitarios hubieran dado su punto de vista, a lo mejor lo tendríamos como un reglamento vigente y no hubiera pasado lo que pasó".
El abogado delineó ciertas perspectivas para la universidad: "En cuanto a número no puede crecer más, creo que estamos en los límites y que estamos rebasados. Quizá sí valdría que la Escuela Nacional Preparatoria se convirtiera en un organismo autónomo y funcionara independientemente, que las cinco multidisciplinarias que representan 60 mil, 70 mil alumnos, también trabajen de forma separada, eso bajaría el funcionamiento administrativo de la universidad, se quedaría en dos tercios.
"Quizá concentrarse en qué se va a investigar y cómo, quizá reducir o podar un poco esas áreas, incrementar de una manera muy sensible la participación de la parte de investigación con la académica".
Señaló que la ley que rige a la universidad no permite el manejo de una serie de problemas. "La Ley Orgánica dice que entre el rector y los directores no habrá intermedios. Para las unidades multidisciplinarias se ha tenido que hacer una cuestión jurídica de decir: que son directores, pero que a su vez tienen un Consejo Técnico que tiene las funciones del Consejo Universitario para su área, pero siempre que, aquí empezamos a desvirtuar la ley, Ƒcuál es la idea, se trata de desconcentrar?, Ƒuna de las funciones de la universidad puede ser un generador de nuevas universidades?, la idea es que estas multidisciplinarias cuando lleguen a la madurez, a los 25, a los 30 o a los 40 años, dependiendo de cada una, que adquieran su propia autonomía y función de universidad. O sea, todos estos problemas no permiten el manejo con la actual ley, entonces tenemos que tener una legislación que nos permita descentralizar, planear a mediano y largo plazo en cuanto a recursos y estructura administrativa".
Por otra parte, Serrano dijo que ya fueron puestos en libertad mil 300 alumnos y "hay poco menos de 100 personas todavía determinadas". La cifra correcta de estudiantes presos asciende a 223.
El abogado también habló del concepto de autonomía y dijo que éste debe ampliarse a los partidos políticos, sindicatos y organizaciones no gubernamentales. "Actualmente tenemos a partidos políticos independientes, opuestos unos a otros que ven la universidad como un campo de batalla que hace que la vida universitaria se complique".