* Temen un destino similar al de El Mexe

Alumnas de normal morelense denuncian amenazas de desalojo

* Enfrentan división y retiro de planta docente y administrativa

Karina Avilés * En diciembre pasado, una bomba de agua que permitía el suministro del líquido a la Escuela Normal Rural Emiliano Zapata, en Morelos, se averió. Las internas de la escuela pidieron su reparación. Era entonces la demanda central de su pliego petitorio.

Hoy, las autoridades les retiraron la planta docente, administrativa y directiva, los recursos para la alimentación y "dividieron" a la comunidad de alumnas entre las que se fueron a tomar clases extramuros y las que se quedaron a continuar la lucha.

Debido a lo anterior, las agrupadas en el Comité General de Estudiantes (CGE) advierten que corren el peligro de ser desalojadas, ante las "amenazas" que les ha hecho el jefe del Departamento de Educación Normal del estado, Pedro Puebla, y alertan que en el fondo, lo que se pretende es "cerrar la normal para eliminar todo aquello que vaya en contra del replanteamiento del modelo educativo que se pretende emprender en todo el país".

Una comisión de alumnas del CGE de la normal rural Emiliano Zapata, escuela que forma parte la Federación de Estudiantes Campesinos Socialistas de México, y el cual aglutina a las normales del país, acudió a La Jornada para relatar la problemática que se vive en ese plantel.

Todo comenzó en el mes de diciembre. Amilcingo, municipio de Temoac, donde se ubica la escuela, es parte de una zona árida del estado. La normal rural Emiliano Zapata cuenta con un pozo que servía para abastecer de agua a su comunidad: 315 mujeres estudiantes internas y cerca de 60 personas, entre administrativos, directivos y maestros.

Un día del citado mes, la "vieja bomba de agua" falló y de inmediato las estudiantes se dieron a la tarea de pedir a las autoridades del Instituto de Educación Básica del Estado de Morelos (IEBEM), encabezadas por Oscar Puig Hernández, la reparación o restitución de un aparato nuevo, relató la comisión de alumnas.

Junto con esa exigencia central, demandaron el mejoramiento de áreas académicas y el otorgamiento de materiales. Sin embargo, sus peticiones no fueron escuchadas, y a lo anterior siguieron los paros académicos. En enero, las estudiantes suspendieron actividades por horas. El 10 de enero lo hicieron de 12 a 2 de la tarde, el 11 de enero, de 7 a 2 de la tarde y realizaron otros más.

Al descontento generalizado se sumó otro: el de cuatro normalistas que se opusieron a las medidas del resto de sus compañeras. La comisión de alumnas asegura que las disidentes "son recomendadas de las autoridades del IEBEM".

Las expulsiones

Esas estudiantes, comentan, "empezaron a generar división en la organización interna de la normal", pero su disgusto real es que "no quieren vivir en la escuela, quieren estar de entrada por salida y nosotros seguimos contentas de estar viviendo ahí".

Ante tal situación, se realizó una asamblea del CGE en la que se decidió solicitar a las autoridades del IEBEM la reubicación de las cuatro inconformes para "no afectar al resto de las compañeras", apuntó la comisión. Las autoridades, al conocer los resolutivos, afirmaron que "el comité estudiantil las expulsó.

"El señor Puebla declaró que él tiene todo el poder para ponerlas donde quiera, pero que no lo va a hacer y exigió al comité estudiantil que las tiene que volver a admitir (a las excluidas). Desde entonces, Puebla nos amenazó con que nos retirarán los recursos para la alimentaciósn", cuestión que se hizo efectiva hace ocho días, expresaron las quejosas.

Las cuatro estudiantes disidentes insistieron en oponerse a los paros de horas y se "negaron a cumplir" con las tareas propias de la organización estudiantil que tradicionalmente se realizaban en la normal como eran guardias, elaboración de comida, limpieza, etcétera. En respuesta, las alumnas del CGE resolvieron que no las dejarían entrar al comedor con el resto de las compañeras, pero de ninguna manera les retirarían los alimentos.

No obstante, las autoridades acusaron al CGE de "violar los derechos humanos de las cuatro alumnas por dejarlas sin comer", apuntó la comisión.

Las estudiantes no dieron marcha atrás a sus demandas y las autoridades "a sus amenazas de que nos van a desalojar de la escuela y de que las que quieran estudiar tienen que irse a tomar clases extramuros en Jonacatepec".

Incrementada la polarización al interior de la normal, comenzaron esas clases en el Centro de Desarrollo Magisterial de Jonacatepec. Más de 100 estudiantes abandonaron la escuela y de éstas, sólo "entre 60 y 80 toman las extramuros", afirmaron las alumnas.

Aunado a lo anterior, el CGE denunció que Pedro Puebla, jefe del Departamento de Educación Normal del estado, ha ofendido a ese órgano llamándole "burdel y a sus estudiantes, prostitutas. Esto, a raíz de que estudiantes de El Mexe, Hidalgo, acudieron a una normal de mujeres a hacer brigadeos informativos"

Pese a la difícil situación, 192 estudiantes decidieron quedarse en su escuela. El pasado 21 de febrero la advertencia se cumplió. Les retiraron cerca de 12 mil pesos diarios de presupuesto que se destinaba a la escuela y con ello se cancelaron los alimentos. No tienen comida ni agua potable porque la bomba sigue descompuesta. No obstante, están dispuestas a seguir en la lucha.

Ahora, las estudiantes deambulan entre las calles del aquel pueblo del sorgo y del trigo para solicitar la ayuda de los habitantes. Piden alimentos en la pequeña central de abastos y en las casas de los ciudadanos y de vez en cuando acuden a la única tienda de Amilcingo.

No están dispuestas a perder su normal de 27 años de vida, "dotada de autogobierno", enfatizó la comisión. Ahora, el pliego petitorio del CGE contiene las siguientes demandas: reparación de la bomba de agua, mejoramiento de áreas académicas, otorgamiento de materiales, regreso del personal académico, administrativo y directivo, cese de las clases extramuros, respeto a la organización interna de las alumnas y reubicación de las cuatro estudiantes disidentes a una escuela "en donde puedan entrar y salir como ellas quieren".