LUNES 28 DE FEBRERO DE 2000
* Alerta de líderes de la Aric-Independiente y la ORCAO
La Sedena busca instalar otros dos campamentos en torno de Ocosingo
* Controlar accesos a poblados zapatistas, otro de los objetivos, afirman
Juan Balboa, corresponsal, Ocosingo, Chis., 27 de febrero * El Ejército mexicano pretende instalar dos campamentos más --para sumar cinco-- en los alrededores de la cabecera municipal de Ocosingo, así como controlar los principales accesos a zonas donde se ubican comunidades simpatizantes del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) en donde no existe presencia militar, confirmaron hoy dirigentes de la Aric-Independiente y la ORCAO.
Gabriel Hernández y Nicolás Moshan Gómez, dirigentes de la Aric-Independiente y la Organización Regional de Cafeticultores Autónomos de Ocosingo (ORCAO), respectivamente, afirman que funcionarios del gobierno interino de Roberto Albores Guillén amenazaron con desalojar a los indígenas que realizan un plantón en el camino rural que comunica al nuevo campamento militar, en el crucero de Putultón.
Indígenas tzeltales siguen en plantón en el crucero, en protesta porque la Secretaría de la Defensa Nacional no ha ordenado el retiro de los militares del nuevo campamento, cercano a Nuevo Centro de Población Israel. En tanto, representantes del gobierno de Chiapas, principalmente de la Procuraduría General de Justicia del Estado, amenazan con desalojarlos e iniciar procesos jurídicos para aprehender "a los dirigentes" que se oponen al destacamento militar.
Existe tensión en la zona, pues el medio centenar de militares que habitan en el asentamiento castrense se han desplegado por los cerros, en donde continúa el plantón de los indígenas y, paralelamente, elementos de la Policía de Seguridad Pública de Chiapas mantienen patrullajes constantes en la carretera que comunica a San Cristóbal de las Casas con Ocosingo.
Los dirigentes de la Aric-Independiente y de la ORCAO denunciaron que en dos ocasiones elementos del Ejército mexicano y de la policía estatal han penetrado al Nuevo Centro de Población Israel, "el pretexto es localizar supuestos terrenos de la Sedena, tráfico ilegal de maderas, armas de fuego, drogas e indocumentados, pero el objetivo es el hostigamiento a los zapatistas".
Seis comunidades de la región se han sumado a las protestas contra el campamento, y volvieron a exigir el retiro inmediato del Ejército mexicano y el cumplimiento de los acuerdos de San Andrés Larráinzar.
Gabriel Hernández y Nicolás Moshan afirmaron que la movilización indígena continuará hasta que Sedena desmantele el nuevo campamento y retire a los soldados de la región de Nuevo Israel. Insistieron en que los militares pretenden controlar todas las salidas de Ocosingo pues, indicaron, también pretenden instalar un campamento en Patria Nueva, con lo cual llegarían a cinco los asentamientos castrenses tan sólo en la cabecera municipal.
En tanto, delegados de una comunidad del municipio de Yajalón informaron hoy que algunos propietarios de la zona intentan entregar al Ejército mexicano sus tierras para que instalen un nuevo campamento castrense, y que los militares llegaron acompañados de Hans Setzer Marselle, ex propietario de unas 10 hectáreas, que ahora se pretende quitar a los campesinos para entregárselas al Ejército federal.