Ť La muestra permanente constará de 150 trabajos del artista plástico guatemalteco

Expondrá el museo Carlos Mérida obra gráfica, documentos y fotos

Ť En el recinto del país centroamericano también se mostrarán diversas condecoraciones

Merry Mac Masters Ť Luego del fallecimiento del pintor y muralista guatemalteco Carlos Mérida, ocurrida en 1984, su familia se dedicó a reunir la obra gráfica para promoverla mediante una exposición que itineró varios años por el país. Desde entonces, la primogénita y la nieta del artista, Alma y Cristina, respectivamente, ofrecieron a varios museos (el desaparecido Centro Cultural Arte Contemporáneo y el Rufino Tamayo, entre ellos) la muestra Carlos Mérida. El hombre y su gráfica. Los intentos de entonces fueron infructuosos; sin embargo, tras casi 16 años de gestión, el Museo de Arte Moderno de Guatemala lleva el nombre del artista.

Alma mandará a ese recinto la obra que posee, porque de una cosa está convencida: "No es justo que la obra esté guardada en mi bodega; la tiene que ver la gente".

La primogénita del artista que radicó desde 1919 en México, explica que la obra debe estar en un lugar fijo y protegida, ''porque cuando viajó por el país se maltrató, e incluso algunas piezas se extraviaron''.

En el MAM de Guatemala la donación estará en exhibición permanente. Además de unas 150 piezas gráficas, también incluirá un número similar de documentos personales, como los premios y diplomas que recibió el artista, así como las condecoraciones Aguila Azteca, que otorga el gobierno mexicano, y el Quetzal, que le entregó en dos ocasiones el gobierno guatemalteco.

Entre las fotografías, Alma menciona la de una exposición que María Félix le inauguró a su padre en París. También hay una docena de retratos que le hizo el fotógrafo estadunidense Edward Weston, aparte de aquella que le tomó Manuel Alvarez Bravo.

Respecto de la obra gráfica, aunque representa sus épocas creativas, Alma reconoce que no está todo lo que su padre produjo. Hubo piezas que regaló a sus hijos. Sin embargo, su vasta producción se remonta a sus pochoirs franceses (1928), e incluye carpetas como Imágenes de Guatemala (1928), Danzas de México (1937), y Trajes indígenas de Guatemala (1951), cuyos tirajes fueron de 200, 100 y mil ejemplares, respectivamente.

Quedarán obras en México

De la obra individual, Alma apunta que lo que no se incluirá, porque no lo tiene, está En tono mayor. También faltan Epitalamio, La dama de la esmeralda y El ojo cósmico.

-ƑA cuánto asciende la donación?

-Mucho. La gráfica más barata vale 2 mil dólares -responde Alma.

También existe la idea de hacer un nuevo libro de la obra gráfica de su padre, porque el que publicó, Cartón y papel de México (1981), con motivo de los 90 años del artista, no incluye los siete grabados que hizo después. Es un proyecto que se espera realizar a través de la Fundación G&T del país vecino, que, además, tiene el custodio de la obra por donarse.

En México quedará bastante obra de Mérida. Alma señala que la UNAM tiene unos 350 bocetos que su padre hizo para sus murales en concreto tallado y policromados en el Multifamiliar Juárez (1952), algunos de los cuales fueron destruidos, casi en su totalidad, en el temblor de 1985. Anota que en el Museo Nacional de Arte le pidieron media docena de obras, de las cuales ella sólo tiene dos, para que ahí haya obra representativa de su padre. Su progenitor, recuerda, donó el bajorelieve Retablo (1961) al Museo de Arte Moderno, que también tiene el cuadro El pájaro herido (1962), hecho con politec sobre papel amate, y el gran tapiz Pájaros en diálogo (1981).

Para los efectos de la donación, aún está por firmarse un convenio con el Ministerio de Cultura y Deportes de Guatemala. La petición de la familia es que la obra esté en un lugar adecuado y se monte dignamente. Sobre la salida de la colección, Cristina asegura que no hay "resentimientos de que no lo hayan aceptado aquí". Simplemente, "no era el momento". Tampoco se trataba de andar "mendigando" la obra. Además, en Guatemala será una atracción "principal", mientras que aquí pasaría a ser "un museo más".

La nieta de Carlos Mérida espera que la inauguración de la muestra sea el 2 de diciembre, fecha de nacimiento de su abuelo. No obstante, dice que todo marcha tan bien que tal vez sea antes.

(Mientras la colección de la familia Mérida se va del país, la Biblioteca Nacional de Educación, Centro Cultural del SNTE, la exhibe con motivo de su cuarto aniversario, en Leandro Valle 20, Centro Histórico. El 29 de febrero es el último día de la exhibición)