* Las demandas tienen como respuesta acciones como las de Yajalón: CNOC
Rechazan cafetaleros la represión oficial
* El Consejo Mexicano del Café ha fracasado y debe desaparecer, dice asesor de productores
Angélica Enciso L. * La Coordinadora Nacional de Organizaciones Cafetaleras (CNOC) señaló que las demandas que los productores han hecho desde hace años al gobierno no deben tener como respuesta la represión, tal como sucedió hace unos días en Yajalón, Chiapas.
Explicó que se ha planteado al gobierno federal la necesidad de atender al sector ante los bajos precios que se han registrado en los últimos años, sin que aún se haya tomado alguna acción decidida, lo cual, sumado a los castigos que recibe la producción nacional en el mercado externo, constituye una pérdida de hasta 40 por ciento en el valor del grano.
Fernando Celis, asesor de la CNOC, dijo que tanto el gobierno federal como la Secretaría de Agricultura tienen responsabilidad directa y deben establecer un marco de diálogo entre las organizaciones de productores, comercializadores, industriales y gobierno federal.
Advirtió que el Consejo Mexicano del Café ha fracasado y es una institución que debe desaparecer para que se establezca un organismo con reglas y compromisos más claros sobre el papel que sus integrantes deben tener.
Entre los principales problemas que enfrenta el sector, destacó la sobrevaluación del peso en relación con el dólar, ya que al ser el café un producto básicamente de exportación ų85 por ciento se destina al mercado externoų, los ingresos en pesos mexicanos son menores para los cafetaleros.
Asimismo, precisó, la caída constante en los precios internacionales del aromático, que tienen una tendencia a la baja al pasar en los últimos cuatro meses de 135 dólares a 104 dólares.
En este aspecto también tiene que ver la forma desordenada en que se realizan las exportaciones, ya que se concentran en los meses de enero a abril y la respuesta de las autoridades ante este hecho es que no puede intervenir en estos procesos.
De igual forma, destacó que las importaciones afectan a los productores, al desplazar la producción nacional del mercado doméstico y que hasta noviembre del año pasado esas compras ya habían llegado a los 235 mil 500 sacos de 60 kilos, y aun con las múltiples reuniones y acuerdos que han tenido con autoridades no se ha hecho transparente este proceso.