Ť Si se ignoran sus demandas se aliarán a la sección 22 del magisterio, advierten


Duplicar presupuesto de la Ssa en Oaxaca, exigen trabajadores

Elizabeth Velasco C. Ť Cientos de trabajadores de Oaxaca, de las secciones 35 y 73 de la Secretaría de Salud (Ssa), demandaron ayer que se duplique el presupuesto sanitario para esa entidad porque se resiente desabasto de medicamentos en 60 por ciento; rezago en la plantilla de personal de 40 por ciento; carencia de hospitales de especialización y sobresaturación de los actuales, entre otros lastres registrados pese a que los oaxaqueños superan la media nacional en índices de enfermedades de la pobreza.

En una marcha-mitin de la sede de la Federación de Sindicatos de Trabajadores al Servicio del Estado (FSTSE) al Zócalo capitalino, el galeno David Cruz Velázquez, secretario general de la sección 35 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Ssa, y Pedro Alavez, dirigente de la sección 73, indicaron que "es necesario voltear a Oaxaca, que aun cuando es una de las entidades más pobres del país, no tiene hospital de especialidades, pero sí altos índices de mortalidad infantil por males respiratorios y diarreicas; severo problemo de paludismo por el aumento de casos en la costa luego de los huracanes, y cada dos días un deceso femenino por cáncer cérvico-uterino".

Según los dirigentes, el presupuesto destinado a la entidad "es ridículo, pues sólo le otorgaron 600 millones de pesos este año, y se requieren al menos mil 200 millones para abatir 20 años de rezago en materia sanitaria que padecemos con respecto al país".

Explicaron que pese a que "gracias a los esfuerzos de los trabajadores del sector salud" se abatieron los altos índices de mortalidad infantil, "mantenemos un alto porcentaje de ocupación hospitalaria y falleci- mientos. En materia de paludismo estamos por encima de la media nacional; en cáncer cérvico- uterino, Oaxaca tiene una tasa de 7 por ciento de enfermedades, cuando la media nacional es de 3.5 por ciento, y no tenemos suficiente personal, en tanto que las clínicas de displasias para detección oportuna del cáncer y los hospitales están saturados y no se hace nada", dijo.

Cruz refirió que el Hospital Aurelio Valdiviso, de segundo nivel y el mayor de la entidad, trabaja a 130 por ciento de su capacidad; en igual situación está el de Tuxtepec; los de Juchitán y Cuicatlán, creados para 60 camas, sólo tienen mobiliario, personal y recursos para un hospital de 30 camas. Acotó que si bien se crearon farmacias de la beneficiencia pública, "no resuelven el grave desabasto de medicamentos".

Además de demandar más presupuesto sanitario y la transformación del Hospital Aurelio Valdiviso en uno de especialidades, exigen un aumento salarial de 60 por ciento; 90 días de aguinaldo; recodificación de 500 trabajadores y rezonificación de salarios con los de la zona de vida cara, compromisos "que la FSTSE se ha negado a concretar".

Asimismo, exigen la aplicación de normas laborales similares a las que operan en la República para quienes atienden casos de paludismo en Oaxaca.

Los dirigentes sindicales advirtieron que permanecerán en plantón en la sede de la FSTSE --ya llevan 10 días-- hasta que esa central --cuyo "dirigente (Joel Ayala) es el rey de la mentira"-- y las secretarías de Salud y Hacienda respondan a sus demandas.

Advirtieron que si se ignoran sus demandas, se aliarán al movimiento de la sección 22 del magisterio oaxaqueño, el cual discute, entre otras cosas, su plan de acción también en pos de la rezonificación.

Por último, reivindicaron su postura contraria a la privatización de la industria eléctrica y de la educación superior, y expresaron su repudio al uso de la fuerza pública y la violencia por parte de las autoridades para acallar todo reclamo de cualquier sector social.

Al respecto, remataron: "Vemos con preocupación que cada día hay más cerrazón por parte del gobierno frente a las demandas de trabajadores de Chapingo, del ISSSTE, de los miembros del CGH y de los normalistas de Hidalgo, así como el incremen- to de acciones paramilitares en Chiapas. Evidentemente, como ciudadanos y sindicalistas, nos oponemos a este retorno de las épocas duras y al uso de la violencia".