Ť El tijuanense ganó por fallo dividido y unificó el título supergallo


En una polémica decisión, Erik Morales venció a Marco Barrera

Ť Frenética batalla de principio a fin Ť Se favoreció al púgil preferido en las apuestas

Las Vegas, 19 de febrero Ť Al final de una de las contiendas más emotivas entre púgiles mexicanos por un título mundial, el rostro de Erik Morales lo reflejaba todo: los ojos semicerrados, la nariz sangrante, el gesto incrédulo...

Sin embargo ųen una más de las ya clásicas decisiones polémicas del boxeoų el púgil de Tijuana se vio favorecido por los jueces y ganó por discutida decisión dividida a Marco Antonio Barrera, para unificar los títulos supergallo CMB y OMB, en la función llamada Campeón contra Campeón, que fue una auténtica guerra entre dos valientes, pero que quedó manchada con el triunfo para el favorito en las apuestas, cuyo promotor organizó la cartelera para el peleador que tiene contrato con la poderosa televisora HBO, y a quien muchos consideran el sucesor de las glorias de Julio César Chávez.

BARRERA_MORALES Duane Ford dio 114-113 para Barrera, en tanto que Dalby Shirley favoreció a Morales por 115-112 y Carol Castellano 114-113.

"No sé que tengo qué hacer para ganar aquí, pero la gente es el mejor juez y así es el boxeo", expresó Barrera. Erik admitió que fue su rival más difícil y señaló que dará la revancha a su rival sólo en peso pluma, porque no combatirá más en las 122 libras.

Fue una batalla sin tregua, de golpearse sin pedir cuartel desde el primero hasta el último segundo, lo que mantuvo en auténtico alarido a los cerca de 6 mil asistentes a la arena del hotel Mandalay Bay. Por entrega ninguno merecía perder, pero fue el capitalino el que dominó la mayor parte de las acciones, con un buen manejo de su mano izquierda y sobre todo con golpeo a las partes bajas.

Erik se vio disminuido por sus problemas de peso y sus ataques fueron esporádicos, sin fuerza y muy lejos de las virtudes que lo convirtieron en el mejor de 1999 para el CMB. Dio la impresión de querer ganar con un golpe y no fue frecuente en sus ofensivas.

El Terrible (23 años) se mantuvo invicto con marca de 36-0 y 28 nocauts, y realizó con éxito su novena defensa, mientras que el Barreta (26) sufrió su tercera derrota, por 49 victorias y 36 nocauts, y perdió por segunda ocasión el cetro supergallo de la OMB.

Barrera dominó los asaltos iniciales al pelear en la distancia corta, nulificar la potente derecha de Morales y conectar ganchos de izquierda y derecha al cuerpo. Erik intentó responder con cruzados de derecha.

El quinto round fue memorable. Erik encontró la distancia y con dos derechas al rostro hizo tambalear a su contrincante, que se creció al castigo y conectó una izquierda a la quijada que por poco manda a la lona a Morales. Ambos terminaron exhaustos.

Después, disminuyeron el ritmo, pero siguieron tirando golpes. En el noveno asalto, Barrera lanzó combinaciones de izquierda-derecha al rostro y lo tuvo en dos ocasiones al borde del nocaut. Sin embargo, Marco sufrió un corte en el pómulo izquierdo.

Morales intentó regresar en el décimo con base en su potente derecha, pero Marco asimiló los golpes y sólo se tambaleó y por su gran condición física no cayó a la lona.

En el episodio final se lanzaron a una pelea de callejón y Barrera encontró tres ganchos de izquierda a la quijada que hicieron bailar a Erik, quien por orgullo no cayó, pero después, debido al cansancio, su rodilla tocó la lona para la única caída. El réferi Mitch Halpern le contó y terminaron como habían empezado: tirando golpes, para un total calculado en mil 500 impactos.