Ť "Cotidiana", la intervención de ese partido y Cárdenas en la casa de estudios

Labastida pide al PRD sacar las manos de la universidad

José Gil Olmos, enviado, Villa Nicolás Romero, Méx., 8 de febrero Ť El candidato presidencial del PRI, Francisco Labastida Ochoa, acusó directamente al PRD y a Cuauhtémoc Cárdenas de estar metidos en el conflicto de la UNAM y pidió a los perredistas que saquen las manos de la máxima casa de estudios para no hacer de ella un "botín político".

Respecto de la demanda cardenista de que sea investigada su responsabilidad en el inicio del conflicto, cuando aún era secretario de Gobernación, el priísta contestó que es sólo un intento del candidato del PRD de "tender una nube de humo" para cubrir la intervención cotidiana que tienen en la vida universitaria.

Sobre la posibilidad de que el gobierno actúe en Chiapas de la misma forma que con el CGH, aclaró que para el primer caso se creó la Ley para el Diálogo, la Concordia y la Paz Digna en Chiapas, aprobada por el Congreso de la Unión. Para el caso de la UNAM reiteró su postura de que "las buenas decisiones en política pasan por el camino de la aplicación de la ley".

Aseguró además que ya no respondería a las acusaciones en su contra de parte de los candidatos de otros partidos. Sin embargo terminó con nuevas acusaciones en contra del PRD y de Cárdenas.

Después de sostener un encuentro con decenas de mujeres que le pidieron impulsar condiciones de equidad de género, el sinaloense habló ante los representantes de los medios, frente a quienes insistió en que el destino y definición del proyecto de la UNAM deben discutirlo sólo los universitarios.

"Cuando se le dio la autonomía a la universidad, se le dio precisamente para evitar que ésta se convirtiera en botín político de los partidos. šFuera las manos de los partidos políticos de la universidad!", exigió.

Dijo que los profesores, investigadores y los propios alumnos tienen madurez para debatir el futuro de la institución e insistió en que nadie, "ningún partido debe tomar a la universidad como un botín".

"Los políticos ųagregóų podemos opinar sobre ello, pero debemos, fundamentalmente, contribuir con responsabilidad a la construcción de un futuro libre; que decidan entre ellos, entre los universitarios, qué queremos en la universidad".

En caso de llegar a la Presidencia de la República, Labastida Ochoa ofreció respetar la autonomía de la UNAM, darle apoyo económico y promover el derecho a la educación gratuita y de calidad.

Al terminar el encuentro con las mujeres mexiquenses subrayó que como conclusión del conflicto universitario se debe de advertir la existencia de "pequeños grupos radicalizados en el país" que querían imponer su decisión a las mayorías.

De inmediato pidió no dar marcha atrás en la construcción de la democracia. "Para que la democracia sea respetada y fortalecida tiene que entrar el imperio de la ley", remató el sinaloense.

Cuestionado sobre sus declaraciones de que grupos minoritarios intentaron hacer del problema universitario un conflicto nacional y de la posible interpretación de que por ello intervino el gobierno federal, a fin de evitar disturbios en las elecciones presidenciales, Labastida contestó que desconocía si esto había motivado la actuación del secretario de Gobernación, Diódoro Carrasco, y del presidente Ernesto Zedillo.

Finalmente, de las denuncias que en algún momento hizo de que, según informes de Gobernación, se había detectado gente armada en la UNAM, señaló que "posiblemente la retiraron".