Ť Ojalá me salga como una de Almodóvar: Schyfter


El humor es necesario para sobrevivir, dice Geraldine

Ť El lunes 7 comenzará el rodaje de la cinta Las caras de la luna

Mónica Mateos Ť Las caras de la luna es el filme que el próximo lunes empieza a rodar la directora mexicana Guita Schyfter, en el que conjunta un destacado elenco encabezado por Geraldine Chaplin, Carmen Montejo y Diana Bracho. Destinos que se entrecruzan y se iluminan unos a otros, mujeres que no se parecen en nada a los tradicionales estereotipos femeninos del cine mexicano de la época de oro y una dirección nítida, son los elementos que conformarán la historia de esta nueva coproducción Argos-Imcine.

''Ojalá me salga como una película de Almodóvar", señaló la cineasta durante la rueda de prensa realizada la mañana del viernes para anunciar el primer pizarrazo. El escritor Hugo Hiriart, responsable del guión, explicó que durante muchos años la rumbera, la santa y la prostituta, entre otras, ''eran esas entidades raras formadas por la enajenación del hombre. Los personajes femeninos en la pantalla grande fueron en gran medida creaciones masculinas. Un ejemplo: Marilyn Monroe. Así funcionaba el cine. Ahora, vemos a la mujer hablando de la mujer con seriedad y con ello se están rompiendo esquemas creados por el hombre".

Estar en un harén, pero sin pachá

En Las caras de la luna se describirán las inquietudes y sueños de ocho féminas que se reúnen en un imaginario Festival Latinoamericano de Cine de Mujeres. Chaplin, Montejo, Bracho, Carola Reyna, Ana Torrent, Nora Velázquez, Ana Bellinghausen y Claudette Maillé serán guerrilleras exiliadas, bisexuales solitarias, amantes secretas de importantes políticos, defensoras de los derechos humanos, jóvenes y viejas, madres e hijas, amigas y rivales. ''Seremos todo, excepto monolíticas, por eso esta cinta no es esquemática, no es sobre la mujer sino sobre las mujeres y sus diferentes caras", apuntó la actriz Diana Bracho.

Para la hija del inolvidable Charles Chaplin, se trata de la segunda vez que filma en México (hace 20 años en Tlacotalpan, Veracruz, participó en el rodaje de La viuda de Montiel, dirigida por el chileno Miguel Littin) y la primera que lo hace bajo la dirección de una mexicana. ''La pasé tan bien leyendo el guión que pensé que el espectador también se va a divertir. Es una película divertida, llena de mujeres. En los ensayos me he sentido como si estuviéramos en un harén, pero sin pachá".

chaplin-jpg Geraldine fue una de las actrices más solicitadas durante la rueda de prensa. A ella le gusta charlar y sonreír: ''No me siento totalmente cómoda actuando en español, me siento como extranjera. šAh!, pero este proyecto es maravilloso, me reí tanto leyendo el guión que hubiera hecho cualquier papel. Retrata a una serie de mujeres con cariño y con humor, cada una es insoportable y entrañable; la relación entre ellas es muy divertida. Me siento muy alegre trabajando con mis compañeras, como si estuviera bebiendo champaña todo el día".

Para la actriz de cintas como El jardín de las delicias (1970), de Carlos Saura, hacer cine es cada vez más difícil; ''las películas están hechas más para lo que recauden en un fin de semana y ya. Es terrible".

-ƑComparte la opinión de Hugo Hiriart, de que la presencia de la mujer en el cine es un producto de la visión del hombre?

-No, es un poco radical esa afirmación. Hay muchas actrices que han aportado mucho al cine, como Catherine Hepburn; a ella no la inventó ningún hombre, ni a la Garbo. Incluso, no creo que Marilyn sea el invento de nadie.

''Hacer películas es un trabajo de equipo, de verdad.''

-ƑPor qué vive en España?

-Hace 35 años hice una película ahí, Doctor Zhivago. Fueron 14 meses de filmación y nunca hice las maletas para marcharme. Acumulé tantas cosas, libros y un perro que siempre decía: ''bueno, me voy mañana''. Y ahí estoy, todavía, y sigo diciendo que de paso.

-ƑCuáles son sus exigencias para aceptar participar en una película?

-Lo importante es que me la pase bien leyendo el guión.

Un don, llevar el apellido Chaplin

-Tiene una mirada muy risueña. El humor es una de sus grandes herencias.

-šClaro!, como cualquier persona que quiere sobrevivir. Sin el humor uno se muere.

-ƑQué tanto le pesa el apellido?

-šEs un don! Es una maravilla, lo mejor que tengo, me encanta. Hasta ahora nunca ha sido contraproducente.

-Después de Las caras de la luna, Ƒqué proyectos tiene?

-Haré una película en francés, en la que interpreto el papel de una muy antipática egiptóloga británica, solterona. Actuaré con Sophie Marceau.

-ƑQué tan complicado es para usted encontrar proyectos que le interesen?

-Soy una actriz vieja, entonces es más complicado. No me la paso leyendo cosas y rechazando todo. Lo difícil es encontrar un director que no sea aburrido. Hay problemas para conseguir personajes, como el que hice hace poco en La madre Teresa, porque a nadie le interesan las personas viejas y las mujeres viejas, menos.

-ƑYa llegó el personaje que siempre quiso interpretar o lo sigue esperando?

-Han llegado tantos. Pero más que los personajes a mí me gusta trabajar. Yo hago cualquier personaje, me da igual. Si me ofrecen hacer de silla y me gusta la película, lo hago. En el fondo cada papel es interesante y hay que sacarle el jugo.

-ƑLe gustaría dirigir?

-No. Me gusta demasiado ser dirigida. Me gusta ser arcilla, que me moldeen.