Ť El da la almendra y la verdad literaria, no literal: José María Pérez Gay


Biografiar el siglo de un país, tarea de Carlos Fuentes, dijo Monsiváis

Ť Marcela Serrano: el narrador mexicano nos muestra su audacia y su propio vanguardismo

Ť El tiempo y sus misterios, tema toral del autor de La región más transparente, señala Pitol

oh-fuentes-2-jpg Renato Ravelo, enviado, Jalapa, Ver., 4 de febrero Ť Carlos Fuentes estuvo casi 48 horas en la ciudad de sus ancestros. Ciudad de olfato, como la describe en Los años con Laura Díaz, a merced de la ''pertinaz" lluvia de aplausos de una población que se le volcó y de unos colegas escritores que disolvieron algunas de sus esencias literarias. Tiempo de citas para un narrador que aspira a realizar en su conjunto una obra que pudiera titularse ''La edad del tiempo".

También los reconocimientos oficiales del caso. El gobernador de Veracruz, Miguel Alemán, le entregó un diploma por tratarse de ''una pluma que no claudica en la defensa de los valores que tenemos como nación"; el rector de la Universidad Veracruzana, Víctor Arredondo, a su vez le impuso otra medalla; el público, el jueves en el auditorio universitario y hoy en el Teatro del Estado no se cansó de hacerlo jalapeño por la vía sonora del aplauso.

Búsqueda atrevida, original y culta

El mediodía del viernes, Fuentes leyó de su novela aquellos fragmentos que se referían a Jalapa, a ese paisaje oloroso de pan y maderas, que eran también los ligados a ese emotivo abrazo simbólico a la ceiba que la protagonista hace, cuando decide que no va a ser La Llorona, cuando descubre que la naturaleza no puede tener dueño y que la historia se reinventa justamente en los límites del propio cuerpo.

La lectura fue la liturgia que antes Fuentes había definido en un pequeño ensayo, al hablar con ejemplos del novelista como testigo del tiempo (la Guerra Civil española, la Segunda Guerra Mundial y la guerra fría, son los tres acontecimientos que lo marcan), y de la génesis de su personaje Raquel Méndez Alemán. La explicación del truco vino antes que la magia.

oh-fuentes-1-jpg En el comienzo del tiempo de las citas, el jueves en el auditorio del Instituto de Investigaciones Lingüísticas y Literarias, Carlos Monsiváis explicó que si la obra de Fuentes en general no conoce las fronteras temáticas, es claro que en narrativa ''tiene la empresa de biografiar el siglo de un país".

Y esta magna tarea, que rebasa cualquier intento, opinó Monsiváis: ''En Fuentes se hace de manera sui generis, desde lo esencial que permite la literatura... con Los años con Laura Díaz, el país dispone de una versión imposible de soslayar". Y la intervención de Monsiváis transcurrió en una lista de citas de la obra de Fuentes que confirmaba lo dicho.

José María Pérez Gay, señaló que la novela centro del homenaje a Fuentes: ''Es la creación de un nuevo presente, nuevo y verdadero, creado deformando la falsa realidad de la cronología de 74 años". Ningún narrador le ha exigido tanto a la novela como Fuentes, enfatizó.

En esa exigencia a la novela que comienza con La región más transparente (1957), el género en México dejó de ser ''artesanía regional para ser la mentira necesaria para conocer la realidad", cuando Carlos Fuentes aportó su búsqueda atrevida, original y culta, dijo Pérez Gay.

Fuentes da en su obra la almendra y la verdad literaria, no literal: ''Los años con Laura Díaz no transita por un registro de hechos, sino por una caracol de resonancias" que la hacen revelar esa verdad interior, agregó.

Sealtiel Alatriste dijo: ''Tengo la impresión de que Los años con Laura Díaz, más que una novela histórica, desmonta el estilo de Fuentes, y que ordenados como mecanismo de reloj, los hechos de la novela son los grandes momentos de la historia del siglo XX mexicano".

Y agregó: ''Si La región... nos da este gran fresco de la vida mexicana reduciendo el tiempo real a unos cuantos días, pero narrando el primer medio siglo de nuestra historia, Los años... parten de un momento, de un mural, para después irnos dando, paso a paso, cada uno de los muchos instantes concentrados en ese mural". (Presente en la cita, por cierto, estaba el joven ensayista Rafael Lemus, quien ganó el concurso convocado por Alfaguara sobre Los años con Laura Díaz)

La capacidad femenina de renacer

Marcela Serrano, escritora chilena, dio a su vez el tiempo femenino a esa disolución de algunas de las esencias de Fuentes: ''Los años con Laura Díaz son los años de todas nosotras. El que revise el siglo XX se verá obligado a reconocer que la revolución cultural más importante de estas diez décadas fue aquélla, la de las mujeres" y propuso leer la novela no como el fresco mexicano del siglo XX, sino como la del siglo latinoamericano.

fuentes-homenaje-1-jpg Luego de hacer una revisión lo mismo a algunos mitos literarios femeninos (Ema Bovary, Ana Karenina, Isabel Archer), aventuró la hipótesis de que Laura Díaz ''posee una connotación que caracteriza a la mujer de hoy: esa capacidad únicamente femenina para mudar enteramente de piel, cíclicamente, como los reptiles, cada vez que la vida se lo exija, porque poseen ese raro sentido de volver a nacer, mil veces si es necesario como Laura lo hizo, porque es el cuerpo que lo sabe y lo dicta".

En ese sentido, para Serrano: ''La única salvación para quienes dan la vida es volver y volver a reproducirse, transformándola dentro de sí mismas con una permeabilidad que un ser humano que no ha parido es incapaz de hacer". No obstante, reconoce que al sugerir lo anterior en su novela, Fuentes ''nos muestra su audacia, su mirada adelantada a su tiempo, su propio vanguardismo".

El tiempo de Sergio Pitol lo fue para el reconocimiento general de que Fuentes ha dipuesto en ''la edición total de su obra narrativa, una arquitectura ideada para integrar todos los mundos que forman su mundo, donde las fábulas e historias que ha creado puedan potenciarse en el lugar y la compañía adecuada rige una lógica de distribución temática, pero también la marca poderosa de un destino, la presencia de una voluntad, una manera propia de concebir el mundo, de volver a crear atributos y manías de la comedia humana, de representar la utopía vislumbrada en los diarios de Colón".

El tiempo y sus misterios, sostuvo Pitol, ''lo vemos con claridad ya a estas alturas de su obra, ha sido el tema fundamental de Carlos Fuentes".