Al músico de la melancolía

Ayer publicamos que a las primeras 20 personas que enviaran estrofas acerca de Joaquín Sabina a la cuenta de correo de la sección recibirían boletos dobles para sus conciertos del viernes y el domingo. A la convocatoria respondieron más de 150 lectores. Sólo 20 fueron los afortunados, pero vaya como consuelo al resto de los participantes una selección de los versos que les inspira el cantautor español.

Una voz aguardientosa canta en pleno invierno

mientras para los estudiantes la vida es un infierno.

Yo te pido una cosa, Sabina: no los dejes solos,

pues con tu palabra sabia puedes abrir mas ojos.

 

Si piensas que Marcos es genial,

también ellos lo son.

Necesitan mucho apoyo,

pero mucho más corazón.

 

Juan María Jáuregui Navarro

Viene a México Joaquín

con su traje de pirrín.

Sabina ya no pinta,

poquito a poco se despinta.

 

Pero cómo no verte,

si La Jornada se divierte

poniéndonos a hacer

coplas al vapor

pal cantautor.

 

Raúl Ornelas

Porque eres el Einsten de la música,

la relatividad de la vida y el amor.

Sabina, por favor no calles

las formulas de tu corazón.

 

Adriana Muro

Poeta de lo absurdo y cotidiano

citadino y mal hablado

enarbolando una mentira más

texturizando el ambiente

con una canción flotando suavemente

 

Alejandro Bautista Hernández

Vampiro posmoderno

con un tequila por cada duda,

devienes trasnochado eterno.

En tanto el siglo escapa

oscureces ojeras en el Tenampa

 

Hispano juglar,

intemporal aeda,

nuestro de bar en bar,

melancolía en cada peda

 

César Ramírez Miranda

Hora muda en la cantina,

rudas patrias nos asombran,

y mujeres de reales mentiras

guitarras nadan en tequila

del silencio roto por Sabina

 

Jerojamin Barrios

Lo primero que hizo el tío al llegar al valle

fue fumarse un pitillo en plena calle.

No veas lo que pasó saliendo en La Jornada,

cuando detrás del pasamontañas aparecía su mirada.

 

Mario Torres Jiménez

Mira, Joaquín, no se nos ocurre ni puta,

pero aquí hay una chica que se desnuda por verte,

y claro, el que escribe, aunque no se desnude,

queremos ir a tu concierto y no tenemos ni un perro cinco.

 

Ojalá no te mate una cruda antes de que podamos conocerte,

ven más seguido.

 

Tus admiradores

 

Chivis que te ama y Cuauhtémoc

que se empeda con tus rolas

Joaquín, el más majo de todos los majos,

con quien concuerdo en muchos casos,

recibe unos cuantos besos en este verso.

 

Norma Abreu