* Es innegable el vínculo de estos hechos con la visita del Presidente a España, dicen


Exigen defensores libertad de los vascos expulsados

Triunfo Elizalde * Pilar Noriega, defensora de Oscar Cadena, vasco refugiado en México, quien desde hace tres años y un mes se encuentra preso en Almoloya de Juárez, estado de México, dice: "no puede negarse que la ilegal entrega de Josu Gotzon Larrea Elorriaga, Miguel Santiago Izpura García, José Angel Ochoa de Eribe y Mikel Arrieta Yopiz a autoridades españolas tiene relación directa con la visita que en estos momentos lleva a cabo el presidente Zedillo a España, lo que confirma que se trató de una expulsión política".

Está de acuerdo con Mikel Korta, delegado de Euskal Herritarrok (Herri Batasuna) e Iñigo Elkoro, abogado de presos políticos vascos en España, en el sentido de que la extradición sumaria contra los cuatro españoles antes mencionados "fue una concesión al Estado español".

De hecho, Korta y Elkoro se mostraron preocupados porque el gobierno mexicano está aplicando una política externa que "no respeta siquiera el Tratado Bilateral de Extradición celebrado entre ambos países", el cual contiene reglas precisas para llevarse a cabo, situación que ha afectado, en los últimos cinco años, a 15 vascos refugiados aquí, y que no han regularizado su situación migratoria por temor a ser detenidos y entregados de inmediato a la policía española.

Respecto al proceso de extradición que se sigue contra Cadena, que ella y Lamberto González Ruiz atienden jurídicamente, puntualiza que "sólo una acción política podría motivar un dictamen contrario al derecho que aquél tiene para quedarse en México, puesto que es un perseguido político y no un terrorista de ETA, como el gobierno español ha querido hacer creer, pero no se le han podido comprobar los hechos que se le imputan.

"Lo incorrecto en el caso de Cadena, y en otros asuntos similares, es que no se siga el proceso de acuerdo con la ley de población. Los últimos vascos expulsados y entregados a la policía española sufrieron serias violaciones a sus derechos humanos. Fueron detenidos ilegalmente dentro de sus domicilios, mismos que fueron allanados sin orden judicial. Yo fui testigo de que se llevó un cerrajero para abrir sus casas y detenerlos, porque los afectados me avisaron lo que estaba sucediendo".

Por la tarde, al ser informada por La Jornada de la detención de Mikel Korta e Iñigo Elkoro cuando llegaron al aeropuerto internacional de Barajas, en Madrid, la abogada Pilar Noriega exclamó:

"šEso sí es increíble! Habría que ver cuáles son los delitos de que se les acusa. Estas detenciones revelan intolerancia, porque ellos han salido libremente de España, tienen vida pública y notoria. Insisto, habría que ver cuál es el motivo de su detención".

Por su parte, Rafael Alvarez, primer visitador del Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez, declaró:

"Nos parece un exceso de parte de las autoridades españolas, ya que esta acción no favorece el proceso de paz y entendimiento respecto al conflicto entre los vascos y el Estado español, sobre todo cuando Elkoro es defensor de presos políticos, y de acuerdo con los principios de la ONU no debe confundirse al abogado con las causas políticas de su defendido; y por lo que a Korta se refiere, es delegado del Partido Euskal Herritarrok (Herri Batasuna) para América, agrupación política reconocida por el gobierno español. Sería preocupante que su detención se prolongara, lo mejor es que los dejaran en libertad incondicional, sobre todo cuando el presidente Zedillo se encuentra en España, y ellos acababan de llegar de México".

En opinión de Adrián Ramírez, presidente de la Liga Mexicana por la Defensa de los Derechos Humanos, "los defensores de presos políticos y los de derechos humanos no deben ser detenidos, pues, Ƒde qué manera podrían llevar adelante sus defensorías jurídicas si se les quiere involucrar con los motivos de sus defendidos? Creo que la comunidad internacional debe protestar. Esto no puede suceder de manera impune".