* El lunes, la decisión de la Alta Corte británica


Confía Chile en que la próxima semana Pinochet retorne a su país

Dpa, Ap, Afp y Reuters, Londres, 27 de enero * La Alta Corte británica anunció que el lunes tomará su decisión sobre los recursos presentados para impedir la liberación de Augusto Pinochet, y el gobierno del presidente Eduardo Frei confió en que la próxima semana el ex dictador recuperará su libertad y regresará a Chile.

Tras escuchar durante dos días los alegatos tanto de Bélgica y de seis organizaciones humanitarias, por una parte, y de Gran Bretaña, por otra, el juez Maurice Kay informó que el lunes entrante anunciará su decisión, y por lo pronto se retiró para estudiar las argumentaciones presentadas y decidir al respecto.

El magistrado deberá determinar si el ministro del Interior Jack Straw cometió una injusticia al negarse a divulgar a las partes acusadoras los informes médicos practicados a Pinochet, en los cuales se basa desde el 11 de enero cuando anunció su intención de liberarlo debido a que no está en condiciones mentales para un juicio.

En caso de que Kay declare procedente el alegato contra las acciones del ministro del Interior, entonces debe realizarse una audiencia formal y Straw debería hacer públicos los informes médicos y permitir que se le practique uno nuevo con intervención de las partes que representan la acusación.

Pero hay dudas de que el juez acepte los recursos, pues al parecer sería determinante el hecho de que el gobierno español se haya abstenido de apelar la decisión preliminar del ministerio inglés, pues justo éste alegó que España no estuvo presente y que ni Bélgica ni nadie más puede considerarse como parte del proceso.

En un informe a la Cámara de los Comunes, Straw informó que el examen médico a Pinochet tuvo un costo de 5 mil 500 libras, equivalente a unos 8 mil 900 dólares.

Empero, el costo global de este procedimiento le ha costado hasta el momento al Estado británico 1.3 millones de libras esterlinas o cerca de 2 millones de dólares.

En Madrid, el canciller Abel Matutes reiteró que la decisión de la justicia británica del lunes no será recurrida por España, a pesar de que el juez del caso, Baltasar Garzón, y la defensa de las víctimas de la dictadura recomendaron agotar todos los recursos para no dejar escapar a Pinochet de la extradición que reclaman, reportó el corresponsal Armando G. Tejeda.

Matutes insistió en que este caso es ya político y no judicial, ya que la decisión es exclusivamente de Jack Straw, por lo que su gobierno respeta la decisión que adopte. Más aún, acusó a Straw de querer "compartir" su responsabilidad con otros, pese a que la ley británica no se lo autoriza.

Puntualizó que el argumento de que Pinochet padece enajenación mental es una decisión que recae sólo en el ministro del Interior británico, pues ni siquiera le toca al primer ministro Tony Blair ni al gobierno que encabeza como colegio.

En ese sentido, se mostró satisfecho de que esté por culminar el caso y de que Madrid pueda preservar sus lazos con Chile.