* Además del incremento se venden kilos chiquitos
Aunque cueste la cárcel se aplicará el nuevo precio, dicen en Monterrey
En varios estados y ciudades de la república continuaron ayer las manifestaciones de los industriales de la masa y la tortilla, justificando el aumento, mientras las autoridades comenzaron a aplicar algunas sanciones a los establecimientos que estén cobrando el nuevo precio al kilo de tortilla.
En Culiacán, industriales tortilleros acordaron proponer un precio de 5 pesos al producto, pero el valor final dependerá del resultado de las negociaciones con la Secretaría de Comercio (Secofi), informó Edmundo Cárdenas Urcelay, presidente de la Federación Estatal de Industriales de la Masa y la Tortilla, quien calificó de incongruente y anticonstitucional que las autoridades federales adviertan con cárcel y sanciones a quienes apliquen el precio de 5.50 pesos el kilo.
En Monterrey, Nuevo León, Porfirio Garza Rojas, representante de más de mil tortillerías, advirtió que mantendrán el aumento de precio aunque les cueste cárcel, porque han subido los costos de todos sus insumos y de no hacer el ajuste tendrían que cerrar sus negocios.
El también presidente de la Federación de Industriales de la Masa y la Tortilla de Nuevo León declaró que si de ellos dependiera no aumentarían el precio porque saben que perjudican a los consumidores, pero deben trasladar al público las alzas que han sufrido en el último año, particularmente en luz eléctrica, gas y gasolina.
Intensa vigilancia en Hermosillo
En Hermosillo, Sonora, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) inició un intenso operativo para vigilar más de 800 tortillerías del estado, y detectaron que en algunos lugares el incremento en el kilogramo alcanzó los 5.50 pesos y hubo otros que entregaban kilos ''chiquitos'', menos del kilogramo. Jesús Susarrey, delegado de la Profeco, informó que fueron sancionados siete negocios.
La misma queja de incremento en el precio del producto se repitió en Coatzacoalcos, Veracruz, donde la Profeco denunció que los industriales de la masa y tortilla vendieron el producto entre 5 y 5.50 pesos el kilogramo, además de que hubo expendios donde no venden kilos completos. Por estas razones se clausuraron siete negocios aunque se detectaron irregularidades en 40.
En Aguascalientes, Aguascalientes, la Profeco inmovilizó 15 máquinas tortilladoras porque los comerciantes vendieron en kilo del producto en 4.50 pesos, cuando el acuerdo entre productores y autoridades federales y estatales era venderlo en 3.50 y 4 pesos, dependiendo del costo de los insumos.
En Ciudad Juárez, Chihuahua, el precio de la tortilla es de 5.50 pesos por kilo desde el lunes pasado, informó el presidente de la Alianza de Molinos, Ismael Rubio Nájera.
El directivo de la asociación que aglutina a 280 tortillerías de esta ciudad, dijo que los precios del alimento ya no están controlados y cuando se da un incremento a nivel nacional, repercute de inmediato en esta frontera.
En Durango, a menos de 24 horas de haberse anunciado incrementos de hasta 25 por ciento en el precio de la tortilla, el dirigente estatal de los Industriales de la Masa y la Tortilla, Eduardo Hernández, dio marcha atrás a su anuncio al explicar que se revisará el ajuste.
La delegación de la Profeco en Mérida informó hoy que obtuvo reportes de que varios molinos de esta capital expendieron el kilogramo de tortillas a 5 y 5.50 pesos, aprovechando la confusión entre los consumidores. Sin embargo, advirtió que los propietarios de esos negocios serán sancionados.
En caso de que los dueños de los molinos mantengan su iniciativa de incrementar el precio, entonces la Procuraduría Federal del Consumidor clausurará los establecimientos.
A pesar de la advertencia de la Secofi a los productores de tortillas en los municipios de la frontera tamaulipeca el básico se vende al público hasta en 5.50 pesos, en el centro y sur de la entidad se mantiene a 4.50 pesos el kilo.
José Enrique Yáñez Reyes, presidente de la Federación de Industriales de la Masa y la Tortilla, dijo que en las mil tortillerías de Tamaulipas se mantienen los precios porque Secofi liberó el precio del producto desde el año anterior aunque los microempresarios no estuvieron de acuerdo.
El representante estableció que el aumento al kilogramo de tortillas se dio en relación al incremento que sufrieron los insumos como el gas, la gasolina, los servicios de luz y agua y el precio de la harina. (David Carrizales, Cristóbal García, Jesús Lastra, Claudio Bañuelos, Rubén Villalpando, Emmanuel Salazar, Javier Valdéz Cárdenas. Luis A. Boffil. Martín Sánchez Treviño, corresponsales)