Ť Suministrará el grano por un mínimo de cien días, anuncia el secretario de Desarrollo Económico
El GDF proveerá de maíz a tortillerías para impedir alza
Ť El incremento, artificial e injusto, pues hay sobreoferta del cereal, manifiesta; los costos permiten mantener el precio, asegura
Laura Gómez Flores Ť Ante el incremento "artificial" e "injusto" del precio de la tortilla, el Gobierno del Distrito Federal pondrá en marcha su reserva estratégica de maíz sin subsidios para asegurar la permanencia de 630 molinos de nixtamal y 10 mil tortillerías, por un mínimo de cien días, "sin representar una actitud intervencionista o estatista", informó el secretario de Desarrollo Económico, Francisco Cano Escalante.
Precisó que, sin sustituir las funciones de Conasupo, cuya desaparición representa un "error" de la administración federal al quitar garantías de abasto a la población y abandonar a su suerte a los productores, se busca evitar un alza ficticia, "innecesaria e injusta", cuando hay una sobreoferta de maíz y las compañías trasnacionales tratan de adueñarse del mercado.
En conferencia de prensa, explicó que los costos de los tortilleros les permiten ofrecer a 3.20 pesos el kilogramo, con un margen de utilidad razonable, por lo que el precio de este básico debe continuar en 3.50 pesos, a riesgo de generar un grave malestar social.
Sin embargo, anunció que el gobierno capitalino canalizará unos 50 millones de pesos para mantener un mínimo de 45 mil toneladas de maíz al mes, a mil 700 pesos la tonelada, para no abandonar la garantía de abasto a la ciudad, lo cual, aclaró, "no significa un gasto o una inversión".
Precisó que la única intención es evitar intentos especulativos, como los que se dieron en los periódicos, pues "la tortilla no puede subir, porque hay costos más bajos e incluso podría reducir el precio del maíz un poco más y pudiéramos pedir a los nixtamaleros que bajarán un poco el precio del kilo de este producto y no dejar que las trasnacionales se adueñen de este mercado".
Actualmente, abundó, el maíz nacional cuesta el doble del precio de la competencia internacional, "problema de orden político que aflorará en las próximas semanas en el altiplano mexicano, cuyos campesinos, que viven del autoconsumo, no van a tener a quien venderle, porque Conasupo cerró sus locales y la intención es adquirir esos sobrantes, principalmente, en Tlaxcala, Puebla y estado de México".
En estos momentos, agregó, el gobierno capitalino está en tratos para adquirir los excedentes de estos productores a razón de mil 700 pesos por tonelada, 900 pesos más que el valor de una tonelada en el mercado de granos de Chicago, por lo que ese sería el precio máximo al que se ofrecería el producto a los molineros.
De acuerdo con las estimaciones de producción de maíz, se cuenta con una sobreoferta de 200 mil toneladas, suficientes para abastecer el mercado local por 100 días, dado que el consumo diario es de 2 mil toneladas, sin "caer en la trampa de subir los precios y sí para cortar esas puntas al alza", señaló.
Mencionó que a cada uno de los consumidores, que se atenderán con base en el padrón que tenía Conasupo y contarán con los mismos sistemas de pago anticipado en los bancos, se les pedirá que mantengan el precio del kilogramo de tortilla y lleven a cabo un manejo transparente del producto.
Recalcó que la situación actual se debe a dos errores del gobierno federal: uno, abandonar la garantía de compra a campesinos mexicanos, luego de decretar la desaparición de Conasupo ųque si bien era un centro de corrupción, ayudaba a la comercialización de los productos de campoų; y dos, abandonar la garantía de abasto de la ciudadanía.