Ť Ofrece un sistema vigoroso al terminar el sexenio
Favoreció a trabajadores la apertura de puertos: Zedillo
Ť Se equivocaron quienes auguraban desempleo, dice el Ejecutivo
Rosa Elvira Vargas, enviada, Progreso, Yuc., 14 de enero Ť Llegaremos al fin de este sexenio con un sistema portuario moderno, eficiente, vigoroso y competitivo en calidad y precios dentro de los estándares internacionales, para apoyar la participación de México en las corrientes mundiales de comercio y turismo, aseguró el presidente Ernesto Zedillo.
Dijo que cinco años después de modificar las relaciones laborales que regían la operación de los puertos del país, queda claro que se equivocaron quienes auguraban que la medida conduciría al desempleo.
Enfático, señaló que privatizar, modernizar, poner los puertos mexicanos a la altura de los mejores del mundo no ha sido una decisión contra los trabajadores. Todo lo contrario, gracias a esto gozan de mejores condiciones, mayor seguridad en el empleo y "están satisfechos de trabajar en puertos modernos''.
El mandatario apuntó que en pocos años, México ha podido transitar de un sistema portuario atrasado e insuficiente a otro que ya se reconoce por su eficiencia y calidad. Esto lo demuestra, dijo, el crecimiento promedio de 6 por ciento en el volumen de mercancías manejado en los puertos mexicanos entre 1995 y 1999; además, la movilización de contenedores ha aumentado 18 por ciento durante el mismo periodo.
En ese lapso se ha logrado duplicar la capacidad instalada disponible, y el número de empleos directos ha aumentado 50 por ciento. Informó que la inversión crecerá 35 por ciento en términos reales para este año, misma que servirá para el mejoramiento de escolleras, la profundización de canales para la navegación, la ampliación de patios y áreas de maniobras y la construcción de muelles de carga.
Asimismo, indicó que en este sexenio, Comunicaciones y Transportes ha destinado a la materia portuaria mil 200 millones de pesos; las empresas industriales han invertido más de 10 mil 500 millones de pesos en la ampliación y construcción de nuevas plantas y que las más de 900 empresas que operan los puertos, y sus administradoras, han destinado a la infraestructura más de 6 mil 500 millones de pesos.
Y es que el mandatario, al llegar a Puerto Progreso, tenía muchas razones para ponderar las transformaciones de la infraestructura portuaria.
Aquí se realiza la obra sexenal más importante en ese sector, en la que sólo la inversión federal participa con 880 millones de pesos.
Convencido de que este puerto tiene una posición estratégicamente privilegiada no sólo para impulsar económicamente a Yucatán, sino para apuntalar la actividad comercial de México a escala internacional, Zedillo recorrió y recibió hoy los detalles de los trabajos incesantes para construir un rompeolas de mil 218 metros de longitud; 929 metros de bordos para contener el material que se extrae del fondo marítimo; del dragado del canal de navegación de 12 metros de profundidad para igualarlo al que tiene el puerto de Veracruz, el más importante del país; construcción de muelles para cruceros turísticos, así como la habilitación de 23.5 hectáreas para patios de almacenamiento y maniobras.
Las obras marchan, dijo el jefe del Ejecutivo, conforme a lo programado, y al concluirlas se podrá incrementar aún más el manejo de contenedores (que durante el año pasado creció 50 por ciento) y el de graneles agrícolas. Además de modernizar las terminales turísticas, Progreso podrá recibir simultáneamente hasta tres cruceros de los conocidos como de "última generación'', que son aquellos con capacidad de transportar hasta 4 mil 200 pasajeros, y son similares a los que hoy atracan en Cozumel y Punta Venado, en Quintana Roo.
El titular de Comunicaciones y Transportes dio a conocer el programa portuario para este año, el cual incluye profundizar la transformación estructural de ese sector, con el incremento de la participación privada.
De ese modo, las acciones para el 2000 incluyen ampliar y profundizar los canales y dársenas en los puertos de Altamira, Manzanillo y Lázaro Cárdenas; prolongación o fosamiento de las escolleras en Altamira, Coatzacoalcos, Tuxpan, Veracruz, Tampico y Mazatlán; la construcción de muelles en Manzanillo, Ensenada y Coatzacoalcos; el inicio de las obras para el puerto comercial de Dos Bocas y la edificación de las instalaciones para las aduanas marítimas en Manzanillo y Veracruz.
El éxito del país depende del triunfo en la educación
Antes de dejar Progreso, el mandatario inauguró también una pista internacional de remo y canotaje; y en Choholá puso en marcha el tramo carretero Poxila-Maxcanú, donde, por cierto, el alcalde, José Arturo Gómez Romero, cubrió de elogios tanto al presidente Zedillo como al gobernador Víctor Cervera Pacheco, al agradecer las obras que se realizan para beneficio de su comunidad.
Por último, ya en Mérida, el Presidente inauguró el complejo educativo 2001, donde felicitó "el trabajo comprometido y pleno de realizaciones'' del gobernador Cervera. Indicó también que en todo México ya van siendo muy pocos los sitios donde la falta de escuelas es una causa de que no se pueda estudiar. Aprovechó la ocasión para, de nuevo, llamar a la práctica cotidiana y permanente de la lectura.
En esta gira, el presidente Zedillo estuvo acompañado por su hijo Emiliano, y en la comitiva estuvo el subsecretario de Educación, Olac Fuentes Molinar.