ASTILLERO Ť Julio Hernández López
El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación va de tumbo en tumbo.
Ayer dio a conocer su decisión de no aceptar ni siquiera que la silueta de Vicente Fox fuese impresa en las boletas electorales que se utilizarán el próximo 2 de julio. Ya antes, como es sabido, se había impedido que esas papeletas llevasen la fotografía del guanajuatense.
Ante la cerrada postura de los jueces electorales federales, el PAN y el Verde Ecologista han anunciado que no recompondrán su emblema unitario (como lo exigen las autoridades) sino que, en todo caso, dejarán a los magistrados que funjan como diseñadores gráficos para que elaboren el logotipo que satisfaga a los jurisperitos.
Frente al escándalo que tal maniobra legaloide ha generado, y tomando en cuenta que el ánimo social mexicano está ávido de apoyar a quienes se enfrentan al sistema (sean o no justas las razones de ese enfrentamiento), ha reaccionado con urbanidad casi perfecta el candidato presidencial afectado.
Sin hablar ya de marranadas ni soltar su tradicional letanía de especies zoológicas de mala fama, Fox ha dado, inclusive, y con gran razón, las "gracias al sistema por el impulso que le está dando a mi candidatura".
De cualquier manera, y para demostrar que aunque se vista de seda, Fox se queda, externó su esperanza de que "el PRI siga metiendo las patas; ojalá así sea".
Nada más porque la experiencia demuestra que esas jugadas de varias bandas poco se les dan a los billaristas del equipo de Los Pinos, pero cualquier mal pensado podría creer que tales maniobras fuesen parte de un pacto secreto con el que se pretendiese asentar el bipartidismo PRI-PAN y marginar totalmente al PRD. Total, si Diego se echó para atrás en 1994 (según San Vicente Fox, en su autobiografía), para dejarle la cancha libre al doctor Zedillo, un buen gesto de reciprocidad sería darle un poco de oxígeno, ahora, al candidato rezagado que, caballeroso, ha emitido ya puntuales agradecimientos por el favor recibido.
La impecable democracia priísta
El Consejo Político Nacional del PRI dio ayer un impresionante paso adelante en la consolidación de su democracia interna: al tradicional ejercicio del palomeo de listas de candidatos le llamará ahora (como se hacía antes, pero sin tantos bombos) elección de candidatos mediante asambleas de delegados.
Es decir, las relaciones de aspirantes que van haciendo los jefes sectoriales, los gobernadores, los hombres del Presidente y los grupos de presión se aprobarán como siempre se ha hecho en estas circunstancias, es decir, entre el Presidente saliente y el candidato oficialista que presuntamente será el entrante.
Pero, a diferencia de años anteriores, el ejercicio autoritario de las postulaciones será posicionado publicitariamente como "asambleas de delegados", y se dirá que, mediante un amplísimo proceso nacional de movilización, se votarán las listas de delegados que, luego, harán lo mismo con las de candidatos.
No hay mucho qué decir: es el mismo dedo, nomás que revolcado
A propósito, el comisionado principal para conducir tal proceso de revolcamiento es el campechano Rafael Rodríguez Barrera.
Uno de los miembros del Comité Nacional priísta, justamente el responsable de las tareas electorales, dijo, al encomiar los esfuerzos hechos por sus correligionarios para presentar al mismo minino, pero luego de darle varias volteretas, que ese procedimiento, el de la asamblea de delegados, era "impecablemente democrático". Como diría el gran maestro Brozo: šOoooooraleeeee!
Declaraciones patrimoniales, nomás tantito
El avión trasatlántico que había dibujado en el aire el candidato Francisco Labastida fue convertido, a la hora del aterrizaje, en simple papalote de cuerda corta. El sinaloense había anunciado una cruzada contra la corrupción en la que todo aspirante a ganar una candidatura a diputado o senador debería presentar su declaración patrimonial y explicar los mecanismos mediante los que había hecho su fortuna.
Ayer, también en el citado consejo político, aquella propuesta (por la que don Francisco dijo estar dispuesto a enfrentar incomprensiones y resistencias varias) quedó en un enunciado suficientemente vago como para que las inercias del tricolor la conviertan en un suspiro de buenas intenciones.
Todos los candidatos, se acordó, deberán dar información patrimonial a su partido. El responsable de orientar tales tareas será el veracruzano Dionisio Pérez Jácome, cuya amplísima carrera legislativa y administrativa es garantía de que no se hará nada profundo ni comprometedor.
(Por cierto, reapareció al uso del micrófono en un acto priísta importante el senador incómodo, Fernando Ortiz Arana, quien siempre recordará este sexenio, pues en él fueron creadas las condiciones para que perdiera la gubernatura de Querétaro, y luego, cuando quiso regresar al cargo que tenía antes de irse de gira electoral, se le quitó de la presidencia de la Gran Comisión del Senado. De cualquier manera, como ya estamos en tiempos de reconciliaciones, se ha dado foro a quien, como presidente nacional del PRI, acarició la posibilidad de ser el candidato sustituto de Luis Donaldo Colosio, postulación ésta que, como es sabido, recayó en el doctor Zedillo, hombre de buena memoria política, según lo que se ha visto.)
Astillas: No hubo hoja de árbol que se estremeciera por la salida de Porfirio Muñoz Ledo del PRD. Era un desenlace que desde mucho tiempo atrás se había dado a conocer. Si acaso, lo único novedoso fue que, cuando Porfirio pretendía renunciar, en el partido del sol azteca ya le habían dado de baja en sus derechos como militante. Muñoz Ledo cruzará el largo desierto de la lucha política al frente de algo que hace mucho tiempo fue un instituto satélite, y ahora ni a eso llega. Los residuos del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana (PARM) tratarán de ser convertidos por el locuaz político disidente en una nave espacial. Deberá, por lo demás, por respeto a su historia, evitar que se haga realidad la sentencia que ayer se emitió en el PRD respecto a los indicios de que en sus nuevas tareas don Porfirio será "un peón del Estado". Por lo pronto, sus palabras hirientes contra el que era su partido han merecido una gran difusión en muchos medios, no sólo en los que hacen periodismo respetable, sino, sobre todo, en aquellos que son movidos por las manos del oficialismo... El abogado de Raúl Salinas de Gortari ha pedido que Manuel Camacho aporte pruebas de sus denuncias públicas sobre el enriquecimiento inexplicable del hermano incómodo. Al ahora candidato presidencial del Partido de Centro Democrático le seguirán por mucho tiempo los fantasmas del salinismo, por más que él trate de espantarlos a base de declaraciones e interpretaciones personales hechas, obviamente, para favorecer su figura... Ayer, mientras marchaban por el centro de la capital del país los miembros de organizaciones populares y universitarias que demandan la liberación del líder del Frente Popular Francisco Villa, la jefa del Gobierno capitalino, Rosario Robles, se manifestaba en favor del plebiscito anunciado por el rector de la UNAM, Juan Ramón de la Fuente.
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