Ť Condena "cualquier forma de provocación"


Plantea Juan Ramón de la Fuente reforma con carácter "resolutivo"

Karina Avilés Ť Al advertir que la rectoría no regresará a la mesa del diálogo con el Consejo General de Huelga (CGH) hasta que ese órgano retire su exigencia de reconocer a la Preparatoria Popular Tacuba y al CLETA como parte de la comunidad, demanda que ''transgrede el orden jurídico'' de la universidad, el rector de la UNAM, Juan Ramón de la Fuente, se manifestó por una reforma universitaria con carácter ''resolutivo'', donde las dependencias tengan mayor autonomía y se reduzca ''el excesivo'' aparato burocrático, pero sin amputar las partes que integran la institución.

Asimismo, la rectoría condenó cualquier forma de ''violencia y provocación'', en referencia a lo sucedido en el CCH-Naucalpan, donde a causa del estallido de unos explosivos dos jóvenes sufrieron lesiones de gravedad. Las diferencias entre los huelguistas de esa dependencia, estableció, han tenido en el caso Naucalpan ''una expresión que alarma a los universitarios y a la sociedad''.

de-la-fuente-rector-unam-jpg De la Fuente reconoció que las autoridades universitarias han tenido contacto con algunos paristas de dicha escuela. No obstante, dijo que la rectoría esperará a conocer la decisión de los alumnos en huelga sobre si resuelven o no entregar el plantel.

En los encuentros que sostuvo ayer con miembros de la comunidad, estudiantes en paro exigieron al rector regresar a la mesa de conversaciones en el Palacio de Minería, a lo que De la Fuente respondió que la rectoría está dispuesta a regresar siempre y cuando se respete la ''limitante'' de que las pláticas se lleven a cabo con miembros de la comunidad, pues reconocer a la prepa Tacuba y al Centro Libre de Experimentación Teatral y Artística (CLETA) significaría colocar a la universidad al margen del orden jurídico.

En reuniones con las comunidades de la Escuela Nacional de Música (ENM), la Facultad de Estudios Superiores (FES) Zaragoza, la Escuela Nacional Preparatoria (ENP) y el Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH), De la Fuente delineó los caminos de la reforma que emprenderá la universidad en el nuevo milenio.

Los cambios en la UNAM, dijo, no consideran amputar ninguna de sus partes. "El reto es descentralizar sin desarticular, dar mayor capacidad (a las dependencias) para permitir una mayor operatividad y agilidad. Y también espero reducir el excesivo aparato burocrático que ha venido creciendo con la universidad, pero manteniendo la integridad de la institución'', afirmó.

Además, señaló que la reforma tendrá que ser participativa, ''con un carácter evidentemente resolutivo" y reiteró que la transformación no considera privatizar la universidad, ''al contrario, lo que la reforma tiene que permitirnos es la creación de un nuevo modelo de universidad pública que sea capaz de responder a las exigencias de la sociedad mexicana''.

Pero el eje de la reforma es el fortalecimiento de los principios académicos, pues de lo contrario se contribuiría a que la UNAM pierda cada vez ''más prestigio, más autoridad y mayor trascendencia''.

Por último, en la reunión que efectuó por la tarde de manera conjunta con las comunidades de la ENP y el CCH, el rector despejó uno de los fantasmas que apareció en las participaciones de estas dependencias. Aclaró que de manera independiente del proceso de reforma y de lo que ocurra en la institución, "jamás" permitirá que se separe al bachillerato del resto de la UNAM. Y agregó que la ENP, el CCH y el resto de los planteles participarán en la transformación universitaria

 

Así, delineó un ''nuevo modelo de universidad orgullosamente pública, sin demagogia, sin populismo, que rescate los valores de nuestro pasado, pero que también permita proyectar con inteligencia a esa nueva institución ante los cambios vertiginosos que están ocurriendo en el país''.

Reconoce virtudes

De la Fuente reconoció que el movimiento estudiantil ha tenido, entre otras virtudes, la de exponer problemas ''que hoy nos hacen estar más concientes de la necesidad de una reforma''. Pero para llevarla a cabo es necesario ''resolver el conflicto más largo y probablemente más costoso que ha habido ya en la historia de la universidad''. En ese sentido, reiteró que los costos de la huelga han sido ''altísimos'', puesto que la universidad ha padecido ''una enorme deserción escolar'' y docente.

Por lo anterior, enfatizó que ''ya no hay mucho tiempo más que perder... ha llegado el momento de tratar de encontrar esos puntos que nos unen y en los cuales podemos estar de acuerdo y que den respuesta al pliego petitorio del CGH, pero también a las otras inquietudes'' del resto de la comunidad.