VENTANAS Ť Eduardo Galeano
Los piojos
En Panamá, escuché decir:
ųSon sucios. Tienen piojos. Son sucios.
En el archipiélago de San Blas, islas de arena blanca y arrecifes de coral, comprobé que sí pero no: los indios kunas tienen piojos, pero se bañan con tanta frecuencia y entusiasmo que entre ellos me coroné rey de los cochinos.
A la cabeza, el agua no llega. Los piojos se guardan vivos en la cabeza, para que sean arrancados por la persona amada. Según manda la tradición, quien te quiere ha de probar que te quiere salvándote del tormento de esos minúsculos demonios.