Ť Busca De la Fuente reforma universitaria que fortalezca la vida académica


Convocará rectoría a un congreso; se requiere una "solución radical"

Ť Descarta intentos de privatización; señala que se busca nuevo modelo de universidad pública

Roberto Garduño Ť Los graves problemas de la UNAM requieren de una solución radical a través de una profunda reforma universitaria, admitió el rector Juan Ramón de la Fuente, y anunció que convocará en los próximos días a la comunidad de la máxima casa de estudios a participar en un congreso democrático.

"Para llevar a cabo dicha reforma, habremos en los próximos días de convocar a la comunidad para participar en un congreso universitario, un congreso que sea precisamente un mecanismo que nos permita llevar a cabo esa reforma tan esperada como necesaria, un congreso democrático, un participativo, pero ante todo una asamblea que nos permita fortalecer la vida académica de la universidad, porque es justamente en esa fuerza donde reside fundamentalmente su poder".

A través de un mensaje a la comunidad universitaria, el rector De la Fuente aseguró que las conclusiones y resoluciones del congreso "habrán" de ser asumidas por las instancias correspondientes para que se establezcan. Además, rechazó cualquier posibilidad de privatizar la máxima casa de estudios, por el contrario anunció la intención de establecer un nuevo modelo de universidad pública.

Balance de cien reuniones

La alocución del rector incluyó una explicación sobre el contenido del centenar de reuniones que ha sostenido con distintos grupos que conforman la comunidad universitaria, para estructurar a través del consenso una propuesta institucional que resuelva el conflicto más costoso en la historia de la universidad:

"...Ha quedado muy claro que la universidad tiene problemas graves y muy serios que requieren una solución eficiente pero sobre todo radical para que pueda seguir cumpliendo con las funciones que la sociedad mexicana le ha encomendado, por ello resulta ahora oportuno señalar que como consecuencia de esos encuentros, de esas reuniones, de esos análisis, pues se hace absolutamente necesario plantear una profunda reforma universitaria.

"Una reforma que pueda atender, por un lado, problemas añejos que se habían venido quedando a lo largo de los años y que por diversas razones no habían podido solucionarse de manera eficiente, pero que atienda también una serie de problemas emergentes que se han hecho evidentes a lo largo del conflicto que se ha agudizado en los últimos meses".

La reforma, explicó el funcionario, tendrá que elaborarse únicamente por los universitarios, "sin injerencias externas", para fortalecer la autonomía, misma que los mismos integrantes de la comunidad no están dispuestos a ceder ni a negociar.

"Las conclusiones y resoluciones de ese congreso habrán de ser asumidas en su momento por las instancias correspondientes, de manera que puedan verdaderamente ser establecidas y cumplir con su propósito: la transformación de la universidad nacional de cara al nuevo siglo ".

Otro de los argumentos del rector para realizar la reforma será el fortalecimiento del carácter nacional de la máxima casa de estudios: "porque nuestra universidad es fruto de la historia de la nación mexicana... así pues, ese aspecto de nuestra universidad no está, ni estará a discusión durante el proceso de reforma".

Además, la citada reforma no contempla "la atomización de la universidad", porque, señaló De la Fuente, no se trata de reformarla, amputándole alguna de sus partes. Y si el caso lo requiriese, se rearticularían algunos de sus componentes para hacerla más eficiente para dar- les una mayor autonomía que les permita resolver sus problemas cotidianos con mayor agilidad.

La reforma busca un equilibrio

"La UNAM no va a privatizarse. Por el contrario, esperamos que de la reforma pueda surgir el nuevo modelo de universidad pública que México habrá de requerir en los próximos años para poder seguir, de manera equilibrada, con su desarrollo social en todo el territorio nacional.

"Tendremos, pues, una reforma radical en muchos aspectos de la vida universitaria, tendientes a fortalecer su esencia fundamental que es lo académico, un cambio que permita fortalecer su autonomía, su carácter nacional y también su carácter público.

Aquí vendrá la nueva contribución que hará la Universidad Nacional Autónoma de México en el terreno de la educación superior del país, construyendo este nuevo modelo de universidad pública, más académica, más democrática, más participativa, y que esté a la altura de las condiciones de la sociedad".

La propuesta de la autoridad universitaria, adujo el rector, forma parte de la agenda de la máxima casa de estudios para el presente año:

"Yo confío plenamente en los estudiantes, tengo esperanzas en su capacidad de análisis, en sus actitud crítica y autocrítica, confío en su capacidad de construir consensos y encontrar puntos de convergencia dentro de la pluralidad que la caracteriza y enriquece".