* Preocupa la debilidad del sistema bancario
Temen analistas crisis por el cambio de gobierno en el 2000
* Pese a los signos positivos, hay una preocupación justificada
Reuters * La Bolsa en máximos históricos, un crecimiento mayor de lo esperado en las exportaciones y ausencia de sobresaltos en el camino hacia las elecciones presidenciales del 2000, son las noticias en México.
Pero a pesar de eso y de los esfuerzos por asegurar un cambio de gobierno sin problemas en los comicios del próximo año hay quienes afirman que el futuro inmediato para ese país podría no ser tan bueno.
En México, la historia se inclina hacia los malos augurios. "La preocupación es justificable", dijo Rogelio Ramírez de la O, presidente de la firma de asesoría Ecanal en México. "Todavía no conocemos un gobierno que esté dispuesto a salvaguardar la economía aún perdiendo una elección".
Más que cualquier mandatario en la historia moderna del país, el presidente Ernesto Zedillo se ha comprometido a probar que quienes dudan están equivocados.
Además, México ha desarrollado un sector exportador robusto y en expansión, ha reducido la inflación y tiene un monto manejable de 2 mil 500 millones de dólares en pagos de deuda pública externa que vencen el año próximo frente a los 20 mil millones de 1994.
Cuando Zedillo asumió el cargo en diciembre de 1994 no encontró reservas suficientes para cubrir los pagos de deuda a corto plazo, lo que condujo a una desastrosa devaluación del peso y a la peor recesión desde la década de los años 30.
Como reflejo del actual entorno positivo, el mercado accionario mexicano cerró el viernes en un máximo histórico por tercera jornada consecutiva en reacción a la divulgación de cifras positivas de la economía.
El índice ha subido más de 16 por ciento desde el 7 de noviembre, cuando el gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI) realizó unas elecciones primarias para elegir a su candidato presidencial.
Pero abajo de la superficie política y económica hay algunos puntos de inquietud, dicen economistas y analistas.
El principal de ellos es el sistema bancario que fue arrasado por la devaluación del peso y la subsecuente crisis, lo que obligó al gobierno a llevar a cabo un rescate cuyo costo se calcula ahora en unos 100 mil millones de dólares.
"Son severas las implicaciones fiscales y macroeconómicas de un sistema bancario mexicano extremadamente débil", dijo la agencia Standard & Poor's (S&P) el mes pasado en un reporte.
S&P calculó que el costo del rescate bancario llevará el endeudamiento bruto del sector público a casi 50 por ciento del producto interno bruto (PIB) de este año.
Pero pese a la falta de financiamiento bancario, el PIB de México creció 4.6 por ciento en el tercer trimestre de 1999, impulsado por las exportaciones que absorbió una economía estadunidense en auge.
Sin embargo, el feliz matrimonio entre los socios del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) podría empezar a tener problemas si el crecimiento estadunidense se desacelera y afecta al principal motor económico de México.
"Un aterrizaje difícil en EU ciertamente provocaría dificultades en México en un año electoral, dado el efecto extensivo que potencialmente tendría sobre la banca, que como dicen, es el Talón de Aquíles", dijo Neil Dougall, economista en jefe para América Latina de Dresdner Kleinwort Benson.
Incluso si Labastida gana la Presidencia en lo que serán las elecciones más reñidas en la historia de México, podría haber empantanamiento político si el PRI fracasa en retomar el control de la cámara baja del Congreso que perdió en 1997.
"La transición hacia un sistema político más maduro entraña riesgos a corto y mediano plazos, incluyendo riesgos para la política económica", dijo S&P.
Ian Laming, estratega latinoamericano en Morgan Stanley Dean Witter, dice que ahora el mercado bursátil de México está totalmente valuado, pero que podría subir otro 25 por ciento en términos de dólares antes de que los inversionistas más sanguinarios empiecen a ponerse nerviosos por las elecciones y la transición de gobierno.
"Vas a poner el dedo en el gatillo en el segundo trimestre del próximo año", dijo Laming. "Debe pensarse muy bien en tomar utilidades", agregó. Mientras tanto, los jugadores deben permanecer en México y disfrutar el viaje, afirmó.