* Otra provocación de los priístas: autoridades


Rechazan nuevo retén policiaco en comunidades zapatistas

* Desmienten supuestos robos de ganado en Ocosingo

Juan Balboa, corresponsal, San Cristóbal de las Casas, Chis., 8 de diciembre * Las autoridades del municipio autónomo zapatista Ricardo Flores Magón rechazaron la instalación de un nuevo retén de la Policía de Seguridad Pública del estado en la comunidades habitadas por simpatizantes del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN).

Acusaron a militantes del Partido Revolucionario Institucional de "inventar supuestos robos" en el ejido Nuevo Morelia, en el municipio de Ocosingo, para pedir la intervención de la policía estatal, "esto es otra provocación de los priístas que tratan que la policía pongan nuevos retenes en nuestros pueblos", dijeron.

Los representantes del municipio autónomo niegan que miembros del Ejército Zapatista de Liberación Nacional hayan "robado el ganado" de los priístas y aseguran que ellos mismos han llevado el ganado a pastar a tierras de simpatizantes zapatistas para después acusarlos.

Insistieron en que no permitirá que sean instalados más retenes policiacos, pues éstos, indican, sólo llegan a apoyar a los priístas y a hostigar a los zapatistas.

Confirmaron que un nuevo campamento del Ejército Mexicano fue instalado cerca de la desembocadura del río Chajul, en la frontera con Guatemala, sin el consentimiento de los pobladores del ejido Loma Bonita, en el municipio de Ocosingo.

Las autoridades del ejido Loma Bonita solicitaron a la Comisión Nacional de Derechos Humanos medidas cautelares porque, aseguran, los militares violan sus derechos constitucionales. El secretario del Comité Particular Ejecutivo Agrario del ejido Loma Bonita, Eduardo Aguilar López, y el agente municipal, José Alfredo Aguilar Morales, pidieron a la CNDH que "con base en el artículo 40 de la Ley de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, el 112 y demás relativos al reglamento interno de dicha comisión" intervenga para que el Ejército federal desocupe terrenos del ejido Loma Bonita.

Hacen referencia a una serie de denuncias de poblados cercanos en contra de los soldados y señalan que quieren que sus hijos "alejen la imagen de la guerra en sus juegos, o evitar que presencien escenas de prostitución". Aseguran que la intervención de la CNDH es básica para que los militares desalojen las tierras del ejido Loma Bonita. El nuevo campamento se suma a los 257 asentamientos militares y policiacos que existen en unos 63 municipios del estado ųmás de la mitad del territorio chiapanecoų y es el número 38 de los puntos castrenses que existen en el municipio de Ocosingo, el territorio municipal más militarizado de Chiapas.