Alberto Aziz Nassif
Miserias

Somos una nación decadente. Somos una nación de elites, de dinastías, de pequeñas monarquías pervertidas. De mandarines, de "sabios" monosabios. De líderes decadentes y oportunistas. Somos una nación de elíxires negros, de aguas corruptas, en medio de ese bello y ancho país de colores, de amores, de pueblos y de historia, en el que hemos venido perdiendo el ánimo. "Somos una nación de esperanzas a punto de perderse". Así dice uno de los aforismos del último libro de Enrique Márquez, La miseria política de nuestro tiempo, que acaba de publicar Océano. Esta miseria puede ser ahora un nuevo lente para mirar la vida pública y la política mexicana de este fin de siglo.

Cualquier vista rápida del periódico, del día que sea, puede estar en la sintonía de la miseria. Tomo el jueves 25 de noviembre para hacer un seguimiento y en un solo repaso me encontré lo siguiente en La Jornada: una grave violación de los derechos humanos; nuestra supuesta democracia, que ahora se le califica como "incipiente", tiene problemas en la administración y procuración de la justicia, una impunidad alarmante, grupos paramilitares, exclusión y una sistemática violación de los derechos humanos. Un sistema político cuyo problema más grave es la violación de los derechos elementales de su población, habla de un país que se encuentra muy lejos de una democracia mínima. Este fue el panorama que se encontró Mary Robinson (titular del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos) en su reciente visita al país.

Más adelante estaba la perla del secretario de Hacienda, Gurría, con una pensión de retiro de 83 mil 413 pesos al mes, nada más y nada menos. Esta cantidad que se hizo de una sumatoria de años servicio en Nacional Financiera y en otras dependencias, se dice que es legal. El caso Gurría es el emblema de que lo legal de este sistema no es para nada lo legítimo. Con nuestros impuestos estamos pagando estas millonarias pensiones de jubilación que se dan dentro del sector financiero del gobierno. ƑEn qué país es posible que los rangos de una jubilación puedan variar desde menos 1,500 pesos, hasta 85 mil pesos, es decir, 56 veces? Pero, para que no caiga el optimismo, al dar la vuelta a la página del diario apareció otro caso, un daño patrimonial de $163 mil millones de pesos en Conasupo. Se trata de un fraude masivo que se hizo en un periodo que fue de 1982 a 1994. ƑQuién va a responder por este daño a la nación? ƑCómo es posible que este desfalco haya pasado por la revisión de cuentas y presupuestos de varios gobiernos? Además de la impunidad que ha rodeado al caso, nos enfrentamos a un sistema en el que la rendición de cuentas es sólo un ritual hueco; no es que no se cumplan las reglas, más bien están mal diseñadas. En el recorrido dimos también con los estragos que ha generado el actual modelo económico. Dos investigadores, Boltvinik y Hernández, establecen un índice para medir la pobreza en el país, el cual eleva de forma terrible la masa de pobres que maneja la versión oficial.

Las miserias son múltiples: violación de derechos humanos, impunidad, manejos presupuestales para que las elites se jubilen como príncipes, corrupción en las empresas públicas y una pobreza que crece y se desparrama. Para completar el cuadro, la semana pasado pudimos presenciar la farsa del PRI, en la que el presidente Zedillo finalizó el operativo "cicatrizar" las heridas entre Labastida y Madrazo; operación que se hizo desde Los Pinos, con lo que la residencia oficial del gobierno se convirtió en el anexo del partido. Ya se olvidó la sana distancia presidencial. También en el olvido quedaron "Paquito", "Pinocho", "El doble cara" y "El fracasado".

Para rematar, la operación restauración sigue su ruta con éxito. En unas cuantas semanas cambió la correlación de fuerzas, y lo que era una oportunidad histórica para regenerar las miserias, la posibilidad de una alianza opositora, terminó en un fracaso y 60 por ciento de los ciudadanos que apoyaban ese camino se quedaron vestidos y frustrados. Luego el PRI hizo su operativo interno y logró una posición delantera para el año 2000. Según la última encuesta del diario Reforma (29/XI/1999), la intención del voto es: Labastida tiene 43 por ciento, Fox sigue estacionado con 27 por ciento y Cárdenas apenas alcanza 8 por ciento. Así quedaron las jugadas.

Al final, sólo podemos citar otro aforismo de Márquez: "Y parece no haber cura que nos salve".