Ť Hay cientos de muertos por los bombardeos, acusa jefe militar checheno


Masivos ataques del ejército ruso contra Grozny y ciudades vecinas

Ť Amnistía para independentistas que no hayan cometido crímenes graves, propone Boris Yeltsin

Afp, Ap, Dpa y Reuters, Grozny, 26 de noviembre Ť El ejército ruso lanzó este viernes masivos ataques aéreos contra Grozny, la capital de Chechenia, y sobre las ciudades vecinas de Urus Martan y Argun, lo que causó cientos de muertos, informó el jefe del estado mayor checheno, Mumadi Saidajev.

El vicejefe del estado mayor ruso, Valeri Manilov, aseveró hoy que la guerra no se prolongará mucho, pues ya comenzó la "tercera fase" de las operaciones "antiterroristas", aunque no dio fecha para el cese de las hostilidades.

El presidente ruso, Boris Yeltsin, quien se encuentra en su casa de campo recuperándose de una bronquitis complicada con una infección viral, propuso hoy un proyecto de ley de amnistía para combatientes independentistas chechenos "que no hayan cometido crímenes gravísimos".

Pero analistas consideraron que ante la nueva enfermedad del mandatario, todas las decisiones referentes a Chechenia han recaído en el primer ministro Vladimir Putin y en el Ministerio de Defensa.

Saidajev aseveró que incontables destrozos y cientos de muertos son la consecuencia de lo que llamó "feroces" ataques durante las últimas 24 horas que las tropas rusas han lanzado contra Grozny y las ciudades vecinas de Urus Martan y Argun, consideradas clave para una eventual incursión a la capital chechena.

Militares rusos en la zona indicaron que los últimos bombardeos permitirán que sus tropas alcancen el área de Staropromyslovsky, en las afueras de Grozny.

El Kremlin, sin embargo, se ha manifestado ambiguamente en cuanto a sus intenciones de asaltar Grozny, y fuentes castrenses han hablado de "negociar su ingreso a la capital", mientras que el pasado jueves Putin dijo que la toma de la ciudad "dependerá de cómo se desarrolle la situación".

Según Saidajev, ataques aéreos y de artillería causaron cientos de civiles muertos en las tres ciudades, y mencionó que entre los destrozos destaca un hospital que fue totalmente destruido.

Manilov, de su lado, aseguró que concluirá este año "la tercera etapa de la operación antiterrorista, cuyo objetivo es completar la destrucción de grupos de bandidos y sus bases en las áreas montañosas de la república chechena".

Afirmó que esta nueva fase concluirá este año, aunque declinó aventurar una fecha para el fin total de las operaciones, e indicó que aparte de mantener un cerco en torno a la capital, las tropas rusas han conquistado la mayor parte de las llanuras en el centro y norte de Chechenia sin haber encontrado mucha resistencia.

El líder de la vecina república de Ingushetia, Ruslan Aushev, criticó la campaña militar rusa, a la que comparó con "tratar de cascar una nuez a martillazos".

Otras autoridades de esa república dijeron que se está tratando de encontrar y encarcelar a militares rusos ebrios que ingresaron la noche del jueves en un carro de combate al territorio, y en una aldea, quienes dispararon contra un quiosco, mataron a una vendedora de 22 años e hirieron de gravedad a otras personas.

En tanto, Yeltsin presentó hoy a su gobierno un proyecto de ley para amnistiar a combatientes islámicos chechenos que no hayan "cometido crímenes demasiado graves", aunque la más reciente enfermedad del mandatario fue material para que los medios especularan sobre un complot en el que se trataría de forzar la renuncia del gobernante para adelantar las elecciones presidenciales y así asegurar la victoria en los comicios de Putin, quien goza de niveles de popularidad sin precedentes gracias a la operación en Chechenia.

Voceros de Yeltsin dijeron hoy que el estado de salud del presidente es "satisfactorio", pese a que sufre de una "traqueobronquitis" viral que le provoca "un poco de fiebre, tos y ronquera".