* El tabasqueño regresa al edén: Medina Plascencia


Una farsa, la reconciliación entre

Labastida y Madrazo: PAN y PRD

Andrea Becerril, David Aponte y Manuel Carrillo y David Carrizales, corresponsales * Legisladores del PRD y del PAN calificaron de "una farsa" la reconciliación entre el candidato del PRI a la Presidencia, Francisco Labastida Ochoa, y quien fuera su principal contrincante y detractor, Roberto Madrazo Pintado. En tanto, senadores priístas consideraron normal la reunificación de fuerzas tras un proceso electoral interno.

"La oposición confía en que el pueblo no se deje engañar con esta llamada operación cicatriz, que no es más que simulación de los priístas para mantenerse en el poder", comentó el coordinador de los senadores del PRD, Héctor Sánchez.

"Madrazo regresa al edén de Tabasco para vivir el año de Hidalgo", comentó a su vez el coordinador de la bancada panista en la Cámara de Diputados, Carlos Medina Plascencia. "ƑCómo es posible que si durante la precampaña priísta se le atacó por haber utilizado recursos públicos de los tabasqueños, ahora regrese nuevamente a hacer de las suyas?".

Entrevistado en Guanajuato, el panista agregó que no le cabe duda que el PRI "sigue actuando con cinismo y con la desfachatez de siempre.".

En Monterrey, en tanto, los diputados del tricolor Jaime Rodríguez Calderón y César Lucio Coronado revelaron que antes de que Madrazo acudiera a Los Pinos -un día antes- para reunirse con Labastida, el tabasqueño comentó a los 82 operadores de su campaña el encuentro, y "todos estuvieron de acuerdo en que era por el bien del PRI para evitar fracturas o deserciones" que impidieran al Revolucionario Institucional enfrentar a una oposición fortalecida.

Los legisladores neoleoneses revelaron que la reunión se efectuó en la casa que Madrazo tiene en la ciudad de México, durante una comida en la que les dirigió "un hermoso discurso conciliatorio", en el que les hizo ver que el proceso interno ya pasó y que ahora hay que luchar unidos para enfrentar a la oposición, pues de lo contrario podrían perder las elecciones federales del 2000.

Rodríguez Calderón consideró que "hay un acuerdo entre Labastida y Madrazo para hacer ganar al PRI. Sin embargo, sostuvo que no se trató de una negociación a cambio de posiciones políticas para los madracistas, y que ellos van a participar "como una corriente para obtener los espacios dentro del partido, desde regidurías hasta las posiciones más elevadas".

Sobre el tema, el senador perredista Héctor Sánchez dijo que el rencuentro Labastida-Madrazo, lo único que constata es que el gran elector en el PRI sigue siendo el presidente de la República. "El supuesto enfrentamiento sólo fue una farsa para pretender engañar a la población de que se estaba en una contienda real".

Medina Plascencia, en tanto, resaltó que lo criticable no es que se hayan reunido Labastida y Madrazo, sino que a través de una componenda al interior del PRI, Madrazo regrese a Tabasco.

El senador del PRI, Eduardo Andrade, respondió, por separado, que desde el principio la oposición trató de descalificar el proceso interno que su partido realizó para la elección del candidato presidencial del 2000 y no es raro que lo haga ahora, luego del éxito logrado.

Rechazó que el regreso de Madrazo a gobernar Tabasco signifique impunidad. "La gubernatura no es un refugio, es el desempeño para un cargo constitucional".

Andrade no estuvo tampoco de acuerdo con las críticas de panistas y perredistas en el sentido de que los contrincantes se disciplinaron hasta que intervino el ejecutivo federal. "No es un símbolo muy importante que el Presidente de la República intervenga en un proceso que corrobora la unidad del partido".