Ť Charla con el poeta español y premio Cervantes 1998
Espera Hierro que las personas sean más libres en el nuevo milenio
Ť Su próximo libro le tomará varios años escribirlo y abordará NY y la poesía de García Lorca
Ť ''El pensamiento de Paz es muy importante para mí y jamás olvidaré la última vez que lo vi''
Armando G. Tejeda, corresponsal, Madrid Ť El poeta José Hierro (Madrid, 1922) nació cuando España consolidaba un sistema republicano que años más tarde sería subvertido por los militares franquistas. Hierro, premio Cervantes 1998, lleva a cuestas su propia historia de este siglo: de las catacumbas del franquismo, en donde estuvo cuatro años inventando sonetos, al trabajo en fundición de metales para alimentar a la familia.
En 1937 escribió sus primeros poemas, Romancero de la guerra de España, que muestran desde su juventud utópica una fluidez de belleza literaria y una honda y natural imitación de los poetas de la generación del 27 (Rafael Alberti, recién fallecido; Federico García Lorca y Vicente Aleixandre, fundamentalmente).
Su creación poética ha sido paralela con sus incursiones en el dibujo y la pintura, así como su compromiso político. Víctima de la censura franquista, fue miembro fundador de la Unión de Escritores Revolucionarios a finales de los años treinta, cuando estaba en ebullición el encono entre fascistas y republicanos; como periodista escribió en la época más dura del régimen de Franco en una revista de la Cámara de Comercio. Estas actividades las compaginó con tertulias poéticas, que eran clausuradas por los militares censores. Hoy es un jubilado de la Radio Nacional de España y experimentador humildísimo, pues siempre que gana un premio piensa ''que en realidad le he quitado ese honor a alguien que escribe mucho mejor que yo". En entrevista con La Jornada, Hierro dice: ''El poeta al comenzar un poema no sabe su desarrollo o su fin. No se sabe el poema, descubrirá lo que quería decir cuando lo haya terminado". Asimismo, espera que ''en el próximo milenio las personas sean más libres y en ese sentido soy optimista''.
Solidaridad con los derrotados
Hierro escribe una ''poesía solidaria con los derrotados". Esos personajes que fluyen sin cesar en el café La Moderna, típico sitio madrileño inundado de ruido, humo y de implacable rutina.
Sostiene que su obra se resume en seis libros: Tierra sin nosotros (1947), Quinta del 42 (1953), Cuánto sé de mí (1957), Libro de las alucinaciones (1964), Agenda (1991) y Cuaderno de Nueva York (1998).
También recibió los premios Nacional de Literatura (1953), el Príncipe de Asturias de las Letras (1981) y el Reina Sofía de Poesía de Iberoamérica (1995) y el más reciente, el Nacional de Poesía, por Cuaderno de Nueva York.
''Pasarán varios años hasta que termine otro libro'', señala Hierro. Se trata de uno que trae en la cabeza que hablará de nuevo de Nueva York y retomará el canto libertario de la poesía de García Lorca, su guía en la ciudad de los rascacielos.
José Hierro recordó la última vez que visitó al Nobel mexicano, Octavio Paz. ''Fue un mes antes de su muerte, en marzo del año pasado. No pronunció una sola palabra durante el tiempo que estuve en su casa. Cuando lo vi llegar, en una silla de ruedas empujada por Marie Jo, le di un abrazo. Entonces grito ųun grito de enorme dolor, como de un animal heridoų, pues le dolía todo el cuerpo. Ese grito nunca lo voy a olvidar". El pensamiento de Paz, dice, ''es muy importante para mí''.
Y recuerda: ''Escribí algunos poemas al comenzar la guerra por el contagio épico-lírico; cantando al ejército republicano y al sitio de Madrid. Dos o tres se publicaron en periódicos. Por fortuna en aquellos años yo firmaba por pudor 'José H. Real' (que es mi segundo apellido). Y así era no por cautela, sino por una especie de vergüenza. Luego me vino bien, pues hubiese sido tremendo que apareciera mi nombre bajo esos poemas con un poco de arenga al estar las fuerzas de Franco en Santander''.
ųƑEn su obra influyeron los maestros de la generación del 27?
ųLa poesía en español parte de un mismo tronco, que es Rubén Darío, y de Juan Ramón Jiménez sale un grupo que es el 27 y la nueva poesía de América.
''Antonio Machado y Miguel de Unamuno influyen muy tarde. Machado poco antes de la guerra del 36, con un nuevo neoclasicismo y Unamuno llega en la posguerra.''
Inentendible mundo cibernético
ųƑCómo vivió la cárcel?
ųMe metieron preso por estar en una organización semejante a Socorro Rojo Internacional; varios chavales ayudábamos a los presos y a sus familias en Santander. Las fuerzas franquistas investigaron, requisaron las listas y nos aprehendieron.
''Una ocasión entraron a la cárcel obras de Dostoievski y de Gabriel Miró. Pero un día pasó un cura miserable, vio aquellos libros y los requisó porque no estaban autorizados. Los libros desaparecieron. En la cárcel seguía descubriendo la vida, eso era lo que importaba.''
ųEn su discurso del Premio Cervantes, habló del Quijote desde tres puntos de vista.
ųEl porqué del Quijote ya es un milagro, es una forma fabulada. Decía Azorín que el Quijote no lo escribió Cervantes, sino la posteridad.
''Unamuno decía que era el Quijote quien dicta las palabras a Cervantes; quizá contra los cervantistas, pues era de los quijotistas. Era de los que se meten en los discursos muchas veces irónicos que tomaban como gran prosa española. De ahí viene esa conclusión ųabsurda, claroų de que Cervantes no lo escribió sino que lo inventó. Lo importante es que el Quijote vive en el acarreo de generaciones que acaba en lo que yo llamo 'el país de los mitos', que es donde mejor me encuentro."
ųEn ese país de los mitos, sin embargo, el poeta no sabe cómo acabará su poema.
ųEl poema nace de una emoción, de una intensidad. Pero no sabe entonces de qué va a constar. A veces veo un tipo de poesía, como la del siglo XVIII, que es una en la que ya se saben el poema antes de escribirlo.
''Me gusta que el poema vaya delante de ti. El perro del lazarillo guía al ciego, pero éste tendría que adiestrarlo primero. Así, el poema te lleva a donde no sabías que querías ir, como el perro al lazarillo.
''He hecho poesía en prosa, que es un género distinto a la llamada prosa poética, que nunca he sabido qué es. Esta me parece una prosa adornada. La diferencia entre un poema en prosa y un poema en verso libre es la misma que hay entre una papa y una rosa.''
ųƑUsted escribe para denunciar injusticias sociales?
ųCuando llega el momento, sí. No soy escritor social ni no social. Si hay una cosa que me llega escribo de ella. Pero en ningún momento creo que la poesía sea un instrumento para transformar el mundo. La poesía a la larga lo transforma todo. Hacer una poesía crítica porque el mundo es duro, no. Puede ser que como ciudadano discrepe con un gobierno, pero como poeta no se me ocurre escribir en contra de ese gobierno.
ųƑEl arribo del próximo milenio qué poema le sugiere?
ųNi lo veo, ni me importa porque no creo que llegaré a él. Creo que la vida cada vez es mejor. Ahora hay una cosa que jamas voy a entender, que es todo ese mundo cibernético. Pero imagínese que yo no llegué ni siquiera a la máquina eléctrica.
''Espero que en el próximo milenio las personas sean más libres y en ese sentido soy optimista."